Ampliar a 35 años el período de cálculo recortaría casi un 9% la nómina de los futuros pensionistas
El ministro de Seguridad Social ha vuelto a meterse en un jardín a cuenta de la reforma de las pensiones y el compromiso firmado con Bruselas para aumentar los años que se usan para calcular las nóminas. Una medida drástica que se traduce en
recortes en la pensión para la mayoría de los trabajadores y que ayer encontró el rechazo frontal de los sindicatos y provocó la reacción inmediata del principal partido de la oposición, que exigió la comparencia urgente del ministro. El compromiso adquirido con Bruselas ya generó tiranteces en el Ejecutivo a final del año pasado, cuando se filtró que el cómputo para calcular las nóminas aumentaría de 25 a 35 años, medida que fue rechazada de
plano por Unidas Podemos, que parecía haber quedado apartada por las disputas entre los socios. Entonces, la formación morada llegó a amagar con una huelga general si se acometía la ampliación.
Aquella propuesta, que siempre negó José Luis Escrivá, impactaría negativamente en la cuantía de la pensión media inicial de jubilación, que disminuiría alrededor de un 8,6%, según el estudio realizado por el Observatorio de Pensiones de Willis Towers Watson, en colaboración con las universidades de Valencia y Extremadura. Estos expertos han investigado cómo esta medida afectaría, en mayor o menor medida, a determinados grupos de trabajadores según sus diferentes características. La variable más relevante es, según el análisis, la duración de la carrera laboral, ya que las personas con carreras cortas verían disminuir su pensión un 15% frente a aquellas con carreras largas (equivalente a más de 43 años y 8 meses cotizados), que sufrirían la mitad de reducción (7,5%).
El estudio detecta también un posible problema de
«discriminación indirecta» por razón de género, ya que las mujeres presentan carreras laborales más cortas, con lo cual su pensión inicial se recortaríamás de un
30% para las mujeres respecto a los hombres, dicen los autores del informe.
Aumentar los años que se emplean para calcular la pensión es una de las medidas más efectivas para
recortar la pensión inicial de los nuevos jubilados y reducir la tasa de reemplazo (primera pensión frente a último salario) en el sistema de pensiones español, que ahora se sitúa por encima del 80%, según la OCDE. En la práctica esta medida implica percibir rentas menores porque los trabajadores, por regla general, tienen peores salarios en sus primeros años de vida laboral y mejores en los últimos. Como ya informó ABC, el año próximo cambiarán los años que se tienen en cuenta para calcular la pensión y quedarán fijados en 25 años. Desde 2013 se abrió un periodo transitorio hasta el 1 de enero de 2022 en el que el periodo de cotización exigido ha pasado de forma progresiva desde 15 a 25 años. El pacto alcanzado con Bruselas no detendrá el contador y daría continuidad al proceso iniciado con la reforma de 2011.
https://www.abc.es/economia/abci-ampliar-35-anos-periodo-calculo-recortaria-casi-9-por-ciento-nomina-futuros-pensionistas-202111112027_noticia.html