El Fondo busca alcanzar una revalorización a largo plazo del capital invirtiendo, al menos, dos terceras partes de su patrimonio total (excluidas las inversiones accesorias en activos líquidos) en una cartera diversificada de valores de renta variable de empresas que tengan su domicilio social en un país europeo, o que desarrollen una parte predominante de su actividad empresarial en países europeos, y que coticen en bolsas reconocidas de Europa. La selección de valores se basa en un proceso de inversión altamente estructurado y claramente definido. El Asesor de Inversiones analiza y utiliza los indicadores cuantitativos disponibles para cada valor del universo de inversión al objeto de evaluar el atractivo relativo de cada uno de ellos. La cartera se construye mediante un proceso de optimización que tiene en cuenta las rentabilidades previstas estimadas para cada valor, así como diferentes parámetros de control del riesgo.