Esto cada uno lo puede ver a su manera, y es libre cómo tal de decidir.
Yo en mi caso, coincido contigo.
Al llegar la pandemia y cómo casero, en los los locales comerciales -oficinas, me "quité" los inquilinos molestos, facilitándoles la salida, y a los inquilinos buenos, les "regalé" dos- tres meses.
A estos últimos digo regalar, porque realmente ellos estaban en cese de actividad, o sea que ni ganaban ellos, con lo que como bien dices, no me parecía lícito, ante una situación extraordinaria, que ganase yo.
SI bien es verdad, que igualmente con estos últimos hable claro y con calma.
Hay dos opciones,
1.- Dejáis el local, y aquí paz y después gloria.
2.- Os doy x meses de moratoria, tras los cuales os tenéis que comprometer y firmar, a no dejar el local, mínimo en x meses.
Yo apuesto por ellos, pero ellos tienen también que apostar por ellos mismos, y responder en consecuencia.
Un saludo,