Santander, BBVA y CaixaBank se han unido junto a otras entidades internacionales a una iniciativa conjunta con Europol para luchar contra la ciberdelincuencia.
Los tres grandes bancos españoles se han integrado en el Foro Financiero Quantum Safe (QSFF, por sus siglas en inglés), un proyecto del Centro Europeo de Ciberdelincuencia de Europol para abordar la transición a la criptografía post-cuántica en el sector financiero, con especial atención a Europa.
Junto a los bancos españoles, también participan en la iniciativa Barclays, BNP Paribas, la Asociación Bancaria Holandesa (Nederlandse Vereniging van Banken), la Federación Bancaria Europea, el Centro de Análisis e Intercambio de Información de Servicios Financieros (FS-ISAC), Intesa Sanpaolo, Mastercard, Moody's, Novo Banco y Rabobank.
El foro está dirigido, aunque no de forma limitada, a empresas, instituciones públicas y asociaciones europeas, siempre que pertenezcan o estén estrechamente relacionadas con el sector de los servicios financieros.
Comité directivo
El grupo de trabajo se ha constituido con vistas a compartir las mejores prácticas y coordinar las acciones para abordar una transición segura a la criptografía post-cuántica. Está ideado como un espacio seguro en el que sus integrantes podrán colaborar en esta transición, fomentando desarrollos y abordando las amenazas futuras.
La iniciativa estará gestionada por un comité directivo. Estará integrado por Jaime Gómez García, directivo de Santander que ocupará la presidencia del comité; Stewart Hackley (Barclays), Mike Silverman (FS-ISAC), John Beric (Mastercard) y Angela Dupont (Banco de Pagos Internacionales).
Sistemas de cifrado
La criptografía, sistema de algoritmos altamente complejos que encriptan los datos, asegura que la información digital (transacciones bancarias, mensajes enviados, compras realizadas, etcétera) se mantiene segura y no se pueda acceder, interceptar o manipular de forma no autorizada.
A este respecto, se prevé que la computación cuántica impacte positivamente en las empresas y la economía, pero, en paralelo, también se espera que socave la criptografía existente, afectando así a la seguridad de los datos y de los sistemas en todos los sectores.
Algunos expertos calculan que las computadoras cuánticas serán capaces de descifrar una parte importante de los actuales sistemas de encriptado en la década de 2030.
Para hacer frente a este riesgo creciente, el sector financiero está redoblando los esfuerzos para impulsar la criptografía cuántica o post- cuántica, capaz de codificar mensajes usando problemas matemáticos que no puedan resolver los nuevos ordenadores cuánticos.