AFP-30/01/2024 a las 10:04
El fondo soberano de Noruega, el mayor del mundo, registró el año pasado una rentabilidad récord de 2.222.000 millones de coronas (197.000 millones de euros), impulsada por los valores tecnológicos y la debilidad de la moneda noruega, según anunció el martes.
Expresado en la moneda nacional, se trata de la mayor rentabilidad anual jamás registrada por el fondo, que vio aumentar su valor hasta 15,765 billones de coronas a finales de 2023 (1,395,5 billones de euros).
"A pesar de la elevada inflación y las turbulencias geopolíticas, el mercado bursátil se mostró muy fuerte en 2023, en comparación con el flojo año 2022", señaló el jefe del fondo, Nicolai Tangen, en un comunicado.
"Los valores tecnológicos, en particular, se comportaron muy bien", señaló.
Alimentado por los ingresos petroleros del Estado noruego, el 70,9% del enorme fondo está invertido en renta variable, una clase de activos que registró una rentabilidad del 21,3% el año pasado.
Entre las 8.859 empresas en las que tiene acciones en todo el mundo, los valores tecnológicos, impulsados por la moda de la inteligencia artificial, desempeñan un papel cada vez más importante, ya que representaron el 22,3% de sus inversiones bursátiles el año pasado y el 14,5% en 2019.
Como reflejo de esta tendencia, el podio de sus tres mayores inversiones individuales está formado por Microsoft, Apple y Alphabet, la matriz de Google.
Los bonos, que representan el 27,1% de sus activos, rindieron un 6,1% en 2023, mientras que las inversiones inmobiliarias (1,9% de la cartera) perdieron un 12,4%, lastradas por los altos tipos de interés.
Además de sus resultados financieros, el valor del fondo noruego se vio impulsado en 409.000 millones de coronas por la debilidad de la corona noruega frente a varias divisas importantes.
El fondo también empezó a invertir en proyectos de energías renovables que aún no cotizan en bolsa, un segmento muy marginal en el que ganó un 3,7%.
Según el Instituto de Fondos Soberanos, el fondo soberano de Noruega es el mayor del mundo, por delante de dos fondos chinos.
Ni tan arrepentido ni encantado de haberme conocido