Coincido en todo lo que leo, a mí me ponen malo muchas cosas de hoy en día, y eso que no soy tan mayor: gente entrevistada en los telediarios diciendo que qué mal está la vida que no se pueden ir de vacaciones, adolescentes pasando dos días haciendo cola por un concierto del que las entradas valen 200 euros, gente enfundada en ropa deportiva carísima quejándose de no poder independizarse, etc etc.
Hace una generación la gente podría pagarse una casa con una hipoteca asequible, pero es que esa gente no se gastaba cientos de euros al mes entre suscripciones, móviles, cenas. Esa gente no renovaba las cosas cada dos años, las aguantaba hasta que se rompían y ya no tenían arreglo...
Sí es innegable que se ha empobrecido la sociedad, pero también hay que reconocer que ha habido un cambio radical de prioridades hacia un consumismo desmesurado. Lo bueno es que eso significa que la gente en el fondo se siente protegida, no tienen la sensación de tener que ahorrar por lo que pueda venir.