España registra la cifra más baja de nacimientos y la más alta de muertes desde 1941
España prosigue en su declive demográfico con unos indicadores de población comparables a los que hubo en la posguerra. Esos años de hambre y privaciones se diluyen en la memoria colectiva de un país que ahora tiene una de las esperanzas de vida más altas del mundo ( 83 años para los hombres y 80 para las mujeres), pero el descenso de la natalidad que comenzó a finales de los años 70 nos pasa factura. Nunca desde 1941, que es cuando comienzan los registros históricos del Instituto Nacional de Estadística (INE), se habían contabilizado cifras tan bajas de nacimientos y números tan altos de defunciones como hasta 2018.
El Instituto Nacional de Estadística (INE) ha hecho públicos sus datos correspondientes al movimiento natural de la población del primer semestre de 2018, tablas aún provisionales que reflejan que entre enero y junio nacieron apenas 179.794 niños al tiempo que perdieron la vida 226.384 personas. En otras palabras, hay más muertes que nacimientos. Y eso produce un crecimiento vegetativo (la diferencia de muertes menos nacimientos) que también bate todos los récords, pues presenta un saldo negativo de -46.590 personas, el más bajo alcanzado desde 1941.https://www.elmundo.es/espana/2018/12/11/5c0f9767fc6c834a7c8b45fb.html