Al menos el 75% de la exposición total se invertirá en valores de renta variable de cualquier capitalización y sector, de emisores Latinoamericanos, pudiendo invertir un máximo del 25% de la exposición total en emisores no Latinoamericanos. Dentro de la región Latinoamericana, se invertirá más del 50% de la exposición a renta variable en valores de emisores de Brasil, México, Chile, Colombia y Perú. Los activos cotizarán en mercados Latinoamericanos o de la OCDE. Podrá existir concentración geográfica o sectorial.