Errante, vuelve a leer lo que he escrito porque no lo has entendido... o bien no conoces el cuento de la lechera. Hablo de familias que invirtieron sus ahorros en comprar una segunda casa para sacar grandes plusvalías, haciendo caso a los verdaderos especuladores que les contaban la gran milonga: "La vivienda nunca baja".
Las familias que invirtieron en comprarse un casa para residir en ella en plena burbuja, no son gente pillada por la bajada de precios. Solo son personas que perdieron mucho dinero realizando la mayor inversión de sus vidas en el peor momento posible. Personas que aspiraban a mejorar su calidad de vida y ahora se dan cuenta que han hecho justo lo contrario, hipotecar su futuro por comprar demasiado a la ligera.
Y vivir de alquiler tiene tantas ventajas como desventajas, el poseer en propiedad la vivienda está totalmente sobrevalorado en la cultura española. Una realidad que no se da en países como Alemania donde el 60% de la personas prefieren alquilar (frente al 20% de los españoles), aunque claro... ellos tienen leyes respecto al alquiler serias, nosotros unas dignas del país de la pandereta que somos, que además no se cambian por todos los intereses partidistas que hay en este país para evitar que la burbuja realmente explote.
A mi particularmente vivir de alquiler me permite 2 cosas:
-Independencia geográfica a la hora buscar trabajo: En 6 años he estado en 3 comunidades autónomas diferentes, eligiendo siempre las mejores ofertas de trabajo dentro del territorio nacional. Lo cual me ha permitido formar un curriculum muy superior y también acceder a mejores sueldos.
-Poder tener unos ahorros dignos: El hecho de no haberme casado con un banco para comprar una propiedad sobrevalorada me ha permitido juntar unos ahorros interesantes, que se alejan bastante de "la vida al día" que abunda en mi generación, lo que a corto plazo me permitirá independizarme económicamente creando mi propia empresa.
Que en el futuro me puede interesar comprar, no lo descarto. Pero será cuando considere que las condiciones de mercado son adecuadas, actualmente no lo son.
Y respecto a preguntar a mis padres y abuelos, ni veo a que viene, ni creo que tengas el suficiente conocimiento sobre mi para sacar valoraciones tan subjetivas. Desde el momento en que pasas de una discusión racional con argumentos, a subvalorar la opinión de otra persona solo por su edad entras en el terreno personal y te aseguro que tengo la suficiente madurez para no necesitar entrar en ese tipo de aguas pantanosas.