efectivamente muchísima gente no reclama, ya se vio cuando Bankia ofreció un acuerdo amistoso después de la sentencia del Supremo como afloró un número exagerado de afectados que no habían demandado.
Pero también es cierto que los despachos tipo Arriaga hacen cada vez más publicidad y el nº de reclamantes ha aumentado sobre lo que pasaba históricamente.
Y a la banca todavía le queda algún muerto adicional de estos en el armario; me refiero, por ejemplo, a los intereses de demora en tarjetas de crédito, que como no hubo un índice específico para medirlo hasta el año 2011 o algo así, se están considerando en los tribunales sistemáticamente como usurarios los firmados antes de esa fecha al superar ampliamente los que eran intereses normales de préstamos, obligando a devolverlos completamente. Creo que algunas entidades como Wizink tienen un marrón gordo (de hecho, parece que es parte del problema de que no salgan a bolsa). Y cuando llegue al Supremo o al Tribunal de la Unión Europea, pues se va a repetir la misma incertidumbre que con IRPH, cláusulas suelo, gastos de formalización de hipoteca, preferentes,etc,etc.