Hola Mhfran, a ver si puedo ir respondiendo a tus preguntas.
* Con respecto al Vanguard, el soft close no te plantea problema si ya estás dentro. El problema (o más bien engorro) te puede venir, vistos los antecedentes, cuando lo absorba el otro Vanguard. Cuando se produjeron las anteriores absorciones en la gama de fondos de renta fija, hubo que andar listo para traspasar antes de que se realizara la absorción porque en caso contrario la absorción se consideraba, por lo que sé, como reembolso y suscripción a efectos fiscales, con el consiguiente paso por la ventanilla de Hacienda. Puedes esperar a entonces para hacer el traspaso (no reembolso) o hacerlo ya. El traspaso dentro de la propia gestora debería ser rápido, incluso podría ser un switch (salida de un fondo y entrada en el otro con la misma fecha), aunque no sé cómo va esto en MyInvestor. Puedes preguntar a Clarisa Sekulits, que es de MyInvestor, en el hilo de MyInvestor en este mismo foro (de la atención telefónica al cliente me fiaría menos). Y de paso pregúntale también si el iShares es traspasable.
* Hablas en tu post de buscar algo estable. Si te refieres a estabilidad en la composición de tu cartera, nada que objetar. Pero si te refieres a estabilidad en los rendimientos, no cuentes con ello. Espera más bien, porque te la vas a encontrar (no sé cuándo), una caída del 40-50-60% ... que a la larga se recuperará (salvo que el mundo se vaya al garete), pero el plazo puede llegar a ser muy largo. Afortunadamente para ti, tienes muchos muchos años por delante.
* En cuanto a añadir algún otro indexado más, la respuesta típica es que añadas un fondo de empresas de menor capitalización (small caps), como por ejemplo el Vanguard Global Small-Cap Index (IE00B42W4L06), para así cubrir no sólo todo el mundo sino también todas las capitalizaciones. Para iniciar una cartera no lo considero necesario, y si me apuras incluso prescindiría del de emergentes. No porque me parezca mala idea, sino porque creo que en los primeros pasos conviene dar prioridad a la simplicidad de la cartera; cuanto más sencilla mejor. Facilita el aprendizaje y la sistematización de los procedimientos de gestión de la misma. Y una vez que uno se va sintiendo cómodo y “al mando”, puede ir añadiendo ingredientes (la traspasabilidad de los fondos hace que esto de ir desglosando piezas no resulte problemático).
* Con respecto a la renta fija, tal como está el patio, quizá sea más prudente optar por más corto plazo, como el Vanguard Global Short-Term Bond Index cubierto a euros (IE00BH65QP47). Pero en tu caso, que es dinero nuevo, incluso puede que sea mejor que lo dejes en liquidez. Eso sí, en tal caso considera esa liquidez (por ejemplo en la cuenta de MyInvestor, separada de la que uses para tus gastos corrrientes y tu reserva para imprevistos) como parte de la cartera, a efectos de calcular rentabilidades, determinar pesos porcentuales y hacer los reequilibrados (o “rebalanceos”, como dicen algunos con un mal calco del inglés).
* Y llegamos a lo más peliagudo: el porcentaje que dediques a renta variable. 80%, que es el que propones, acostumbra a ser el máximo aconsejable, y dada tu edad y consiguientemente tu largo horizonte temporal de inversión no puede decirse que sea descabellado. Pero tienes que contar, como he apuntado antes, que puedes experimentar una caída del 40-50-60%. Y por mucho que te digan y te digas que a largo plazo lo recuperarás, si te agarra al comienzo puede que te quiebre por completo la moral y huyas despavorido de esto de invertir en bolsa. Sí, ya sé que uno puede decirse que, dada su fuerte convicción en el resultado final del partido, a él eso no le ocurrirá, que mantendrá el rumbo impertérrito. Yo no apostaría por ello. Como dicen, el peor enemigo del inversor es uno mismo, su psicología. ¿Por qué no ser más benevolente con uno mismo y facilitarse las cosas? Te recomendaría que empezaras con bastante menos y fueras poco a poco y sistemáticamente incrementando tu posición (lo que llaman cost averaging) hasta llegar a ese 80%. Estadísticamente, según diversos estudios realizados, resulta más rentable la mayoría de las veces invertirlo todo al principio (lump sum), pero también es estadísticamente improbable que se nos queme la casa y sin embargo contratamos un seguro. La rentabilidad no lo es todo.
Y otra vez me he despachado con un “testamento”. Espero que al menos te sea útil.