Aun le quedan un par de años pero la probabilidad es muy muy baja.
Muy buen recordatorio de por qué no hay que hacerle caso a las predicciones de figuras públicas importantes y que un contexto negativo como el de aquellos días hace que le demos más peso a escenarios con baja probabilidad, pero alto impacto.
Además hay que entender la diferencia entre:
- Su contexto, circunstancias e intereses y el nuestro.
- Ser un buen CEO y ser buen inversionista o un buen pronosticador macro
- haberle atinado a una predicción y haber fallado en la mayoría de las otras predicciones
- haber tenido mucho éxito en un ámbito y tenerlo en las inversiones o en predicciones macro. Esto último me recuerda a una frase de un librito que tiene mas de 130 años:
Se habla mucho de depositar confianza, pero nadie dice qué interés te pagan