Entiendo lo que quieres decir, pero aún así la realidad no es como imagina el ciudadano corriente y común.
¿y porqué? porque en la banca de hoy en día, y desde hace ya algunos lustros, los bancos ya no prestan con el dinero que tienen depositado.
de hecho, existen bancos y financieras que no tienen depósitos de clientes, simplemente piden prestado a otros bancos, y después nos lo prestan a tí y a mi.
en la antigüedad, si era como tu expones, pero en la edad moderna, nace la banca de hoy en día, existían bancos que custodiaban efectivo, en aquel entonces oro y plata, y a cambio al cliente, al marqués o conde de turno, le emitían un recibo que equivalía a x monedas de plata u oro. Con el paso del tiempo esos antiguos banqueros, en su gran mayoría holandeses y alemanes, comprobaron que estadísticamente, solo se presentaba al cobro el 20% de esos recibos, de modo que pensaron,que el restante 80% lo podían emitir, pero no en efectivo, sino en otros recibos, de tal forma que creaban dinero nuevo, un dinero que ya no era metálico, sino un papel más o menos oficial, o más o menos digno de confianza, pero por supuesto a un "módico" interés
pero las antiguas compañías de entonces, también hacían lo propio, así que las compañías más boyantes, las compañías de indias, o las mineras, también dejaron de pagar en efectivo, e inventaron otro papel, el pagaré.
este sistema, el emitir letras, recibos y pagares con un equivalente en oro o plata, se mantuvo, si mal no recuerdo hasta la segunda guerra mundial, cuando los bancos centrales decidieron que el papel ya no tendría un equivalente en oro, es decir, antes tecnicamente el poseedor de un dólar o una libra esterlina, podía cambiar ese billete en el banco de inglaterra por su equivalente en oro físico.
y en esas estamos hoy en día, basándonos en billetes que suponen tienen un valor siempre y cuando la inflación no acabe con esos billetes, y en meros apuntes informáticos ¿alguien posee físicamente los títulos de sus acciones? ( en zimbabwe hoy en día una barra de pan vale cientos de millones de su moneda, que al cambio nuestro supongo que será un céntimo) y ya se habla que en Japón están estudiando la desaparición de los billetes, y la implantación única y exclusiva del dinero electrónico, de tal forma que el ciudadano quedará ya por siempre atado monetaria y financieramente a los gobiernos y los bancos, que incluso para fomentar el consumo podrían poner tipos negativos.