Este año he tenido que regresar un poco antes de mis vacaciones porque el Servicio Común de Notificaciones y Embargos tuvo la mala pata de señalar fecha para el lanzamiento en la primera semana de septiembre. Y no están los asuntos judiciales como para pedir un retraso de la fecha. Antaño podías pedir que lo retrasaran un par de semanas, pero actualmente la maniobra te puede salir rana y costarte dos o tres meses. Y lo peor, que durante ese periodo extra podrían ocurrir cosas desagradables. Hoy, si te señalan una fecha más vale que lo dejes todo y estés ahí como un clavo.
Por otra parte, el lanzamiento no ha tenido nada de particular. Los ocupantes han entregado tranquilamente las llaves del piso a la comisión judicial y se han ido. He firmado el acta de lanzamiento y los operarios han arrancado la puerta antigua y han colocado la nueva puerta acorazada, algo imprescindible en el negocio inmobiliario del Madrid del siglo XXI.
Y ninguna otra novedad reseñable, salvo que como ahora soy youtuber y me lo quiero tomar en serio, tras irse los de la comisión judicial he hecho una pequeña grabación para mostraros el estado de las viviendas recién desalojadas.
A continuación el corto vídeo que he grabado.
En general nadie deja una vivienda en perfecto estado de revista. Salvo mi madre, que se negaba a que nos fuéramos de los apartamentos alquilados en la playa sin antes haberles sacado brillo. Pero normalmente los pisos de subasta suelen quedar bastante feos tras el lanzamiento judicial. Y si han estado habitados por okupas, entonces suelen parecerse más a cuevas de trogloditas que a viviendas civilizadas.
El vídeo ha sido grabado con la primera impresión de suciedad muy reciente, pero lo cierto es que si sabemos mirar estos pisos desahuciados con ojos profesionales, veremos que tras todos esos muebles desvencijados y toda esa mierda incrustada, puede haber buenos pisos.
Creo que este va a ser uno de esos casos. Lo veremos la semana próxima. Lo primero será vaciarlo de todos los muebles, también de los de la cocina, que están destrozados. Lo siguiente será llevar a cabo una limpieza profunda.
Y veremos que hay debajo de toda esa mierda.
El expropietario me dijo que había instalado calefacción nueva, suelo de parquet y que había alicatado el baño y la cocina. Lamentablemente se fue antes de la subasta y el piso ha sido muy maltratado por los okupas. Pero me da la impresión de que las baldosas están sucias pero enteras.
Creo que la cosa va a ir bien.