Gracias a un comentario me he enterado de que GME estaba haciendo cosas divertidas.
Inmediatamente he buscado una estrategia para ganar un dinerito. Pues yo soy partidario del refrán "A río revuelto ganancia de pescadores".
Primero he intentado ver si se podía ganar con bastante seguridad comprando o vendiendo algún call o put spread, pero en ese tema no había nada que rascar.
Luego he visto que el call 320 del 19 de febrero, al que le faltan 3 semanas para su vencimiento cotiza 160$ de valor temporal. Toda su cotización es valor temporal, puesto que no está dentro de dinero. Eso quiere decir que esos 160$, que en un sólo call son 16.000$, se evaporarán en las próximas 3 semanas.
Como no estoy loco del todo y sé que el mercado puede ser irracional más tiempo que yo solvente, lógicamente no me atrevo a vender ese call a las bravas.
Así que he tenido que desempolvar la estrategia del clásico calendario spread.
Se trata de comprar el call 320 de enero del 2022 y vender el call 320 de vencimiento 19 de febrero de este año.
Para comprar este calendario spread hay que pagar alrededor de 20$. En la foto lo tengo montado.
Con el calendario spread estamos cubiertos de cualquier subida loca y absurda, y en tres semanas los 160$ del call de febrero se habrán volatilizado, ya que su valor sólo será su valor intrínseco, que es posible que sea cero. Mientras el call comprado de enero del 2022 seguirá luciendo con todo su esplendor.
Cuando haya vencido el call del 19 de febrero, y estando cubiertos por el call comprado de enero del 2022, podremos vender otro call 320 con vencimiento de marzo, que con suerte puede valer otros 10.000$. Y así durante 10 meses vendiendo cada mes un call.
La posibilidad de acabar esta operación perdiendo es remota. En cambio, acabar ganando más de 20.000$ es bastante probable.
Ahora viene la sorpresa: al poner la orden de compra del call spread me dice que sólo puedo cerrar posiciones pero no abrir nuevas. Parece que los chollos los quieren los creadores de mercado para ellos solos.
A ver si hay suerte y mañana se puede operar, porque sigo pensando que es un chollo que no puede salir mal.
Inmediatamente he buscado una estrategia para ganar un dinerito. Pues yo soy partidario del refrán "A río revuelto ganancia de pescadores".
Primero he intentado ver si se podía ganar con bastante seguridad comprando o vendiendo algún call o put spread, pero en ese tema no había nada que rascar.
Luego he visto que el call 320 del 19 de febrero, al que le faltan 3 semanas para su vencimiento cotiza 160$ de valor temporal. Toda su cotización es valor temporal, puesto que no está dentro de dinero. Eso quiere decir que esos 160$, que en un sólo call son 16.000$, se evaporarán en las próximas 3 semanas.
Como no estoy loco del todo y sé que el mercado puede ser irracional más tiempo que yo solvente, lógicamente no me atrevo a vender ese call a las bravas.
Así que he tenido que desempolvar la estrategia del clásico calendario spread.
Se trata de comprar el call 320 de enero del 2022 y vender el call 320 de vencimiento 19 de febrero de este año.
Para comprar este calendario spread hay que pagar alrededor de 20$. En la foto lo tengo montado.
Con el calendario spread estamos cubiertos de cualquier subida loca y absurda, y en tres semanas los 160$ del call de febrero se habrán volatilizado, ya que su valor sólo será su valor intrínseco, que es posible que sea cero. Mientras el call comprado de enero del 2022 seguirá luciendo con todo su esplendor.
Cuando haya vencido el call del 19 de febrero, y estando cubiertos por el call comprado de enero del 2022, podremos vender otro call 320 con vencimiento de marzo, que con suerte puede valer otros 10.000$. Y así durante 10 meses vendiendo cada mes un call.
La posibilidad de acabar esta operación perdiendo es remota. En cambio, acabar ganando más de 20.000$ es bastante probable.
Ahora viene la sorpresa: al poner la orden de compra del call spread me dice que sólo puedo cerrar posiciones pero no abrir nuevas. Parece que los chollos los quieren los creadores de mercado para ellos solos.
A ver si hay suerte y mañana se puede operar, porque sigo pensando que es un chollo que no puede salir mal.