Hemos llegado al punto de no retorno. Este punto se alcanza cuando cualquier solución que se intenta no consigue volver al punto inicial. En el caso de una crisis mundial significa que hemos ido demasiado lejos y no hay solución para volver a una situación económica de crecimiento estable.
RADIOGRAFIA DE LA CRISIS.
En 1971 Nixon tenia problemas con la creciente dificultad para financiar la deuda. El dólar estaba respaldado por oro, pero eso impedía una expansión en la financiación de la guerra de Vietnam y complicaciones añadidas en el creciente déficit comercial (habían llegado al pico del petróleo de producción propia y seguían consumiendo grandes cantidades de petróleo).
Francia empezó a exigir la devolución de oro al entregar sus dólares al gobierno americano y la situación se hizo insostenible.
Nixón tomó una decisión histórica. Desligó el dólar de su contrapartida en oro y comenzó un nuevo sistema financiero que estaría basado única y exclusivamente en el papel moneda (dólar) sin contrapartida alguna. Mitigó los riesgos con acuerdos con los países árabes productores de petróleo, asegurándose la obligación de comerciar el petróleo en dólares americanos (a cambio de una cierta protección). Arabia Saudi aceptó el acuerdo y comenzó el reinado del petro-dólar.
Inmediatamente comenzó la crisis del petróleo en 1973, que certificó el acuerdo y consagró el dólar como moneda de referencia mundial en el mercado del petróleo.
Durante bastantes años, el petróleo barato permitió un elevado crecimiento mundial, sin que las deudas crecieran de forma desproporcionada. Es verdad que hubo crisis importantes como la crisis Tequila en México (y Latinoamérica), la caída del imperio soviético (que fortaleció todavía más el dólar), la explosión del mercado inmobiliario y bancario japonés, cuando Japón era considerado un rival de peso para los americanos. Pero cada una de estas crisis, no hacían sino fortalecer el sistema fiat con el dólar situado en la cumbre mundial.
Entre los años 1998 y 2000 se sucedieron varias crisis, como la del baht thailandés y posteriormente la burbuja punto com. El remedio oficial era conocido, bajada de tipos de interés para reactivar la economía, una y otra vez.
Pero en 2004, el petróleo barato había comenzado a escasear. Los costes de extracción empezaron a subir y la fuerte demanda producto de la recuperación a partir de 2003, empujó los precios al alza. Los bajos tipos de interés, formaron una burbuja en el sector de los préstamos inmobiliarios, que se extendió por casi todo el mundo en un movimiento sincronizado.
Esta vez, la crisis era mucho mayor, porque combinaba una burbuja inmobiliaria con una explosiva subida de precios del petróleo. Consumir 90 millones de barriles diarios, suponía más de 32.000 millones de barriles al año, que con un precio de 100$ el barril, suponía un gasto de 3,3 billones de dólares en 2008, frente a solo 330.000 millones a comienzos del año 2000 (con precios del petróleo de solo 10$ el barril).
La economía no resistió, la burbuja sub-prime explotó, y los bancos centrales entraron en una nueva dimensión. Para evitar la quiebra del sector bancario americano, se instauró una emisión de dinero por parte de la FED , conocida como QE. Los tipos de interés se bajaron casi a cero y comenzó una nueva etapa en la historia del sistema financiero mundial.
En principio, las emisiones de dinero solo tenían como objetivo salvar el sistema bancario y proporcionar liquidez a la economía para evitar una repetición de la crisis de 1929. Por lo tanto, eran emisiones a un plazo relativamente corto que serían retiradas en cuanto la situación se normalizase.
No tardaron en darse cuenta que esta vez era mucho más complicado. A una QE le sucedía otra y los problemas bancarios se extendían por la eurozona, a pesar de las ayudas del BCE. Hasta que Draghi no tomó las riendas y pronunció su famosa frase, el sector bancario europeo no levantó cabeza. Hubo que salvar varios sistemas bancarios nacionales, pero al cabo de un tiempo, parecía que la situación, por fin estaba bajo control.
La recaída del precio del petróleo en 2014, que culminó con precios de 26$ en Enero de 2016, dejó claro que la crisis era extraordinariamente resistente y cualquier retirada de liquidez, causaba un rápido descenso de la actividad económica.
Draghi se vió obligado a implantar también en Europa , una fuerte QE.
Mientras tanto China aprovechó la crisis de 2008, para inyectar grandes cantidades de dinero con la intención de financiar ingentes proyectos de infraestructura y crecer como si no hubiera tenido ningún problema. Pero la deuda china se disparó hasta extremos difíciles de manejar y al final tuvo que parar .
Este parón, unido al inicio de la subida de tipos en EE.UU. y el inicio de la QT (operación que retiraba dinero del mercado mediante la reducción del balance de la FED), provocaron otra recaída en 2018. Las guerras comerciales iniciadas por Trump contra China tuvieron como consecuencia una fuerte ralentización del comercio mundial, hasta obligar finalmente al BCE y la propia FED a reiniciar su programa de inyección de dinero.
En EE.UU. se volvieron a bajar tipos y se revirtió rápidamente el programa QT. En Septiembre de 2019, una nueva grieta en el mercado de repos americano, impulsó de nuevo un nuevo programa QE4, todavía no reconocido por la FED, para no causar desconfianza en el sistema. Una nueva nube aparece en el horizonte. Las cadenas de suministro están cambiando y China de repente tiene prisa por resolver la situación de los aranceles, antes de que el cambio en las cadenas de suministro sea irreversible. Un órdago será puesto sobre la mesa. O se quitan todos los aranceles o no habrá firma, (solo un cisne negro más).
La deuda mundial ha llegado a unos extremos que se puede considerar impagable y los tipos de interés no pueden incrementarse sin provocar un coma en la economía mundial.
El enfermo esta conectado a la máquina de respiración artificial (inyección de dinero de los bancos centrales) y si se desconecta, muere.
En esta situación terminal, la escasez de recursos (petróleo, plata, oro, cobre, fosfatos, agua dulce, etc) impide una solución drástica. Darle al botón del reset y monetizar toda la deuda mundial para volver a empezar de cero, no solucionaría el problema.
El último intento consiste en utilizar el miedo a la emergencia climática para financiar una transición energética , que nos permita matar varios pájaros de un tiro. Por un lado, sustituimos los combustibles fósiles finitos, por fuentes de energía renovables infinitas, al estar basadas en el sol y el viento. Por otro, generamos multitud de puestos de trabajo al crear una nueva industria. Es necesario subsidiar el coche eléctrico y financiar a las empresas automovilísticas, para que puedan superar unas fuertes inversiones iniciales con ventas aun reducidas. También es preciso implantar una completa infraestructura para recargar los eléctricos.
Y todo este programa tiene que ser pagado con deudas en un sistema que está saturado de ellas. Es imprescindible inocular el miedo, para que la gente acepte una emisión masiva de dinero por parte de los bancos centrales sin perder la confianza en el sistema fiat.
El problema es que llegamos demasiado tarde. Crear una nueva industria y generar unas costosas infraestructuras no solo requiere dinero, también energía procedente del petróleo. En este caso hemos ido mucho más allá del punto medio. Hemos deformado la curva simétrica de Hubbert y estamos agotando la cantidad de reservas.
https://www.rankia.com/blog/pico-petroleo-consecuencias/4377732-teoria-peak-oil-acantilado-seneca
El petróleo barato se agotó y el que queda será bastante más costoso y caro de extraer. Como no hay suficiente para mantener el crecimiento y permitir la creación de infraestructuras, será necesario instaurar una nueva política de prohibiciones y aumentos de impuestos para desincentivar su consumo y reservar los pocos barriles que queden a fundar un nuevo sistema renovable.
En Occidente tenemos un problema adicional. La demografía favorece el decrecimiento, por que los mayores consumen menos y además la población no crece. Hablar de financiación de pensiones y sanidad gratis con los elevadísimos costes que nuestro sistema actual mantiene, es una broma comparado con los ingresos futuros de una sociedad, con menos jóvenes que personas jubiladas. No hay que engañarse. El estado del bienestar occidental está mantenido por la impresora de los bancos centrales.
Un sistema basado en la impresión de dinero sea de papel o electrónico (incluso digital como parece que quieren introducir algunos estados) solo funciona si existen suficientes recursos energéticos. El desconocimiento del peak oil es lo que mantiene intacta la confianza en el sistema. Cuando sea evidente, veremos cuanto dura esa confianza.
Parece que en su último WEO 2019 , la Agencia internacional de la Energia admite el pico del petróleo en 2021, según ASPO Alemania, que ha hecho una interpretación de su informe WEO 2019.
http://aspo-deutschland.de/dokumente/2019-11-21AnalysisOfWEO2019-ASPO-de.pdf
Hasta aquí la radiografía de la crisis generada.
CRONOLOGIA.
Esta parte es pura ciencia ficción. Las variantes de cisnes negros son infinitas. Lo importante no es el como, sino la consciencia de que estamos en una situación terminal.
Un buen dia, un gestor de Vietnam, hasta entonces pasivo con sus inversiones, se levantará especialmente pesimista y decidirá vender su cartera de renta fija y variable. Al ser un conocido siempre-alcista, llamará la atención de sus compañeros, y alguno de ellos, se dejará llevar por un sentimiento bajista y venderá también. La escasa liquidez del mercado, causará una fuerte bajada de la bolsa y varios días más tarde saldrá en todos los teletipos. "Crisis en Vietnam".
La moneda sufrirá y el banco central vietnamita intervendrá. Lo cosa parecerá calmada en unos días y desaparecerá de las noticias. Unos dias más tarde, otro fondo importante de Corea del Sur, se verá obligado a liquidar la cartera , por haber incurrido en riesgos excesivos. Esta vez , Corea del Sur tendrá un importante contagio que incidirá en otra rápida intervención del banco central coreano. Pero poco tiempo después, el problema surgirá en la India, donde quebrará un gran banco, noticia que se extenderá rápidamente. Todo el sudeste asiático, sufrirá fuertes perdidas por el contagio.
Al dia siguiente, Europa amanecerá en rojo y las pérdidas se extenderán por todos los mercados.
El BCE intervendrá y se limitarán las perdidas al iniciar su sesión, el mercado americano.
No obstante, Asia seguirá con fuertes descensos y la preocupación se extenderá al mercado europeo, que esta vez, tendrá fuertes caídas. El inicio del mercado americano acentuará las perdidas y al final de la sesión , el desplome será histórico.
El fin de semana se cerrarán los mercados, para tratar de resolver el pánico. El oro y la plata ascenderán salvajemente y la desconfianza se instalará con fuerza. Después de tres días, se reabrirán los mercados con fuertes alzas, pero a lo largo de la sesión, las ventas tomarán de nuevo el control y los mercados se volverán a cerrar.
Ya no se volverán a abrir, durante algún tiempo.
Un nuevo sistema, con las monedas respaldadas por oro será propuesto como medida cautelar desde el mercado asiático, con el objetivo de restaurar la confianza.
Después de una convención mundial, un nuevo tratado con la redefinición del sistema financiero saldrá adelante. El yuan, el rublo serán parte importante del nuevo sistema.
El crecimiento económico pasará a decrecimiento económico después de la gravísima crisis.
Saludos.
PD. ¿Por qué no ponerle fechas a la cronología?.
Porque puede ser dentro de dos o tres años ... o puede ser mañana. Cuanto más tarde en arrancar peor será la situación y las consecuencias de la crisis. Pero el inicio estará entre hoy y 2024.
¿No podemos seguir como Japón, otros veinte años más?.
El fracking está llegando al cenit y la producción de petróleo de shale oil ha mantenido el incremento de la producción de petróleo mundial en estos últimos diez años. Su cenit representa el pico del petróleo y por lo tanto en los próximos años, la producción de petróleo mundial decrecerá, llegando al final del camino.
¿Y si inventan algo como las renovables y el coche eléctrico ? .
Ya lo han hecho, pero no sirve de nada. Un millón de coches eléctricos ahorran 20.000 barriles de petróleo al dia. 100 millones de coches eléctricos, ahorrarían 2 millones de b/d, insuficientes ni para asumir el crecimiento del consumo de petróleo.
¿Y si empezamos a decrecer voluntariamente?.
Poner de acuerdo al conjunto de las naciones de todo el mundo es imposible. El egoísmo de los países productores impediría un decrecimiento armónico y homogéneo. El sistema capitalista está basado en el crecimiento perpetuo. No funcionaría con un decrecimiento, aunque fuera controlado.
¿Y si encuentran una nueva fuente de energía como la fusión nuclear?.
Sería tarde, mal y nunca.
Si puede que venga una crisis seria, pero saldremos de ella como siempre lo hemos hecho.
Nunca hasta ahora nos hemos enfrentado a escasez generalizada de recursos. No solo petróleo, también elementos importantes en la energía renovables como la plata y el cobre, son escasos. En cualquier caso, la caída, la enorme caída en la concentración de estos elementos en las minas, asegura que el coste de extracción crecerá exponencialmente. La falta de petróleo, sería el culmen de un conjunto de procesos destinados a reducir la producción de manera radical.
Además, en todas las crisis de la historia, nunca hemos sido 8.000 millones de personas. El crecimiento propiciado por fuentes de energía abundantes y baratas nos ha permitido aumentar la población con mucha rapidez y la escasez de elementos vitales, nos impedirá mantener la misma, en los niveles actuales.
Un punto que debería llamar la atención hacia la diferencia respecto otras situaciones históricas es la existencia, ( necesidad ), de los tipos negativos. Algo único en la historia y que conceptualmente , nunca debiera haberse producido, por la incongruencia que supone recibir un préstamo y además cobrar por ello.
¿Y si te equivocas?.
Bueno, nadie es perfecto, pero ¿y si no me equivoco?.