Podemos gobernará España en las proximas generales

El contrato entre el secretario de Política de Podemos, Íñigo Errejón, y la Universidad de Málaga (UMA) establece claramente que la jornada de trabajo del investigador será de 40 horas semanales "prestadas de 8.00 a 16.00". También se especifica que tendrá como "centro de trabajo habitual el Departamento de Derecho Financiero, Economía Política y Filosofía del Derecho". Pero Errejón ha asistido sólo a dos reuniones y ha realizado sus informes desde Madrid, donde reside.

El documento contractual, al que ha tenido acceso EL MUNDO, señala, no obstante, como responsable último de la labor encomendada a Errejón, a su colega y miembro de la dirección de Podemos, Alberto Montero, profesor de Economía Aplicada en la UMA y director del proyecto sobre vivienda pública en Andalucía que se financia gracias a la Consejería de Fomento y Vivienda del Gobierno andaluz.

De hecho, fuentes de la UMA han asegurado a este periódico que es el investigador principal "quien debe controlar el cumplimiento del contrato y trasladar a la Universidad si el contratado cumple su contrato o no; nosotros no fiscalizamos eso. Él es quien lo propone y quien evalúa su trabajo, además de presentar resultados cada tres meses ante la Junta de Andalucía".

El propio Montero indicó a este medio el pasado martes que es su "obligación rendir cuentas" ante la UMA y la Consejería de Fomento y que no pretende hacer más declaraciones al respecto.

En cuanto al horario de trabajo de Errejón -del que Montero dijo que entregaba sus trabajos a tiempo y con solvencia-, el contrato establece que puede sufrir "modificaciones que, por exigencias derivadas de los trabajos de investigación en curso, que no admitan interrupción que incida gravemente en el desarrollo de los mismos, puedan ser establecidas por el responsable del proyecto".

Respecto al lugar del trabajo también se recoge la posibilidad de realizar su tarea desde otro lugar distinto al estipulado, pero sólo "como consecuencia del desarrollo de la prestación de servicios para el proyecto de investigación".

Desde antes del 16 de marzo en que Errejón figura como personal laboral de la UMA y hasta ahora, el doctor en Ciencias Políticas se ha dedicado, desde Madrid esencialmente, a dirigir la campaña de Podemos para las elecciones europeas y ha cobrado por ello, según recoge la web oficial de esta formación; y luego ha seguido como asesor y representante mediático destacado. El pasado sábado fue elegido por Pablo Iglesias, el líder del nuevo partido, para integrar la ejecutiva compuesta por once miembros.

Desde la UMA sí han confirmado que, como ya informó EL MUNDO este lunes, el director del proyecto de investigación pidió en septiembre la publicación de nuevo de la plaza que ocupa de momento Errejón, ya que éste comunicó su imposibilidad para seguir adelante con el proyecto y su carrera política. El 8 de octubre se publicó en la web de la UMA dicha convocatoria (investigador doctor en Ciencias Políticas con experiencia en investigación en cuestiones de análisis de políticas públicas) y la plaza ha quedado desierta.

Era cuestión de tiempo que aparecieran los detalles del contrato del que disfrutaba el secretario de Política de Podemos, Íñigo Errejón, por el que cobraba más de 1.800 euros brutos al mes sin siquiera pisar la Universidad de Málaga (UMA) que se lo había concedido.

Errejón fue el único candidato y adjudicatario de dicho contrato, creado gracias a la Consejería de Fomento de la Junta de Izquierda Unida y adjudicado por su amigo y compañero de partido Alberto Montero, profesor de Economía Aplicada en la UMA.

Según cuenta este miércoles el diario El Mundo, aquel contrato establecía la prestación de servicios para la Universidad durante 40 horas semanales "prestadas de 8.00 a 16.00" empleando como "centro de trabajo habitual el Departamento de Derecho Financiero, Economía Política y Filosofía de Derecho". Condiciones, estas últimas, que no ha cumplido el número tres de Podemos ni de lejos. Según la información del mismo periódico, Errejón tan sólo asistió a dos reuniones y realizó sus informes desde Madrid, donde reside.

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La versión de Errejón no coincide

Esta información aparece después de que el propio Errejón insistiera en una rueda de prensa que él no tenía "la obligación docente" de estar en la universidad durante esas 40 horas, sino que lo que se le pedía cada tres meses era "rendir cuentas" de sus estudios ante Alberto Montero, su amigo, compañero de Podemos y quien le contrató. Es decir, la información de El Mundo no coincide con el intento de aclaración de Errejón.

Además, según ha podido confirmar Libertad Digital en fuentes de la propia Universidad de Málaga, la única responsabilidad para la contratación de personal con cargo a la Universidad, así como la fiscalización de su tarea investigadora, corre a cargo del profesor del Departamento que propone la investigación. Es decir, que era Alberto Montero, amigo de Errejón y responsable del programa económico de Podemos, el único responsable de fiscalizar el trabajo del investigador.

Las mencionadas fuentes de la UMA, explican también que es el investigador principal "quien debe controlar el cumplimiento del contrato y trasladar a la Universidad si el contratado cumple su contrato o no; nosotros no fiscalizamos eso. Él es quien lo propone y quien evalúa su trabajo, además de presentar resultados cada tres meses ante la Junta de Andalucía".

El contrato, no obstante, recoge la posibilidad de que la tarea a realizar por el investigador se realice desde un lugar distinto, pero sólo "como consecuencia del desarrollo de la prestación de servicios para el proyecto de investigación". En cambio, desde el pasado 16 de marzo, cuando Errejón pasó a formar parte del personal laboral de la UMA, el número tres de Podemos se ha volcado, desde Madrid, a impulsar la campaña política de su partido.

Este mismo martes, el PP de Andalucía reclamó a Errejón que devuelva el dinero que ha recibido por su trabajo de investigador en la Universidad de Málaga, por haber "pisoteado el derecho de igualdad" a la hora de acceder a estas becas y al representar "un mal ejemplo" para el resto de personas que optan a estos puestos. Además, ha anunciado que pedirá mucha más información a la Junta sobre el contrato de Errejón.

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Tanto criticar el "presentismo" de las empresas españolas y ahora resulta que lo importante de un trabajo era dónde había que realizarlo, no el cuánto ni el cómo.

Me extraña que El Economista haya publicado semejante insensatez (aunque cosas más absurdas se han visto). Como todo el mundo sabe (o debiera saber), las entidades no lucrativas están plenamente capacitadas para realizar actividades empresariales. Si alguien lo duda que pregunte a Cáritas o a cualquier colegio concertado.

Una entidad sin ánimo de lucro no puede tener beneficios, aunque sí asalariados.

Lo fundamental: esto es el comunismo: una élite que vive de coña, a costa de los currantes y empresarios. El Rejón este no ha pehado chapa en su vida; como Monedero o Iglesias. Soviet de salón.

Una entidad sin ánimo de lucro puede ejercer actividades económicas y por tanto puede tener beneficios. Es más, si no tuviera beneficios a la larga tendría que cerrar porque le resultaría imposible seguir ejerciéndola.
Precisamente por eso, esas entidades, cuando ejercen actividades económicas, vienen obligadas a tributar por el impuesto de sociedades.
Por último, pregunta a Cáritas o a cualquier colegio concertado si en sus actividades económicas (talleres, lavanderías, venta de libros y material escolar, actividades extraescolares) obtienen beneficios o pérdidas.
No hay campaña más barata para Podemos que toda esta basura infumable. Comprendo que todo esto lo ignore algún forero, pero un diario económico ¿Será cosa del becario?

El secretario político de Podemos, Íñigo Errejón, aseguró ayer que desde el mes de marzo está haciendo un levantamiento de datos de viviendas vacías y un estudio comparado de las políticas de vivienda y la vivienda social, estudio cuyas conclusiones son propiedad de la Junta de Andalucía. Un trabajo por el que está percibiendo 1.825 euros al mes (aunque él asegura que se trata de un contrato de 1.600 euros al que accedió en un concurso abierto al que, por cierto, sólo se presentó su candidatura) de la Universidad de Málaga.

Y ello a pesar de que Errejón reconoció que su contrato de investigación sí estipula 40 horas semanales y que las ha repartido de manera irregular, «hay fines de semana que pasas encerrado y días en los que el trabajo no cunde nada».

Porque es la Consejería de Fomento y Vivienda —cuya titular es la consejera de Izquierda Unida Elena Cortés— la administración que paga estos estudios de investigación en virtud de un convenio con la institución universitaria malagueña.

A pesar de estas explicaciones de Íñigo Errejón, la propia presidenta de la Junta, Susana Díaz, garantizó que si Errejón no ha trabajado lo firmado, «tendrá que devolver el dinero público recibido», siguiendo el mismo procedimiento que el resto de entidades subvencionadas por la administración andaluza. La presidenta quiso destacar el hecho de que Errejón haya sido el único aspirante a la plaza de investigador «llama la atención que para una plaza de celador se presenten miles de licenciados y para un contrato de este tipo sólo se haya presentado una persona».

El presidente del PP andaluz, Juanma Moreno Bonilla, exigió transparencia a la Junta de Andalucía porque se mostró convencido de que hay más casos como el de Errejón, «en el que hay gente cobrando sin trabajar. Una de dos, o este señor está ejerciendo la función y el cometido que tiene que desempeñar o tiene que devolver el dinero». Moreno Bonilla insistió en que hay «más casos» de personas que están cobrando sin hacer su trabajo, «y el tiempo me dará la razón».

También el coordinador de Izquierda Unida, Antonio Maíllo, se pronunció al respecto insistiendo en el mismo argumento utilizado por Susana Díaz, «si no ha cumplido con los requisitos de la beca, deberá devolver el dinero», aunque emplazó a la Universidad de Málaga a confirmar si los estudios se han realizado o no.

La rectora de la universidad malagueña, por su parte, salió en defensa de Errejón asegurando que se trata de un procedimiento absolutamente regulado por la ley .