Las mayores manipulaciones son las campañas de marketing que aparecen en los medios de comunicación, y en las que no aparece el aviso de publirreportaje. Está claro que en todos y cada uno de los medios nos encontramos con cierta manipulación. Sin embargo, creo que tenemos que tener claro que Intereconomia juega en otra liga.
El viernes vamos a tener la presentación de los presupuestos, que invariablemente vendrán con nuevos recortes. Una de los aspectos que nos encontraremos es la discusión acerca del impacto de los recortes en el crecimiento.
En este comentario, me gustaría destacar el punto de los escandalosos sueldos de Aena, que han salido a la luz en diciembre de 2010, en la huelga, (que por cierto aún pongo en duda). Está claro que Aena es una máquina de perder dinero
Uno de los temas recurrentes de las discusiones en las que nos encontramos es aquella sobre la abundancia o escasez. En todo caso, la discusión no es en absoluto novedosa, porque es un clásico desde que en el siglo XVIII Malthus llegase a la conclusión de que como la producción de alimentos crecía de forma aritmética y la población de forma geométrica, el desastre era inevitable.
El mayor cachondeo al que asistimos es la supuesta y recurrente preocupación de las autoridades por el precio del petróleo y por el resto de las commodities. De hecho otra vez se habla del riesgo para la economía de la imparable subida de los precios de los combustibles y la energía.
La semana pasada nos hemos encontrado con una carta de un empleado de Goldman Sachs que ha abandonado la entidad y ha manifestado con contundencia unas cuantas actitudes de la entidad hasta el punto de definirla en bancarrota moral.
El caso es que con relativa frecuencia me encuentro en discusiones, (de las típicas de café o copas por medio), en la que se dice: “es que no sé de economía”.
El otro día el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Nuñez Feijoo, apareció relacionada en algunas informaciones en cierta trama de corrupción que todos conocemos. En ese momento, la reacción fue especialmente virulenta, y dijo aquello de quién use su nombre en vano se encontrará en graves problemas judiciales.
En muchas ocasiones nos traicionan los clichés del pasado de una forma que es casi imposible pararla. Tan sólo de esta forma nos podemos encontrar tan extendida una idea que aparece en muchas pancartas y análisis. Se trata de la idea de que es el sistema capitalista lo que está provocando toda esta situación.
Existirán pocos o muchos casos en los que las empresas harán uso de las posibilidades que les da la nueva situación, pero sin embargo, el problema es que la reforma laboral afecta directa e inmediatamente a todos y cada uno de los trabajadores españoles. ¿Por qué?.
Si hemos hablado unas cuantas veces de la necesidad de una justicia que actúe con contundencia frente a los desmanes a los que nos estamos acostumbrado para tratar de evitar situaciones extremas, la realidad es que nos encontramos con una serie de noticias, de las que no se da demasiada publicidad.
Si hay algo que me parece ridículo de este país es la manía de los bandos. Si críticas al PP, resulta que te cae una buena serie de calificativos por ser un izquierdoso, comunista y pseudoprogre. En cambio al criticar lo que hace el PSOE te caen todos los calificativos en el sentido de Facha y demás. Y dos son las cosas que me fastidian de esta dinámica.
Por fin los sindicatos han convocado una huelga general para el 29 de marzo; lo curioso del caso es que esta huelga estaba totalmente descontada por todo el mundo, incluido el propio Rajoy, que recordemos que fue el primero que anticipó que la reforma laboral le costaría una huelga general.
Cierto mensaje que se oye reiteradamente en todas y cada una de las reformas es aquel que nos cuenta que “sólo los trabajadores improductivos tienen que tener miedo a ser despedidos”. La lástima es que este mensaje parte de un error de base importante que no es otro que considerar que el mundo es perfecto.
No deja de ser curiosa la sensación de que estamos en una especie de día de la marmota en el que da igual el cambio que tengamos siempre tenemos las mismas soluciones.En este punto está claro que todas y cada una de las soluciones incluyen una parte referida al empleo que se basa por utilizar el eufemismo de despedir