Gotham acusa a la CNMV de confundir conceptos financieros en el caso Grifols.
La firma considera que el regulador de los mercados actuó "con total precipitación" en la investigación y que ha actuado "de forma inusual y con falta de rigor".
Gotham pone en el punto de mira
la actuación de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) en el caso Grifols. Para defenderse en
el proceso judicial que tiene abierto en la Audiencia Nacional, ha presentado al juez un escrito en el que acusa al organismo regulador de
"un garrafal e incomprensible error" al confundir dos conceptos financieros en el informe que sirvió de base para acusarle de manipulación de mercado y abrir la investigación en el tribunal. La alegación ha sido presentada por General Industria Partners (GIP),
la matriz de Gotham, que también está siendo investigada por supuesta manipulación de mercado. El escrito, al que ha tenido acceso El Confidencial, apunta que el Departamento de Mercados Secundarios de la CNMV elaboró un informe en el que
"confunde confirming con factoring y, en consecuencia, atribuye a Gotham afirmaciones que son completamente inciertas, que toma como indicios evidentes de su intención de engañar". El
factoring es un servicio financiero en el que
una empresa vende sus facturas pendientes de cobro a una entidad financiera, a cambio de recibir el dinero de forma inmediata, aunque con un descuento. Por su parte, el
confirming consiste en que una entidad financiera
adelanta el importe de las facturas que debe el cliente a sus proveedores, de tal manera que los proveedores pueden cobrar sus facturas de manera anticipada, descontándola en la entidad financiera. La cuestión es que
confirming es sinónimo de
reverse factoring, que es el término que utilizó Gotham en el informe que ocasionó una crisis bursátil en Grifols que aún perdura. Tanto Gotham como GIP están asesorados en este caso
por Daniel Jiménez y Álvaro Martin, de SLJ Abogados, y Manuel Romero, abogado del Estado en excedencia y exsubdirector de los servicios jurídicos de la CNMV. En su defensa, alegan que, en el informe publicado el 9 de enero de 2024,
el fondo bajista "nunca cuestionó las cifras auditadas" de la farmacéutica, sino que opinó que la deuda financiera neta ajustada, una magnitud no auditada, "estaba infravalorada por diversas razones".
Entre esas razones, apuntaba que "
Grifols excluía las operaciones de
factoring (367 millones de euros)
a la hora de calcular dicha deuda financiera, en contra de los criterios comúnmente aceptados por analistas financieros y agencias de
rating, e incluso la normativa europea". Por ello, entendía que esa cifra, publicada por la propia compañía catalana, debía incluirse dentro de la deuda financiera neta. Adicionalmente, como una cuestión distinta, recuerda que Gotham también indicaba que Grifols no desglosaba datos del
reverse factoring o
confirming en sus estados financieros consolidados. De hecho, el mismo día que recibió el ataque del fondo bajista, la farmacéutica reconocía,
en una comunicación enviada a la CNMV, que esa información no estaba reflejada en sus cuentas porque correspondía a operaciones que no eran significativas para el grupo.
También aclaraba que era inferior a 10 millones de euros.
Sin embargo, en el informe que analizaba
las acusaciones de Gotham, el departamento de Mercados Secundarios apuntó que "uno de los datos incluidos en los ajustes para aumentar la deuda, como es el del
confirming (por importe de aproximadamente 367 millones de euros),
ha resultado desmentido por Grifols", haciendo referencia a la comunicación mencionada anteriormente. Pero, en las acusaciones de Gotham, esa cantidad correspondía al
factoring y no al
confirming. "Según
la CNMV, Gotham afirmó falsamente que el
confirming de Grifols ascendía a 367 millones cuando la realidad es que el importe era de solo 10 millones de euros, y de ello se deduce su intención de engañar", remarcan en el escrito enviado al juez. De ser esa información, sostiene que "se habría producido un grave error en el informe de Gotham", pero entiende que, en realidad,
"el error lo comete la CNMV al confundir factoring y confirming". Añade que es la propia CNMV "quien pone de manifiesto ese error",
a través de otro informe elaborado por
la división de Información Financiera y Corporativa (DIFC) que sí distingue la diferencia entre
confirming y
factoring. El documento elaborado por ese departamento concluye, de hecho, "que Grifols debería haber desglosado la información sobre el
confirming, pero que, al tratarse de menos de 10 millones de euros, carece de relevancia material".
Tras estas puntualizaciones, GIP acusa al regulador de actuar "con total precipitación" en la investigación, que considera que ha gestionado "de forma inusual y con falta de rigor técnico". Interpelada por este medio, la CNMV ha rechazado pronunciarse sobre esas manifestaciones. No obstante,
el expresidente del organismo, Rodrigo Buenaventura, y el director general de Mercados, Ángel Benito, están
citados a declarar en calidad de testigo-perito el 26 y el 28 de marzo, respectivamente. El juez les preguntará por la investigación que se llevó a cabo.
Se da la circunstancia de que el informe del Departamento de Mercados Secundarios que cuestiona GIP fue la base que utilizó la CNMV para
abrir un expediente sancionador contra Gotham y su matriz GIP. Se les acusa de haber aflorado una posición bajista en Grifols el día anterior a difundir públicamente sus acusaciones contra la farmacéutica, vendiendo esa participación solo una jornada después para
aprovechar el desplome de las acciones para obtener rédito económico. El regulador de los mercados envió ese informe a Anticorrupción, que a su vez presentó una denuncia que
fue admitida a trámite por la Audiencia Nacional. El juez José Luis Calama investiga, concretamente, si los inversores bajistas han incumplido
el artículo 284 del Código Penal, que hace referencia "a las conductas relacionadas con la alteración de precios, la difusión de noticias falsas o engañosas sobre personas o empresas, y la manipulación de operaciones financieras que puedan afectar el mercado". Como el proceso contra Gotham y GIP ha pasado a la vía judicial,
el proceso administrativo sancionador de la CNMV ha quedado en suspenso. Por su parte, Grifols
tiene abierto por el regulador un expediente paralelo —por suministrar información inexacta al mercado— que sigue su curso porque no ha dado el salto a los tribunales. La farmacéutica catalana informó en septiembre que la propuesta de sanción por las infracciones que había detectado el regulador no asciende a 1 millón de euros.