La muy poderosa Agencia de Protección del Medio Ambiente estadounidense (EPA) denunció el viernes pasado que Volkswagen había manipulado un programa informático que se instaló en unos 500.000 modelos diésel de la marca Volkswagen y Audi, que fueron vendidos entre los años 2008 y 2015 en el país americano. Los modelos que deben ser revisados son las versiones de cuatro cilindros del Jetta, Beetle, Audi 3, Golf y Passat. Según un comunicado dado a conocer por la Agencia, estos modelos emiten hasta 40 veces más contaminantes que lo permitido. Ver noticia en español el diario El País.
Es una violación muy seria, es ilegal y una amenaza para la salud.
EPA.
La noticia en sí es muy grave no sólo porque se impondrán multas de 37.500$ por cada modelo vendido... ¡18.000 millones $!, sino porque una empresa alemana, la número uno en automoción del mundo, y de las más potentes en exportación del país, ha mentido.
En Estados Unidos mentir sale muy caro. Pero atentar contra el medio ambiente ha supuesto la muerte de no pocas empresas y la prohibición tajante de importación de productos.
Y más allá de la multa, que es un palo muy gordo que hoy la cotización ha reflejado abriendo con un -15% antes de desayunar, este desatino tiene un efecto mucho más grave: la pérdida de confianza del consumidor alemán en su marca emblemática. Una quiebra de confianza es una puñalada mortal en la microeconomía alemana y Volkswagen vende muchos miles de modelos en su país natal.
Volkswagen, el vehículo del pueblo, miente como un bellaco para ensuciar el medio ambiente.
El cuidado del medio ambiente y la honestidad son puntales del pueblo alemán. Cualquiera que conozca a los alemanes sabe que este pecado es mortal y tardará mucho en olvidarse. Si se enfadan cuando te equivocas al reciclar, echando los plásticos en el contenedor del vidrio, ¿cómo reacconarán ante la compra de su próximo coche? Un alemán que haya encargado un Volkswagen es muy capaz de llamar de inmediato al concesionario para cancelar su pedido tras leer la noticia, de hecho sería "lo normal".
Afortunadamente, el CEO de Volkswagn ha hecho lo mejor que se puede hacer: admitir los hechos y ponerse a trabajar intensamente para aminorar los efectos del terremoto.
Sería muy raro que Volkswagen no alcanzara los 100€ durante este otoño. Por mi parte me pongo bajista en la empresa y compraré puts a medio plazo. El spread con el DAX es también, en mi humilde opinión, ganador en las siguientes semanas.