Sí, a mi también me pasa. La forma que he encontrado de contrarrestarlo es intentar casi nunca decidir entrar un día determinado (salvo que haya alguna oportunidad muy clara por una caída muy brusca). Para ello lo mejor es dejar las órdenes puestas limitadas a un precio que hayas determinado con antelación (aquí sí que le veo algo de ayuda al análisis técnico). Hacerlo así evita el fomo y correr detrás de los precios; y por otra parte al hacerlo con cabeza fría vas a ser mucho más exigente con el precio al que pones la orden limitada. Incluso te puede permitir ser muy agresivo y ponerlo muy bajo, y si hay alguna noticia negativa, algún flash crash o lo que sea, vas a poder conseguir un precio muy bueno y por lo tanto unos retornos mejores (si la tesis es acertada y se llega a cumplir).
Por supuesto, lo mismo aplica para los precios de venta, aunque aquí reconozco que la ansiedad suele ser menor.