El objetivo de la política de inversión consiste en obtener una rentabilidad en euros. Al menos el 70% del patrimonio del fondo se invertirá en bonos de interés variable denominados en euros o cubiertos frente a esta moneda. Asimismo, también se podrá invertir el patrimonio del fondo en bonos convertibles o bonos con interés fijo, negociados en una bolsa o en otro mercado organizado reconocido de público acceso cuyo funcionamiento se desarrolle de forma ortodoxa dentro de un Estado miembro de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), el G20, la UE o Singapur, así como en fondos de inversión e instrumentos del mercado monetario.