Me he estado leyendo la carta y, teniendo en cuenta a lo que nos tienen acostumbrados, no está mal. De hecho, está bastante mejor que lo habitual en los últimos tiempos. Por ejemplo, compartir su valiosa propiedad intelectual en lo que se refiere al mercado brasileño, ya hace que destinar tiempo a su lectura merezca la pena.
También vi hace unas semanas el informe anual ese que hacen y eso si que no había por donde cogerlo, una pérdida de tiempo.
El problema que tienen no es que no acierten, es que se venden (comisionean) por encima de sus posibilidades.
Esta gente tiene todo para tener un negocio de por vida, pero se empeñan en complicarlo. Una carta de este estilo -algo más completa- al trimestre, unas comisiones que sean la mitad, un director comercial cualquiera que no sea el actual y serían más longevos que la Coca Cola.