El movimiento municipalista que se presentó a las elecciones al 50 por ciento junto a Podemos en la candidatura de Ahora Madrid se ha rebelado ya abiertamente contra Manuela Carmena.
En un comunicado durísimo, publicado en Twitter, Ganemos Madrid -coalición a la que pertenece la delegada de Cultura, Celia Mayer,- arremete contra la alcaldesa con la misma contundencia que lo hace contra el PP o la "caverna mediática".
"Al éxito de las maniobras realizadas por estos dos agentes está contribuyendo la escasa valentía de la alcaldía y de una parte del Ayuntamiento, que se pliega a las demandas de la propaganda mediática, explicando lo ocurrido como sendos errores, por el tipo de público al que se dirigía el espectáculo y por dar cabida a una representación 'de características inadmisibles y deleznables', en palabras de la propia alcaldesa", señala el comunicado.
"Frente a estos ataques con los que la caverna mediática quiere contrarrestar el desprestigio del PP ante la opinión pública, es difícil entender la actuación del Ayuntamiento de Ahora Madrid. Contribuir a la judicialización del episodio de los títeres, culpabilizar a los actores, criticar su espectáculo y cesar a cargos de la organización del carnaval, supone una actitud poco valiente y de aceptación de la ideología de los que han provocado la situación de deterioro económico, social y de recorte de libertades de nuestro país. Si somos incapaces de defender los derechos civiles y la libertad cultural, ¿cómo vamos a trasformar las condiciones económicas y sociales?", se preguntan.
El comunicado concluye: "Ahora Madrid, lo mejor de la sociedad madrileña te está echando un cable. No mires hacia otro lado. Recuerda que la tibieza, si es prolongada, se convierte en omisión, cuando no en complicidad. Los y las madrileñas de bien apoyan y demandan una política que tenga claro que se trata de cambios profundos, no de maquillajes".
Minutos después, Podemos Madrid ha emitido, por su parte, otro comunicado en el que defiende la actuación del consistorio madrileño y a la alcaldesa, a la vez que se felicita por la puesta en libertad -que ha decretado el juez Moreno- de los dos titiriteros.
El Ayuntamiento de Madrid cometió una serie de errores como ya ha reconocido. Lo primero que ha hecho ha sido cesar al programador cultural y director artístico, encargado y responsable de monitorizar las obras contratadas y el ámbito donde iban a tener lugar. La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, pidió disculpas públicamente, y el Ayuntamiento ha abierto una investigación para esclarecer lo sucedido con la intención de depurar responsabilidades y evitar situaciones similares en el futuro. El mismo día en el que se expone la obra, el Ayuntamiento de Madrid se personó ante las instancias judiciales para colaborar en pos de la reparación de cualquier efecto lesivo que pudiera haber afectado a las familias allí presentes, dado que el público allí presente era infantil. En ningún caso esta actuación guarda relación alguna con la decisión judicial que impone los cargos de enaltecimiento del terrorismo, por los cuales estas dos personas ingresan en prisión.
Poco antes, y tras conocerse la decisión de la Audiencia Nacional, Carmena ha escrito este comentario en Twitter, del que se ha hecho eco a su vez la cuenta de Podemos Madrid, no así la de Ganemos, que parece haberle declarado ya la guerra abierta a la alcaldesa.
Carmena, no obstante, recordó el lunes que Ahora Madrid no es un partido político. "No tenemos una disciplina de partido", aunque la "posición última" del Ayuntamiento es lo que ella manifiesta. Por tanto, es hasta cierto punto normal que se expongan diversas opiniones. Ya ocurrió, de hecho, cuando se votó un plan urbanístico en Chamberí. Pero ahora, en plena crisis por este asunto, esta fractura palpable no ayuda precisamente a la alcaldesa y su equipo.
Cronología de la división en el Ayuntamiento
Viernes. Un grupo de padres se acercan con sus hijos a ver la obra La bruja y don Cristóbal, de la compañía Títeres de Abajo, a la Plaza de Isabel II. Era una de las actividades programadas por el Ayuntamiento de Madrid para celebrar los Carnavales. Los titiriteros que representaron la obra acabaron detenidos por un presunto delito de apología del terrorismo. El Ayuntamiento interpone una denuncia contra ellos por incumplimiento de contrato; una de las personas que acude a los Juzgados de Plaza de Castilla es la propia Celia Mayer, según cuenta ella misma un día después.
Sábado. La responsable de Cultura da explicaciones a la prensa. Se muestra "indignada" por lo ocurrido; anuncia el cese fulminante de las dos personas que habían programado esta obra como infantil y afirma que su "responsabilidad política" en ese momento era tomar las decisiones que habían tomado "de manera contundente y rápida: la paralización inmediata de la obra; en segundo lugar, la demanda que hemos interpuesto en los juzgados y, en tercer lugar, el cese de quien tiene la responsabilidad política directa de esa contratación, que son los programadores".
El mismo sábado el juez de la Audiencia Nacional, Ismael Moreno, decreta la prisión incondicional sin fianza para los dos titiriteros por un delito de enaltecimiento del terrorismo y otro cometido con ocasión del ejercicio de derechos fundamentales y de las libertades públicas garantizadas por la Constitución.
También el sábado, tras las palabras de Mayer y la decisión del juez, Ahora Madrid emite un comunicado en el que defiende a los titiriteros y la crítica política en el carnaval.
Domingo. El PP interpone una denuncia contra Mayer por "colaboración en un delito de enaltecimiento al terrorismo y desprotección de menores e incitación al odio".
Cinco concejales de la formación - Carlos Sánchez Mato (concejal de Economía y Hacienda), Montserrat Galceran Huguet (concejal en los distritos de Tetuán y Moncloa), Pablo Carmona (concejal en los distritos de Moratalaz y barrio de Salamanca) y Rommy Arce Legua (concejal de Ahora Madrid)- firman una carta, enviada al diario Público, en la que reclaman al Ayuntamiento perseguir "de forma activa" la liberación de los titiriteros.
De madrugada, la responsable de Cultura publica un tuit en el que se muestra arrepentida por la denuncia que ella misma interpuso contra los titiriteros por incumplimiento de contrato. La edil afirmaba en ese texto que se había puesto en contacto con los servicios jurídicos de la empresa pública Madrid Destino, que ella misma preside, "para pedirles que estudien la retirada de la denuncia". Y es que Mayer manifestaba que "no se puede justificar bajo ningún concepto la utilización interesada que se está haciendo de este caso ni la desproporción de los cargos que se les imputan".
Lunes. La alcaldesa, Manuela Carmena, comparece en una rueda de prensa donde pide perdón por el espectáculo contratado, un hecho "inaceptable, inadecuado y deleznable para los niños". No obstante, Carmena deja claro que le parece de una "severidad" y de un "rigor excesivo" las medidas judiciales contra los dos actores de la compañía y añade, sobre la prisión sin fianza, "que no es habitual en estos procesos" y "de una gravedad que sorprende". Deja en el aire el futuro político de Mayer. "A mí Celia me parece que es una concejal que por supuesto cuenta con mi apoyo, pero que es muy importante que veamos si efectivamente puede seguir, o desea seguir o es lo mejor que ella siga en este equipo. Si por el contrario vemos que los fallos no han residido en su actuación, sino en la de su equipo... todo eso lo tenemos que ver. Se trata de poner a las personas más adecuadas en los puestos más adecuados para hacerlo lo mejor posible".
Miércoles. La Fiscalía de la Audiencia Nacional, atendiendo los escritos de los abogados de los titiriteros, pide su puesta en libertad. Minutos después, el juez Ismael Moreno decreta su puesta en libertad.
Carmena, después de ser nombrada cofrade de Honor de la Cofradía del Entierro de la Sardina, dice que no ve razonable destituir a Mayer. "Hablar de dimisiones no es oportuno ni razonable, lo primero es ver quién o qué es lo que no se ha hecho bien y después ya veremos qué tipo de responsabilidades pueden darse".