El 7 de diciembre de 2009, Trichet enviaba un aviso a los bancos, diciéndoles que no iba a haber segunda oportunidad y no iban a ser rescatados. Ese mismo día se vanagloriaba del gran trabajo realizado por los bancos centrales y los gobiernos en esta crisis. A la pregunta (bastante tonta) de si los bancos estaban usando las facilidades para especular, simplemente no respondió. Por supuesto, tal explicación no se la creyó absolutamente nadie, porque a estas alturas estaba clarísimo que tanto los bancos centrales como los gobiernos, salvarán a los bancos hasta que no puedan más, ¡e incluso más allá!
Por otra parte el 6 de mayo de 2010, el BCE negó que se hubiese planteado la opción de comprar deuda pública en los mercados secundarios. Por lo que respecta a los riesgos, los veía equilibrados. Ese mismo 6 de mayo de 2010, los mercados financieros en USA se derrumbaron, y nos han contado que fruto de un error informático. Un error de un trader que simplemente no se puede creer absolutamente nadie. Ese derrumbe inmediato del 10% en el mercado se recuperó en cuestión de minutos, de tal forma que no hay otra forma de entender que existió una intervención ajena a los mercados.
El 7 de mayo de 2010, comenzaron a oírse noticias de que los bancos volvían a estar en apuros, y el fin de semana, comenzaron las reacciones; ¡y contundentes!. En total, un fondo de la eurozona y el FMI de 750.000 millones de euros, las inyecciones de dólares del BCE y la compra de deuda pública significativa por parte del BCE. Por supuesto, nadie parece relacionar tan virulenta actuación del fin de semana con el movimiento del 6 de mayo.
¿Qué ha pasado entre el 3 y el 10 de mayo de 2010?. Pues hay dos explicaciones posibles; o se han dado una serie de casualidades que incluyen errores informáticos inverosímiles, caídas a peso en distintos mercados, recuperaciones milagrosas y coincidencia con ajustes terribles sobre la población o bien, simplemente los mercados financieros se han derrumbado y han sido otra vez rescatados.
Sin embargo, la vergüenza está en las palabras de Trichet de ese 7 de diciembre de 2009; “los contribuyentes no aceptarían otro rescate”. La gran suerte para los bancos es que los contribuyentes en esta historia pintamos más bien poquito. Eso es lo que ocurre. Resulta que hemos puesto ¡otra vez! cientos de miles de millones de euros encima de la mesa y automáticamente el lunes 10 de mayo de 2010. Los bancos suben un 20%, la bolsa en niveles record, el petróleo y las commodities también…
¿Quién se ha recuperado?. Pues ¡ese es el rescatado!. En teoría estamos rescatando países, pero en la práctica se están recuperando a los acreedores de los países; ¡Esos que se han lanzado a especular con la deuda pública y los CDS hasta llevarlos a la ruina!. Y en cambio los ciudadanos asistimos impotentes a una situación en la que como siempre nos quedan las facturas, nos quedan los sacrificios y nos quedan los ajustes. Sólo espero que por lo menos nadie pregunte si los bancos van a utilizar los fondos obtenidos para especular; o por lo menos para que el preguntado tenga la suficiente vergüenza para no contestar. ¡Por que la subida record de la historia del IBEX es lo suficientemente contundente!.
¿Qué es lo que ha ocurrido hoy en los mercados financieros y el mecanismo de funcionamiento de este sistema?. Ha sido sencillísimo. Partamos de la base de que los bancos tenían mucha deuda pública de países con problemas, de tal forma que si caen los países, caen las entidades financieras. (recomiendo el post sobre el riesgo de España y el riesgo de Santander).
Teniendo claro que las entidades tienen en sus activos instrumentos de deuda que tienen o van a tener problemas en muy breve, debemos entender el sistema que he expuesto el otro día con los CDS para subir la rentabilidad de la deuda pública. Recordemos que no hacía falta más que intervenir en el mercado de CDS, un mercado de derivados, de tal forma que se subían los precios de los CDS y en consecuencia se subía la rentabilidad de la deuda pública, lo que obligaba a los estados a incrementar las rentabilidades de los nuevos títulos a emitir.
Pues realmente lo que ha ocurrido esta semana es el proceso contrario, de tal forma que el acuerdo, (que por cierto aún va a tener que pasar por unos cuantos parlamentos), supone que los CDS bajan de precio. Esto es lógico porque los CDS son los seguros de impago de la deuda, que bajan por tener a toda la UE avalando dichos instrumentos.
Estos CDS han servido para reducir la rentabilidad de la deuda de los distintos países, de tal forma que la rentabilidad de las deudas de los países con problemas ha caído a peso. Evidentemente esto, significa automáticamente que los bonos de los países suben de precio de forma proporcional a la caída de la rentabilidad. Tenemos que entender que el precio de los bonos no es importante mientras se busca obtener la rentabilidad, pero si cuando nos queremos deshacer de ellos, (igualito que las famosas participaciones).
Pues automáticamente tenemos una subida de precio de los bonos espectacular, unido a una situación en la que se necesita liquidez, y sólo nos falta comprador para dichos activos.
Y en esta es donde entra el Banco Central Europeo, que el mismo día, aunque unas horas más tarde, acuerda decir digo donde dijo diego y afirmar que va a proceder a comprar bonos tanto de deuda pública y privada en el mercado secundario.
Por supuesto, el precio de la deuda pública es hoy muy superior al del viernes pasado, gracias a la maniobra de referencia. Y automáticamente hemos logrado traspasar al banco central unos activos que el viernes estaban cerca de ser considerados tóxicos, (recordemos que la deuda de Grecia ya era bono basura).
En definitiva, para los Bancos que tenían deuda pública, el resumen es que han generado rentabilidades altas mientras las han tenido en cartera, y ahora resulta que después de obtener las rentabilidades altas, obtienen la plusvalía, derivada de la subida espectacular del precio de los activos y se las endosan a los bancos centrales, a la espera de que los problemas de los países empeoren. Ahora da igual si Grecia, España o Portugal hacen default o abandonan el euro.
¿Va a servir para algo?. Pues la realidad es que los mercados financieros parece que no se han parado ni a pensar en eso. ¿Qué más da?. Tenemos dinerito fresco y punto pelota. Por supuesto, por lo de ahora ganan una pasta y además se quitan un bonito marrón de encima.
Y todo con los santos cojones de vendernos que hemos salvado países, euro, y no sé cuantas cosas más, unido al santo morro de decir que han ido en contra de los especuladores, cuando en realidad lo que han hecho es beneficiar a los especuladores, montar un cirio en la bolsa acojonante y sobre todo cargar a los ciudadanos con unas cuantas facturas y sacrificios que van a ser la defunción y la ruina de los países, (problema que cree la banca que ahora no tendrá).
En la segunda parte del post, que será para mañana, trataré de explicar si por lo menos va a servir para algo y toca pedir ayuda para saber qué demonios podemos hacer. En todo caso, la realidad es que ojalá Trichet, el ECOFIN, y demás se dedicasen a hacer la guerra a los ciudadanos como yo, mientras apoyan a los especuladores. ¡Saldríamos ganando!.