Buenas noches. En cuanto al cierre de los ADR de valores españoles más significativos que cotizan en el NYSE. Cierre EEUU en euros y diferencia con España TEF 4,27 -0,17% BBVA 5,88 -0,23% SAN 3,31 1,20% Un saludo!
New Studies Suggest Lambda Variant Could Be Vaccine-Resistant
New Studies Suggest Lambda Variant Could Be Vaccine-Resistant"The Lambda variant equips not only increased infectivity but also resistance against antiviral immunity."zerohedge.com
El Índice de Precios de Consumo (IPC) bajó un 0,8% en julio en relación al mes anterior y situó su tasa interanual en el 2,9%, dos décimas por encima del mes anterior y su tasa más elevada desde principios de 2017, según los datos publicados este viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE), que confirman los avanzados a finales del mes pasado por el organismo.
Con este repunte, con el que el IPC anual encadena su séptima tasa positiva consecutiva, la inflación continúa en niveles desconocidos desde hace cuatro años. De hecho, esta tasa del 2,9% es la más elevada desde febrero de 2017, cuando se situó en el 3%.
A la evolución de los precios en julio ha contribuido, principalmente, el encarecimiento de los servicios de alojamiento y de los alimentos y el hecho de que los precios de la telefonía se mantuvieran estables, frente al retroceso que experimentaron en el mismo mes de 2020.
En el otro extremo destaca el descenso de precios en el grupo de vivienda, que recortó su tasa anual 1,5 puntos, hasta el 9,4%, por la rebaja del IVA en los precios de la electricidad. En cambio, en julio de este año aumentaron los precios del gas, frente al retroceso que registraron en igual mes de 2020.
En tasa mensual (julio sobre junio), el IPC bajó un 0,8% tras cuatro meses de aumentos. Se trata del mayor recorte mensual de la inflación desde julio de 2020, cuando disminuyó un 0,9%. A ello también contribuyó el descenso del IVA en la electricidad, así como las rebajas de verano en vestido y calzado.
La tormenta perfecta hará que el Gobierno deba extender un desembolso de cerca de 5.000 millones de euros en concepto de subida de las pagas para el próximo año. Concretamente, se juntará al comienzo del próximo año la revalorización ordinaria de las pensiones y, para el mes de febrero, la prevista compensación que recibirá el colectivo por la desviación experimentada entre el avance de los precios de 2021 y la subida efectuada a comienzos del presente ejercicio, que ya se asume deberá ser pagada al quedar esta por debajo de la inflación.
En este sentido, la cuantía concreta de este desembolso no se conocerá hasta casi terminar este año, ya que dependerá del comportamiento del IPC en los próximos meses. Y otro determinante, no menor, será la decisión que adopte el Ministerio de Seguridad Social sobre si calcular la compensación de febrero, la conocida como paguilla, con el IPC medio de 2021 o tan solo con la referencia del mes de noviembre, que es la mecánica utilizada habitualmente por la Seguridad Social. A excepción, eso sí, de lo previsto en el real decreto de revalorización de 2021, donde se recogía esta posibilidad de abonar una paguilla a los jubilados el pasado mes de febrero, de haberse producido un desfase negativo entre la subida del año 2020 del 0,9% y la evolución de los precios del pasado año, que cerró con una inflación del -1%, eliminando cualquier necesidad de compensación, toda vez que el colectivo ganó de facto 1,9 puntos porcentuales de poder adquisitivo.
En caso de haber tenido que abonar dicha compensación, el real decreto de revalorización aprobado en Consejo de Ministros recogía ya que además de la revalorización "consagra una garantía de mantenimiento del poder adquisitivo durante el año 2020 en caso de que el valor medio de los incrementos porcentuales interanuales del IPC de los meses de diciembre de 2019 a noviembre de 2020 sea superior al 0,9%". Es decir, si hubiera que haber compensado a los pensionistas en 2021 se habría hecho con la media del IPC de los doce meses mencionados.
Ahora, trasladando esta mecánica a la coyuntura actual y de cara a la revalorización de 2022, contamos por un lado con la previsión de inflación para el conjunto de 2021 que será la medida para la revalorización ordinaria en virtud al acuerdo para la reforma de pensiones que fija como listón la media IPC del año anterior, y que según la previsión de Funcas se situará en el 2,5%. Aquí, según la referencia de Fedea, que estima que cada 2 puntos de subida para las pensiones, el gasto se incrementa en 2.500 millones de euros, por lo que la revalorización prevista alcanzaría los 3.000 millones de euros en el conjunto del próximo año.
Además, si la subida de este 2021 fue del 0,9%, similar a la del pasado año, y se toma finalmente el IPC de los doce meses previos como referencia para la paguilla compensatoria, la desviación prevista a finales del año sería del 1,6% y el coste de ese abono para el mes de febrero ascendería a los 2.000 millones de euros. En suma, las dos subidas costarían a las arcas de la Seguridad Social unos 5.000 millones de euros. Que se sumarían, más allá, a la ya mastodóntica factura anual de pensiones que en el presente ejercicio compromete más de 163.000 millones de euros del Presupuesto.
Sin confirmación del modelo
Este sería, eventualmente, el escenario financiero que se daría asumiendo por un lado como buenas las previsiones de IPC para el conjunto del año y por otro con una paga compensatoria calculada en base a la media de los doce meses anteriores. Sin embargo, fuentes oficiales aún no confirman cuál será el listón para esta compensación, toda vez que históricamente, no se ha efectuado en base a tal promedio sino tomando la referencia del mes de noviembre, comparado con la subida efectuada a comienzos de año. En este caso, el escenario se agravaría para la Seguridad Social en términos de coste de la paguilla y, por ende, del mix de revalorización de prestaciones previsto para el inicio de 2022.
Aquí, volviendo a las previsiones de Funcas, el organismo estima que el IPC del mes de noviembre de 2021 ascenderá al 3,8%. Ello implicaría para esa paguilla de febrero tener que abordar una compensación de 2,9 puntos porcentuales, lo que elevaría su coste hasta los 3.600 millones de euros y llevaría el desembolso total pr las revalorizaciones hasta los 6.600 millones. Es decir, el equivalente a algo más de medio punto del PIB.
La última compensación
Con todo ello, este rally financiero que afronta la Seguridad Social en el inicio de 2022 no volverá a darse. La primera pata de la reforma de las pensiones acordada recientemente en el seno de la mesa de diálogo social recoge en uno de sus puntos fundamentales para la garantía de conservación del poder adquisitivo de pensionistas y jubilados que la revalorización anual de las pagas se realice conforme al avance de la inflación. Sin embargo una modificación en el mecanismo para la subida hará que se ponga fin el próximo año a la paguilla.
El nuevo mecanismo de revalorización eliminará ese factor de incertidumbre sobre si la evolución de la inflación es tal y como se había se previsto, o se producen desviaciones que a posteriori es necesario compensar. Así, para la subida de enero de 2022, ya estaría en vigor la nueva ley según los tiempos que maneja el Ejecutivo de aprobación del proyecto de ley que iniciará en septiembre los trámites parlamentarios para ver la luz, previsiblemente, antes de que finalice este año. Desde ese momento, la revalorización anual de las pensiones no se hará nunca más en base al IPC previsto para ese año sino que se llevará a cabo en función del IPC medio del año anterior.
Por ello, no será necesario volver a compensar estas desviaciones en la previsión, ya que la subida se hará en base a la subida de precios registrada en los meses anteriores y no en base a la estimación de los siguientes, sujeta a la incertidumbre de un indicador que ha demostrado un alto nivel de volatilidad ante los eventuales shocks económicos, como se ha demostrado en 2020 y 2021 con motivo del impacto de la pandemia. Aunque un elemento que sí subyace de este nuevo sistema de revalorización es que habrá periodos del año en el que se pueden producir ganancias o pérdidas de poder adquisitivo, aunque a posteriori, todas estos desniveles se igualan en la subida del siguiente año. https://www.eleconomista.es/economia/noticias/11357875/08/21/El-Gobierno-gastara-5000-millones-solo-en-las-subidas-de-pensiones-de-2022.html
"The time to buy is when there's blood in the streets".[Nathan Rothschild]
Dato muy inesperado y muy duro, veamos en primer lugar las cifras completas:
US Univ. Of Michigan Sentiment Aug P: 70.2 (est 81.2; prev 81.2)
Condiciones actuales: 77,9 (est 82,0; prev 84,5)
Expectativas: 65,2 (est 77,5; prev 79,0)
Inflación a 1 año: 4,6% (est 4,6%; prev 4,7%)
Inflación a 5-10 años: 3,0% (prev 2,8%)
Como vemos muy por debajo de previsiones, tanto que estamos hablando del peor dato ¡desde 2011! mucho peor incluso, por tanto que la baja confianza que había en plena crisis covid reciente. Demoledor. Muy malas también las cifras de condiciones actuales y de expectativas.
Y recordemos que el consumidor es el 70% del PIB de EEUU. Esto confirma lo que JP Morgan advertía el otro día, que según sus datos de alta frecuencia el consumo estaba flojeando y también lo recordó Bank of America esta misma. semana.
Y sin embargo las previsiones de inflación, como ven en lo previsto, es decir muy altas. Se espera una inflación a 1 año del 4,6%. En suma es un espejo fiel de la estanflación sobre la que nos advierte Hartnett cada semana.
Los bonos han subido con fuerza tras la noticia, el dólar ha caído, mientras que las bolsas se mantienen igual, ya que están metidas en un proceso psicológico un poco aparte.
Vean que curioso, el sentimiento por partido votado en las elecciones
Los demócratas no están tan negativos como los republicanos o los independientes.
Lo mala que es la cifra se ve en esta cita de Reuters:
La Universidad de Michigan dijo que su índice preliminar de confianza del consumidor cayó a 70,2 en la primera mitad de este mes desde una lectura final de 81,2 en julio. Ese fue el nivel más bajo desde 2011 y una de las seis caídas más grandes en los últimos 50 años de la encuesta. Los economistas encuestados por Reuters habían pronosticado que el índice se mantendría sin cambios en 81,2.
Eso de ser una de las seis peores caídas de los últimos 50 años no es precisamente para tomar a broma . Y es más esas seis caídas casi siempre coincidieron con bruscos cambios de ciclo económico, ojo con este dato. Y ya saben lo que pienso, que estamos dejando atrás el pico máximo del ciclo expansivo…Una cifra así lo confirma. Evidentemente solo es un dato y hay que ver más cosas, pero es una buena pista.
C. Barraud dice que esta caída viene por la preocupación del consumidor por el COVID y por la subida de precios.
rancamente creo que se está infravalorando por parte de las bolsas, el poder negativo sobre la economía y el crecimiento que vuelve a tener el COVID…
Los fondos de renta variable mundial atrajeron entradas por tercera semana consecutiva en la semana hasta el 11 de agosto, ya que los buenos resultados empresariales y los datos económicos positivos de Estados Unidos impulsaron el sentimiento.
Según los datos de Lipper, los fondos de renta variable mundial atrajeron entradas por valor de 10.120 millones de dólares, lo que supone un aumento del 12% respecto a la semana anterior.
Los fondos de renta variable europea tuvieron la mayor parte de las entradas, recibiendo 5.600 millones de dólares, mientras que los fondos de renta variable estadounidense obtuvieron 2.700 millones de dólares.
Alrededor del 69% de las empresas mundiales han superado las estimaciones de beneficios de los analistas en el segundo trimestre, registrando un crecimiento medio del 143%, con sectores cíclicos como el industrial, el energético y las empresas de consumo discrecional liderando la recuperación de los beneficios, según datos de Refinitiv.
OCBC dijo que los sólidos datos económicos de EE.UU. -con la desaceleración de los aumentos de los precios al consumidor y la caída de las solicitudes semanales de subsidio de desempleo- mejoraron el sentimiento, aumentando las entradas en los fondos de renta variable en la semana.
Entre los fondos de renta variable, los del sector financiero atrajeron 1.050 millones de dólares, mientras que el sector tecnológico tuvo entradas de sólo 359 millones de dólares.
«Los fondos del sector financiero registraron los mayores flujos de entrada la semana pasada, lo que indica una perspectiva positiva por parte del mercado sobre un crecimiento económico continuo y sostenido», según el informe de OCBC.
Los fondos de bonos globales recibieron 12.300 millones de dólares netos, lo que supuso un descenso del 14% con respecto a la semana anterior, marcando la mejora del sentimiento de riesgo entre los inversores.
Los fondos mundiales del mercado monetario registraron una caída del 66% en sus entradas semanales, hasta los 12.600 millones de dólares.
Entre los fondos de materias primas, los fondos de metales preciosos sufrieron salidas de 280 millones de dólares, ya que los precios del oro cayeron esta semana a un mínimo de más de cuatro meses.
Un análisis de 23.770 fondos de mercados emergentes mostró que los inversores compraron 736 millones de dólares netos en fondos de acciones, pero vendieron 447 millones de dólares en fondos de bonos.
El SP 500 por lo menos parece que ha consolidado por fin la ruptura de la resistencia 4.400 y como advirtieron los quants, de manera acertada de nuevo, se mueve durante muchas horas ya dentro del rango 4450-4500. Cualquier bajada por debajo de 4415 a 4400 sería una fuerte señal de alarma. Resistencia muy muy potente en 4500.
El Nasdaq dicen los quants que tiene la estructura más flojeras.
Disney que es un valor de mucho peso, está influyendo de manera positiva tras unos buenos resultados y buenas cifras de suscriptores.
Los bonos han llegado a subir bastante en el nocturno aunque ahora se están arrugando un poco. En cualquier caso en mercado sigue prevaleciendo la idea desde la publicación del IPC de esta semana
El dólar se esta debilitando claramente por la idea antes citada y que es que la inflación tiene toda la pinta de que no está descontrolada, simplemente alta aunque posiblemente de manera transitoria.
Según ha publicado hoy Bank of America viendo los flujos de entrada y salida de fondos, parece que la semana ha tenido un predominio de salida de dinero de crecimiento que se ha dirigido claramente a value.
El petróleo sigue flojo, ante el temor de que la variante delta cause una bajada de la demanda mundial.
Según ING puede haber una pequeña corrección las próximas semanas en el índice de Amsterdam hasta los 748 puntos antes de tirar con fuerza hacia los 900 puntos. Soporta esta opinión el hecho que hay mucha gente fuera de bolsa y otros que han abierto cortos, por lo cual el potencial bajista es limitado mientras que el alcista se verá reforzado con el cierre de cortos y la vuelta a la bolsa de aquellos que han salido este verano.
ING opina que en ese sentido el S&P500 está en una situación similar.
Recomienda aprovechar la pequeña corrección, si se da, para entrar.
No hay forma que el Trilex consolide en un cierre los 9000 puntos. El cierre ha sido de 8999,8 . Ni así cierra por encima de esos correosos 9000, aunque los demás estén en máximos.