El gran problema de los impuestos en China

China es un país que vive de alquilar propiedades, no de los impuestos.  Y su PIB depende del déficit comercial con los EEUU.

Hoy miramos a los países enfrascados en una guerra de élite y ya China organizó la reunión del nuevo G7 (BRICS, Irán y Argentina).  Para el observador casual China es la segunda potencia mundial del mundo, algunos dirían que es una lección viviente de que el comunismo puede sostenerse, en lugar de seguir aquella máxima que dice que "el problema del comunismo es que eventualmente no habrá nadie a quien quitarle el dinero" y los que se oponen dirán que "esta vez si es verdadero comunismo" porque obviamente antes lo intentaron y fracasaron, e intentar lo mismo de nuevo seguramente traerá resultados distintos.

Pero hay un problema, la política no es economía, aunque haya quienes quieran decir lo contrario. Las leyes de la macroeconomía no cambian con los cambios políticos.  No existe econmía de derechas o de izquierdas, así que comenzando por este lado, me desligo de cualquier intento de politizar esta conversación para hacerse los ofendidos porque creen que estoy criticando una determinada corriente política.  El problema de la política es que a veces funciona como una secta que tiene sus creencias, que en el mundo político se llama ideología. Y la ideología tiene el problema de que puede no ajustarse a la realidad.  

El gran problema de China es que ha copiado a los EEUU, creyendo que ellos sabían lo que hacían, cuando los EEUU tenían una economía manejada por economistas neoclásicos que cometían barbaridades estadísticas para justificar su creencia esotérica de que sus matemáticas sobreajustadas eran perfectas.  Pero se vino el cisne negro de 2008 y la economía no caminó por el camino de las fórmulas perfectas de los neoclásicos.  Entonces para no reconcer el fracaso, decidieron tratar a los cisnes negros de las crisis como los geólogos tratan a los terremotos.  Todo para seguir sumergidos en la numerología matemática y evitar darse cuenta de que la economía no es sobre recursos ni dinero, sino sobre personas.

Los chinos copiaron muchos de los minijuegos de EEUU y llegaron a ser fabulosos en los minijuegos, pero todos los minijuegos eran microeconómicos.  A nivel macroeconómico ni siquiera los EEUU que viven en su mundo de religión económica habían entendido.  

Tanto es así que Jerome Powell dijo que iban a intentar detener la inflación pero que no garantizaba resultados.  Ya empezaba a sospechar que era así cuando Biden decide cortar las alas a la industria petrolera antes de la ante la inflación del gobierno de Biden. Y lo volví a sentir cuando anunciaron de forma espontánea que iban a subir tipos frente a la inflación hace tiempo.  Y hoy Jerome nos dice que no están seguros de poder detener la inflación.  ¿Y que pasa con la legión de economistas?  Te explico, la inflación puede venir de varias fuentes:

Tomar la solución incorrecta lleva a estanflación.  Entonces si Powell no sabe esto que te está diciendo este simple mortal bloguero, imagínate.  ¿Será que la secta neoclásica ahora no sabe cómo salir del atolladero? Y si China imita a estos, creyendo que saben lo que hacen, y le sumas las creencias de Marx, quien era un tipo de una época en que la economía estaba en pañales, y Marx mismo no debió ser un experto en macroeconomía y política monetaria, imagínate el lío. Y miras a famoso personaje Klaus que gusta de las creencias neoclásicas pero también tiene una figura de Lenin en su casa, quien quiere un nuevo orden mundial siendo que Lenin fue fundador de una URSS que quebró.

Epidemia de un ciego siguiendo a otro ciego.

Si China sigue el marxismo, ¿cómo es que ha llegado adonde está?  Algo debe haber hecho bien.  Sí y no,

Su PIB depende del déficit comercial con los EEUU.  Esto es como si el FMI le hubiera dado un crédito equivalente al déficit comercial de los EEUU con China desde 1979 al 0% de intereses.  Así cualquiera crece.  Es vivir de a prestado.

A eso le sumas que es un país donde no miras a mucha gente pagando impuestos, pues es una economía muy informal.  ¿Cómo sobrevive el país?  Con leasing de bienes raíces.

Así es, nadie es dueño de la tierra, sólo el gobierno.  Firmas un contrato de leasing para vivir en un lugar.  Eso significa que en lugar de recaudación fiscal, pagas tu contrato de leasing y con ello financias al gobierno.

Para los que no saben lo que es el leasing, es parecido a pagar una hipoteca para comprar una casa, pero diferente, porque pagas tu hipoteca y cuando terminas de pagar la hipoteca, la casa no es tuya sino del que te la alquiló.  Y si te retiras del contrato antes de pagar toda la hipoteca, te cobran multas.

Veamos cifras de recaudación por venta de contratos de leasing en billones de yuanes según statista 2022:

El negocio sólo funciona si vale la pena desarrollar las tierras, y sólo vale la pena si hay infraestructura para la gente que vivirá allí.  Entonces los gobiernos locales están en un frenesí de construir infraestructura para que vengan desarrolladoras y puedan recaudar dinero al vender los contratos de leasing.  Eso crea un frenesí de infraestructura de gobiernos locales.  Y eso ha creados las famosas ciudades fantasma.

Para desarrollar esas tierras necesitan una gran inversión, pero los gobiernos locales no pueden emitir bonos, y no reciben dinero sino hasta que venden los contratos de leasing a los que van a vivir allí. Y entonces hacen cosas "creativas" para ponerlo en un lenguaje apto para toda la familia.

El gobierno local monta una empresa privada, le pasa activos de gobierno, como efectivo, tierras o acciones de empresas para capitalizar la empresa.  La empresa usa esos activos como colateral (garantia) de un préstamo.con un banco y pide un préstamo. Y el dinero prestado financia proyectos de infraestructura.  Y los bancos empacan estos rpéstamos y venden bonos respaldados en estos préstamos. En 2019 estos bonos constituían 39% de todos los bonos en el mercado chino y el 60% eran de bienes raíces de desarrolladoras que necesitaban construir en terrenos que les fueron dados en leasing por gobiernos locales.  Indirectamente estos bonos están respaldados por el PCCh.  Y esto tira la deuda pública al sector privado, lo que maquilla las cifras de deuda vs PIB.

¿Ahora entiendes por qué el caso de Evergrande era tan inquietante?  No se trataba meramente de un problema de empresa privada y ya.

El problema es que estos son gobiernos locales y no el gobierno del país.  Y puede haber bancarrota debido a las limitaciones para generar ingresos.  Mientras el valor de la tierra suba, no hay problema con este sistema, lo que causa que aún las prácticas financieras más imprudentes tendrían ganancia.  Pero con las cuarentenas estrictas, los negocios sufren, y el ingreso del gobierno sufre. La confianza en los bienes raíces ahora se ve manchada con casos de quiebras muy prominentes. Esto hace que menos gente quiera invertir en propiedades, y se construye menos y esto significa menores ingresos para el gobierno, y los bancos ya no están interesados en tener estos bienes como respaldo. 

Entonces han tenido que impulsar más proyectos de infraestructura para compensar los daños de la cuarentena. Esto significa más dinero que se va, menos que viene, y menos opciones para recaudar mientras tanto.   Este es un mercado de bonos de $19 billones construido sobre la base de crecimiento perpetuo.  Ahora el gobierno central debe salir a rescatar a los gobiernos locales para salvar la reputación del partido.  ¿Qué pasa si un día no puede rescatar?

Compara esto con el mercado global de securities respaldados en hipotecas es de $11 billones y verás que el tamaño del asunto es crítico.  Es mucho mayor que el PIB de China.  A esto se suma el problema de vencimientos de contratos de leasing. ¿Qué hacer con la tierra ahora?  Originalmente el dinero iría al gobierno de nuevo, lo cual es impopular. La creencia popular es que no pasaría porque es muy impopular.  Pisos con 20 años para que venza el leasing cuestan lo mismo que pisos a los que les falta 70 años.  ¿Y qué pasa cuando vence?  La regulación no indica si hay que pagar una tarifa o no al renovar el leasing.  Si no cobran la tarifa, habrá menos ingresos fiscales.

El gran problema de todo esto es que la gente no paga impuestos.  Sólo el 2% de la población paga impuestos sobre sus ingresos.   

La mayoría tiene empleo en economía informal.  Tiendas pequeñas, trabajos en granjas, y trabajos que se pagan en efectivo o por wechat. Y la gente en el otro extremo recibe cheques y lo pasa por activos que reducen masivamente su carga fiscal. La gente en medio tiene un empleo formal y no tiene los medios para evitar pagar impuestos. 

No han querido poner solución al tema de la evasión fiscal porque consideran que el dinero en manos de particulares impulsan actividad de negocios. Y buscan crecimiento económico.  Pero en cualquier momento pueden investigar a la gente para silenciarla si abre mucho la boca.

El problema que todo esto trae no sólo es la injusticia, sino que limita mucho el control del gobierno sobre la economía. Esto evita que pueda haber un control macroeconómico en cualquier dirección que no sea hacia arriba. Esto dificultaría mucho el control sobre la economía porque no puedes ofrecer incentivos fiscales para empujar en una dirección u otra.

A esto se suma que los altos precios del leasing de pisos sirven automáticamente como  mecanismo de control de natalidad, porque evita que se pueda mantener a un hijo en una situación de crisis demográfica.  Y con la salida de empresas y un desempleo del 18% entre jóvenes, primero los jóvenes empezaron a unirse con corrientes sociales como Tan Ping y finalmente Bai Lan (La desesperanza del nuevo orden mundial, la rebelión de los jóvenes y su impacto económico).

Desde que China empezó a copiar a occidente en los minijuegos económicos, lograron ampliar y hacer el minijuego más sofisticado, lo que obviamente magnifica los efectos negativos de esos minijuegos.

Lo primero que no pudieron ver es que la economía es primero que todo acerca de mejorar la condición del ser humano, la economía al servicio de las personas, y no al revés como predicaba la ideología de occidente.  Y por eso hoy tienen seres humanos en necesidad y problemas porque el minijuego funciona mientras haya crecimiento eterno, otra premisa ideológica creada por occidente.

De esta manera China se encuentra en un predicamento por varias razones:

Ahora que empieza la batalla entre occidente contra los BRICS, China ofrece una puerta abierta para el resquebrajamiento del bloque.  Aunque occidente también está jugando juegos extraños, como los que llevaron a Napoleón al año 1812. Y a como China imite minijuegos, podrían estar hundiéndose solos.

¿Qué opciones hay para China?  China tendría que empezar a renunciar al marxismo como ideología, pues el marxismo es otro invento de occidente.  Y debería aprender macroeconomía nacional y mundial. Tendría que dejar de copiar y desarrollar.

Y teniendo la cantidad de gente que tiene, tendría que empujar esa amplia clase media, que se logra con empleos, y para asegurar el alimento tendría que cambiar su rumbo hacia una corriente más agrícola y no tan industrial.  Es que lo agrícola seguro les trae recuerdos de cuando eran pobres, pero es que sin comida no se puede vivir.  Y ya han dañado muchas tierras.  Occidente siempre ha despreciado al campesino y eso lo copiaron en China, y debe cambiar.  Y también deberá desarrollar consistencia, y visión de largo plazo, en lugar de jugar minijuegos políticos.

Eventualmente el tema del bienestar humano no será un tema político sino la base de la política monetaria. La otra opción que tiene es seguir jugando minijuegos copiados de occidente y ser un país pobre que se disimula con el subsidio del déficit comercial cuyo gobierno vive de un fraude de Ponzi que evita que China tenga descendencia.  Copiar minijuegos económicos e ideologías marxistas de occidente en sólo 70 años ha llevado a China a niveles que pronto serán insostenibles.

En 2023 se avecina una era de cambio para el mundo. Antes le decían a la gente común que debía abrazar y aceptar el cambio.  Pero ya no. Los gobiernos del mundo tendrán a sus jerarcas sufriendo cambios incómodos causados por situaciones insostenibles de larga data.  Y China no es la excepción.  ¿Por qué 2023?  Es que a como Europa sobreviva el invierno, la batalla de bloques occidente vs BRICS va a dar un giro de 180 grados y si no están preparados con problemas solucionados, veremos a occidente atacar sus debilidades sistémicas y explotar el cortoplacismo y la inconsistencia.

La rigurosidad operacional en el mundo financiero, libre de fraudes, no será un tema de reputación, sino una herida abierta para que occidente explote debilidades (El futuro de la banca: Se evaporan ahorros de 400 mil personas en China y no pasa nada).

Los políticos y las élites de ambos bandos se sienten tan a salvo de cambios este año.  No importa.  Los ciudadanos del mundo tenemos paciencia y eso nos da tiempo para comprar las palomitas de maíz para mirar el espectáculo. ¿Y qué me lleva a decir esto?  Bueno, ya viste cómo he explicado la necesidad de cambios en China, que estoy seguro que los mismos chinos, o incluso el PCCh entenderían.

Podría hablar de cambios en otros países, y de por qué occidente debe renunciar al gran reseteo si quiere sobrevivir, pero he decidido empezar con China, porque occidente no se va a molestar, y los chinos aunque se molesten van a ver las ventajas de que alguien les hable sin tapujos, porque la information warfare no sirve, y porque no estoy siendo ofensivo.  2023 va a ser igual de incómodo para los jerarcas de todos los demás países de los dos bloques, occidente y BRICS. 

Pero eso, pequeño Adam, es otra historia.