He vivido casos en los que, por no consultar el Departamento de Siniestros con el Abogado, el caso se perdió, el que más me dolió era un tema claríssimo de fraude al Seguro. Los abogados no nos solemos implicar personalmente en los casos que llevamos, pero aquel pleito me afectó muchíssimo. Por no alargárme diré que era un caso de autorobo, el asegurado en connivencia con un taller, desmontó todas las piezas del coche y declaró el siniestro por robo, los restos tan sólo el chasis, dijo el asegurado aparecieron en un descampado, lo tenía a todo riesgo y había que indemnizarle por pérdida total del vehículo. Levantó sospechas al Perito el empeñó del asegurado en quedarse con aquellos restos, alegando que había comprado todas las piezas en un desguace. El perito acudió al taller y pudo comprobar como aquellas piezas eran las originales de aquel coche, incluso tomó muestras de cables cortados que casaban perfectamente con el corte de los restos de los cables del coche.
Pues bien el pleito se perdió porque no pudimos probar la procedencia de esas piezas que obraban en nuestro poder y que fueron incautadas por el perito de las piezas supuestamente de desguace compradas por el asegurado que se encontraban en ese taller. Si hubiesen consultado con el Departamento de Asesoría Jurídica, nos hubiéramos personado con un Notario en el taller, para que diese fé de la procedencia de esas piezas incautadas, tan simple como eso. Pero bueno, yo tampoco culpa a nadie, pues el perito lo hizo lo mejor que pudo, pero me dejó sin pruebas.
Volviendo a mi tema, te diré que no me siento cabreada, empiezo a estar acostumbrada, pues es la tercera vez que me pasa algo así y con distintas aseguradoras, los otros dos temas afortunadamente no terminaron en pleito, uno se encuentra aún sin resolver, y se trata de las controvertidas bajantes, el seguro de la comunidad dice que las humedades provienen de mi bajante y mi seguro de hogar que se trata de la bajante general, una por otra la casa sin barrer y la perjudicada soy yo. En estos casos lo que debería de hacerse es que alguna de las dos Aseguradoras me arreglara los desperfectos y,luego repitiera contra la otra, si efectivamente las dos lo tienen tan claro que se demanden, pero que no me dejen a mi sin cubrirme el riesgo.
El otro tema me indemnizaron después de pasar un calvario, un seguro individual de accidentes en el que solicitaba para mi padre una indemnización por incapacidad permanente al haber quedado mi padre en silla de ruedas tras una caída accidental, aunque mi padre murió al mes del accidente no reclamé por muerte, por que dos peritos médicos me indicaron que era díficil probar la relación causa efecto entre la caída, la operación de cadera a la que tuvo que ser sometido tras la misma y la muerte por septicemia ocurrida un mes después. Asi que sólo reclamé por la incapacidad. La tramitadora alegó que mi padre antes de la caída estaba enfermo de Alzheimer, por supuesto así era y nunca lo negué pero mi padre andaba y se movía perfectamente antes del accidente y, así lo podía acreditar con informes médicos, después de muchas ida y venidas a la Compañía su última palabra fué no cubrimos el sinestro. Una semana después, cuando ya preparaba el pleito, sin ninguna notificación previa por parte de la Entidad, consulto la cuenta bancaria y veo que La Aseguradora me había hecho una transferencia por el importe de la indemnización, me costó sangre, sudor y lágrimas que me pagara.
Por todo ello, como podrás ver, no se trata de una situación si no de varias y con distintas aseguradoras.
Tu dices que no generalice, pero a las pruebas me remito cuando examino la cantidad de consultas que teneis por temas de exclusión de cobertura. Pienso que mi principal error consistió en contratar a través de un agente amigo y, por hacerle un favor a él. Ahora todas mis pólizas las tengo en la Aseguradora donde trabajé tantos años, ahora espero que si tengo algún problema pueda resolverlo hablando con mis antiguos compañeros, es triste pero es así.