Llamaba por mi hermano que desde que le descalabraron de crio, en una “drea” que tuvieron los de nuestra calle con los de dos calles más abajo, no quedó muy redondo y ahora se podría decir que es débil mental sin capacidad decisoria, así que yo era su interlocutor.
La pregunta era si la cuenta bienvenida al 3,3% a 3 meses tenia IBAN distinto a la cuenta normal, porque mi intención era decirle a mi hermano, si el IBAN era distinto, que podría cerrar la cuenta antes del 31/12 y no hacer el 720.
Al principio me suelta la milonga de que ellos no asesoraban fiscalmente, le dije que eso lo sabia ya, que la pregunta era tan simple cual la linfa cristalina que circula sobre las guijas de los ríos no contaminados, el IBAN era distinto SI ó NO.
Evidentemente ante una pregunta tan enjundiosa me dijo que tenia que preguntar, me deja en espera y…. se corta la llamada.
Atiendo a otros asuntos y al rato vuelvo a llamar con la gran suerte de que después de la espera me coge el mismo agente, por lo que no tenía que volver a contar lo de la pedrada a mi hermano, así que empecé, feliz como una perdiz, a decirle que era el de antes, que me respondiera y me confirma que el IBAN es distinto.
Ya estaba roto el hielo a medias, porque el susodicho era un poco sieso, entonces ya entro a matar al volapié por derecho y sin recursos y le digo que para aprovechar la llamada si me puede mirar que aunque fui cliente una vez pues eso…. Que pelillos a la mar y si podría contratar la cuenta como nuevo cliente, claro eso ya era de segundo grado, asi que tenía que volver a consultar, me pide nombre apellidos y fecha de nacimiento, me pone en espera y…. se vuelve a cortar.
¿Que creéis que hice? pues levantarme y prepararme un café con bastante sacarina antes de volver a llamar.
Vuelvo a llamar, nueva espera y ya me coge otro agente, a este no lo conté lo de la pedrada a mi hermano, pues tenía acento de Burgos, Soria o un sitio así, le pedí que me confirmara lo del IBAN y ya sin sifón, tinto de 15º como el cariñena, vuelvo a preguntar “qué hay de lo mío”.
Vuelta la burra al trigo, que, si es para nuevos clientes, que tal y cual, esto y lo otro y Maroto el de la moto, le digo que ya lo sé pero que a un compañero…. Y le cuento la peli, me pide, nombre, DNI y email, se lo doy y…. de anonimización nada, me cuenta todo, cuándo fue mi último depósito etc.
Al final me dice, mira yo no te puedo asegurar nada, prueba en abrir una cuenta nueva mañana, por un email distinto y mira a ver si suena la flauta, si no pues la cierras.
Total, que tanto rollo para eso, probaré mañana, os mantendré informados.