No me refiero a "perder las elecciones por un margen", me refiero a llevar a su partido a cero votos.
Vives en una empresa llamada España, donde tus impuestos son el aporte de capital, y tu bolsillo ciudadano reflejará perdidas o dividendos de la gestión. Los gobernantes son la mesa de directivos, por alguna razón se dedicaron a creer que el puesto se diseñó para la propia autocomplacencia, deleite y entretenimiento personales. ¿Qué hace la junta de accionistas con ejecutivos así? Les manda un auditor.
Aqui surge la figura del auditor ciudadano. Una persona sola haciendo eso puede ser fácilmente aplastada, pero cuando son muchas, no pueden ser aplastados.
La gente cree que la única forma de participación política es meterse a un partido y estar en el rango inferior de la jerarquía como tonto útil.
Pues no. El país necesita más auditores, para lo cual no necesita tener afiliación partidaria.
Muchos creen que su labor como auditor será insignificante.
Entre los millones de ciudadanos, la gran mayoría va de la casa al trabajo y viceversa.
Los niños, asolescentes y los muy ancianos raramente participan.
Entre los que quedan, a muy pocos les interesa el asunto como para dedicar tiempo, y a otros tantos les falta voluntad o persistencia para ser auditores.
Eso deja una pequeña minoría de ciudadanos el control del país, y con un auditor más, esa minoría cambia de color, y termina con más influencia de la prevista, debido a la indiferencia de tantos millones.
Ser auditor ciudadano no es pérdida de tiempo.
Empieza por crear auditores.
Los auditores felicitan el buen trabajo y censuran los problemas. No se trata de oponerse a los políticos, sino de guiarles. No se trata de hacer enemigos, se trata de oponerse cuando estén equivocados y apoyarles cuando hagan algo bueno.
Hay formas muy creativas de ser auditor ciudadano. Es hora de ser ingeniosos. A diferencia del anglosajón, que funciona como abeja obediente de colmena con una estructura rígida pero organizada, el hispano es creativo y mañoso. Es tiempo de poner a trabajar esa maña y creatividad.