La verdad es que esta no es la España de los 70s ni de los 80s,en aquella época faltaba de todo y estudiaba una carrera los que habían nacido en una familia que lo fomentara, propicia, a parte de que el chico fuese un buen estudiante con un entorno propicio y claro, que tuviese voluntad y valía para ello. Al cabo de 20 años la cosa cambió e igual que en otros países la universidad atrajo a una mayor proporción de jóvenes, no hacía falta ya tenerlo todo de cara, casi se iba por inercia, antes no, ahí se dio la masificación en algunas carreras que el mercado laboral no podía absorber o la proliferación de alumnos mediocres que terminaron unos estudios sin vocación ni convicción, descuidándose a la vez la FP en trabajos cualificados, hasta ahí todo bien.
Dicho todo eso, es lamentable que un alto porcentaje, da igual la carrera, de alumnos brillantes, o al menos de notable como mínimo, quieran acabar siendo funcionarios en este puto país (habría que exceptuar aquí a +- medio millón de funcionarios con vocación y productividad, no se si llegarán al 20% del empleo público, lo dudo).
El que haya viajado sabe que en gran cantidad de países el anhelo de la gente es tener su propio negocio, eso de " ser uno su propio jefe", aquí uno tiene que ser gilipollas para querer eso, mejor aprobar un examen memorístico porque yo lo valgo y vivir en unas condiciones de resort society, mientras los que te rodean se las ven y se las desean para pagarte el sueldo.