Staging ::: VER CORREOS
Acceder

 

Una de las consignas, chistes o explicaciones más acertadas de  la situación de este país la he visto en una pancarta que resume la situación de este país:

“¿Cuáles son las tres salidas de un universitario en España?; ¡Por aire, por mar y por tierra!”.

Pues a esta frase le podemos cambiar el universitario por unos cuantos colectivos más y resume perfectamente la situación de un país en el que estar informado y de buen humor a la vez empieza a ser una tarea complicada. El problema viene después tratar de adivinar “a donde nos vamos”. Y la respuesta está clara.

Yo particularmente estoy mirando cual es el mejor camino para llegar al mundo de los “juristas” españoles. Lo malo es que no acabo de encontrar el camino para llegar a este mundo tan particular, y empiezo a pensar que en realidad es algo parecido a lo de la religión. Este otro mundo en el que viven, puede no ser físico y ser algo mental o etéreo. En definitiva sería un mundo al que llegaríamos con mucho alcohol, drogas y una lobotomía.

Todo esto viene porque cuando crees que ya no te puede sorprender ningún análisis o conclusiones, la realidad viene y te supera. ¡y que nadie se crea que la superación es con foto finish; son superaciones en toda regla y por todo lo alto!.

La noticia es que “los juristas alertan de los riesgos de la excesiva protección a los consumidores”.  Y esta frase la sueltan en España, y en el contexto de las relaciones con las entidades financieras, (¡ole, sus partes nobles!). Vamos a ver si nos aclaramos que estamos en un entorno en el que las entidades financieras están haciendo lo que les da la gana, que no tienen porque acatar los informes negativos de una entidad que les hace cuatrocientos mil favores como es el banco de España y en el que tenemos a cientos de miles, (por lo menos), atrapadas en una burbuja, o en cuatrocientos mil productos en el que se han esquilmado a los ciudadanos, (ya sea  en los que han dejado ahorros, como en los que han pedido prestado).

Estamos en un país donde tenemos reclamaciones colectivas y denuncias colectivas por SWAPS, suelos ridículos y por la colocación de productos “que son como imposiciones a plazo”, (según las entidades), y que han sido autenticas ruinas como los valores Santander, cedulas hipotecarias de la Caixa, deudas y obligaciones subordinadas de varias entidades, fondos conservadores de Banif, por no hablar de bonos Islandeses, derivados que finalmente resultaban ser deuda de Lehman…. (y seguro que me olvido de alguno). Y todos estos casos, por referirnos a los que afectan a miles de personas, que si luego bajamos al terreno y nos ponemos a mirar seguros colocados a cada persona a precios y en condiciones desastrosas, comisiones que no se podrían cobrar, planes de pensiones ruinosos que sirven de contrapartida para las operaciones de las entidades y demás pequeñas cosas, la realidad es que hablar de protección al consumidor en este sector y país es ya un gran recochineo.

Que en este país el consejero delegado del Santander está condenado (sin cumplir la condena y a la espera de indulto  y con un acuerdo en el que se soluciona el tema con una multa de 3.000 euros; este post estaba hecho antes del cambio que se ha producido el jueves), por meter en la cárcel injustamente a unas personas, y donde se reconoce que las entidades financieras mienten en sus balances. Y al final donde tenemos  el compromiso firme de protegerlas con todo. ¡en este país se habla precisamente del problema de protección de los consumidores!.

Ya sólo con las conclusiones de esta jornada, a uno se le quitan las ganas de seguir en este país. Pero si entramos en materia, la conclusión es sustancialmente peor. Lo primero es que en lugar de juristas, lo que nos encontramos es toda una colección de vende humos de parte, que tienen de todo menos jurista. De hecho, lo único parecido a un jurista, es un juez de la audiencia provincial de Barcelona, que lo que dice es que en la reforma de la ley concursal lo que debe hacer es blindarla para que el juez no pueda decir nada, (que para esto ya los bancos dicen lo que hay que hacer y ¿Qué pintan los jueces opinando?).

El resto de las declaraciones recogidas son de Campa, (el secretario de estado de economía que no sabía de macroeconomía), que nos suelta lo de siempre. Si hacemos cualquier cosa contra los bancos tendremos la reactivación del crédito, (clásico comodín para todo como he explicado y que en definitiva es siempre mentira), y dice que para solucionar los problemas de los consumidores hay que acabar la reestructuración financiera, (darles armas y presupuesto para que las entidades cojan lo que quieran, pasar el 20% de paro a otros sectores y la consolidación fiscal).

Luego Jesús Quijano, ponente en la Comisión de Justicia del Congreso, afirmó que "el endeudamiento de la persona física, merece un tratamiento especializado, sobre todo, a efectos de declaración de concurso y liquidación". Claro que  después de reconocer esto nos cuenta que se decidió pasar del tema ya "que introducir esta materia en el contexto de la reforma produciría una alteración del proceso concursal que tendría efectos no deseados, especialmente, en materia de seguridad jurídica". Que vamos, resulta que tenemos un problema y como siempre, lo que interesa a los bancos es que no les toquen una normativa en la que pueden hacer con toda seguridad lo que les da la gana, a pesar de que como ya he comentado también tienen el rostro más duro que el cemento armado para defender según les convenga tanto la seguridad jurídica como la desregulación.

Y por supuesto no podía faltar la consejera del Banco de España que llega a la conclusión de que "es imprescindible dotar a la refinanciación bancaria de un marco normativo que ofrezca mayor seguridad jurídica para incentivar a las entidades". Esta consejera, que por cierto está para regular a las entidades financieras, va a tener que explicar en su opinión que es lo que se puede hacer para dar mayor incentivos a las entidades financieras. Quizás la pista la tengamos en que define todo los procedimientos como formalistas, y supongo que en definitiva para tener un sistema de reclamaciones en el que poco pueden hacer las personas, lo quitamos y prohibimos a la sociedad reclamar contra las entidades financieras, bajo la premisa de que los bancos saben y que si alguien resulta ser engañado es porque se lo merecía.

Pero la mayor estafa es que todas estas personas no son representantes de la banca, sino que son representantes públicos de los ciudadanos, (incluidos los que se suponen que deben regular a la banca), y que por cierto se supone que antes de ponerse a decir cuatrocientas mil tonterías para vender motos con tal de ofrecernos patéticas excusas para justificar salvajadas invendibles deberían echarle un vistazo a un par de artículos de la constitución;

El 39 dice algo así como que: “Los poderes públicos aseguran la protección social, económica y jurídica de la familia”, (y creo que se refiere a las familias españolas y no a la familia “botín”), y el 51 que nos dice: “ Los poderes públicos garantizarán la defensa de los consumidores y usuarios, protegiendo, mediante procedimientos eficaces, la seguridad, la salud y los legítimos intereses económicos de los mismos”.

¿Qué se puede opinar de estas personas a la luz de los hechos?. Respecto a sus obligaciones, me quedan dos opciones; o simplemente no tienen la más remota idea de lo que se supone que deben hacer y a quien deben representar o no les importa lo más mínimo. O problema de inteligencia o problema de engaño, (y no son excluyentes).

Y respecto a su visión de la situación de las relaciones entre banca y el resto de agentes económicos en España, o son rematadamente tontos, o son rematadamente infames. En todo caso, difícil es superar una situación que se explica perfectamente desde el momento en que son estas personas las que toman las decisiones.

9
¿Te ha gustado mi artículo?
Si quieres saber más y estar al día de mis reflexiones, suscríbete a mi blog y sé el primero en recibir las nuevas publicaciones en tu correo electrónico
  1. en respuesta a Falcata
    -
    #10
    Madoz
    01/12/11 17:19

    Voy a contar un símil extrapolable, para que se entienda lo que es sentido común y lo que no.

    Yo trabajé una temporada, en una cadena de producción.
    En una de las máquinas, había una Sierra que cortaba.

    Uno de los elementos de protección, consistía en un guante supuestamente de acero, que debería de establecerse en la normativa de seguridad y salud laboral.

    Por curiosidad, hice una prueba, pero apagando la máquina y utilizando simplemente la tracción o inercia de la máquina después de apagada, con el guante o sistema de protección, con la sorpresa de que el guante se cortaba y me hacía un pequeño corte en la mano, lo que suponía que me hubiera segado la mano, si la máquina hubiera tenido el funcionamiento habitual.

    El guante de seguridad, era una soberana trampa para incautos, porque era mejor no tenerlo y si me hubiere fiado, tendría los dedos cortados.

    Hubiera podido pedir luego explicaciones de porqué, ese guante no aguantó, buscar culpables y contratar "juristas" abogados que me digan lo que quiero oír, pero la mano no me la devolvería nadie, si no hubiese sido consciente de la situación.

    El dinero tiene menos importancia, pero la normativa por muy protectora que sea, no puede nunca sustituir la RESPONSABILIDAD INDIVIDUAL (la otra cara de la Libertad, aunque no guste).

    Rankia sirve para asumir esa responsabilidad individual, como las asociaciones de consumidores y usuarios, pero la culpa es individual y no se puede reclamar a nadie, salvo negocio para abogados(juristas) sin escrúpulos, que convenzan al timado, de lo que quiere oír.

    Si sale bien, que bueno soy; si sale mal, es que, me han engañado, ¿Quién? Alguien.

    Si somos mayores de edad, lo somos para lo bueno y para lo malo.

    Un saludo

  2. en respuesta a Pagano
    -
    Top 100
    #9
    29/11/11 22:58

    Desde luego lo de crear el banco bueno, es una solución... a fin y a cuentas bancos malos creo que no necesitamos más de los que tenemos...

  3. en respuesta a Falcata
    -
    Top 100
    #8
    29/11/11 22:44

    te equivocas en que no hay obligacion de proteger al consumidor. Por que curiosamente si tanto leemos, quizás debamos empezar leyendo la constitución y verás que si está esta obligación.

    ¡escrita!.

    y hombre.. yo no sé en que banco estás, pero estoy seguro que hay mucha gente atrapada con cedulas, participaciones... y demás que ha ido al banco llamada desde la sucursal y que se ha fiado de que no le iban a oclar lo que le colaron. ¡Porque aunque no te lo creas hubo un tiempo donde no esperabas que te estafasen, (y sí, estoy poniendo el termino correcto que se define como "engaño suficiente para obtener una disposición de patrimonio en beneficio propio o de tercero").

    Respecto a lo de MIFID, yo también lo he firmado A SABIENDAS, pero ni los que trabajan en banca, ni todo el mundo sabe lo que es y conozco casos que han firmado la MIFID en medio de los papeles de las cedulas... (por ejemplo).

    Respecto a los avances... vamos a ver si me aclaro. La posibilidad de devolución de recibos ¿en que mejora la situación de consumidores respecto a banca????. ¡Será con otras empresas!. Respecto al derecho de desestimiento, lo curioso del caso es que PARECE que da un beneficio al cliente. El cliente puede desistir en 15 días... pues muy bien.

    Ahora bien, resulta que contrata cualquier cosa... (pongamos valores convertibles de Santander), lo cual fue vendido como un producto seguro, casi una ipf, que tenía todas las ventajas y ningún riesgo...), durante 15 días, no hay problema. Pero claro, mas allá de estos quince días. (normalmente los problemas vienen al cabo de un tiempo), es cuando empiezan los problemas y es cuando la gente se da cuenta de lo que se ha llevado. El derecho de desestimiento, normalmente es un derecho inutil, (¿cuantos desestimientos conoces?), pero a cambio da seguridad jurídica al eliminar la posibilidad de contrato nulo.

    Respecto a la ley de Transparencia, yo no soy el que hace la trampa, sino que ha sido el gobierno. Los tribunales están dictaminando determinados casos como clausulas abusivas. Son clausulas que imponen unas condiciones desequilibradas y por esto se están anulando, porque partimos de la base, (espero que no se discuta), de una situación de fuerza de la entidad financiera. Pues resulta que ante una situación en la que se están produciendo sentencias por causas abusivas, hay dos caminos:

    O se evitan los abusos o se evitan las sentencias por los abusos. Y la ley de transparencia lo que hace es evitar lo segundo.

  4. en respuesta a Yo mismo
    -
    #7
    29/11/11 22:24

    tal vez efectivamente vivamos en mundos diferentes, yo opino desde ambos lados del mostrador, he sido bancario, y he sido cliente, he sido jurista y he sido ciudadano que pide consejo legal, conozco, aunque nunca sobradamente las dos versiones.

    Te puedo decir dos normas a bote pronto, que seguro que hay muchas más, una por ejemplo la obligación de informar de precios y tarifas, algo obvio, pero que antes no existía, te puedo hablar también de la posibilidad de desistimiento dentro de los 15 días siguientes de un contrato bancario, esto antes tampoco existía y esta norma es muy reciente.

    en los últimos años, aunque no lo creas se avanza hacía adelante, hace años por ejemplo no era obligatoria la entrega de la oferta vinculante previamente a la firma.

    no lo recordarás quizás, porque parece que existe de toda la vida, pero hace años no podías devolver un recibo domiciliado, luego se podía hacer dentro de los veinte días siguientes....ahora hay hasta 60 días naturales.

    otra norma - esta europea - que también favorece al usuario, es la normativa SEPA de transferencias entre países de la unión europea, que ahorra tiempo y costes.

    aunque no lo creas se va hacía adelante.

    si la ley de transperencia no te vale, entonces das a entender que quieres hacer trampa, y me explico, yo como cliente en todos los bancos donde he contratado productos con riesgo de capital, he pasado un test MIFID, y lo he firmado claro, esto está destinado no a proteger al banco, sino a comprobar que el cliente entiende lo que está firmando...y por contrapartida también le vale al banco para demostrar que no te ha engañado.

    Si como leo en rankia alguien dice alegremente que ha firmado un papel donde dice "ESTOY DISPUESTO A ASUMIR PÉRDIDAS" si eso se firma...entonces seré un poco duro.

    sino sabes leer un papel, sino entiendes conceptos financieros básicos, no hay obligación de proteger al consumidor, es el consumidor el que actúa irresponsablemente al entrar por la puerta de un banco, el que no sepa que se limite a actualizar la libreta y no molestar al resto de inversores.

    de todas las hipotecas que preparé en mi época bancaria, NI UN SOLO CLIENTE se molestó en acudir previamente al notario a que le explicara la minuta de la hipoteca - bastante extensa por cierto- y solo recuerdo a dos clientes, ....a dos!!....que tras escuchar al notario leer y explicar la minuta dijeron....¿¿esto significa que si no pago, además de mi casa, también ofrezco mi garantía personal de por vida hasta que salde la deuda?.

    yo no niego que se venda mierda financiera, pero si yo voy a comprarme un ford fiesta, te aseguro que salgo con un ford fiesta, y no con una moto.

  5. #6
    28/11/11 20:35

    Estimado Tomas:

    Todavia queda la traca final, ahora D.Mariano va a crear un Banco Malo, para comprar los activos a la Banca.

    Ya se empiezan a crear las corrientes de opinion oportunas, y digo yo porque no se crea con esos 100.000 millones un banco bueno, y que cada palo aguante su vela.

    Dicho esto el otro dia habia un excelente articulo en el faro de vigo, del ilstre premio nobel Sr.Stigliz, que acertaba al decir que el problema de la crisis no se solucionabe con el credito ya que nos encontramos ante una cisis de falta de demanda.

    Y si los particulares deben 300.000 Euros, mientras no se produzca el desapalancamiento pertienete, o basamos al economia en la exportacion o no va a tirar, y puestos a exportar parece ser que estamos exportanto mano de obra cualificada.

    Todavia queda mucho por ver, pero igual que se le ha regalado NCG, al Sr. Castellano, este pais no es suecia, por l oque me temo que el Banco Malo solo servira para socializar las perdidas y vender los buenos terrenos a precio de saldo a esos que han hecho desaparecer el dinero.

    Esto es una rueda que gira y gira y siempre en la misma dirección.

    Un saludo

    http://www.farodevigo.es/economia/2011/11/25/stiglitz-austeridad-receta-suicidio/600661.html

    www.rentabasica.blogspot.com

  6. en respuesta a Falcata
    -
    Top 100
    #5
    28/11/11 20:09

    A ver si al final estamos en mundos distintos....

    ¿me puedes decir una sóla norma aprobada en los últimos años que mejore la posición del consumidor ante un banco?... Estas hablando de que vamos en un camino, que no se ve.

    Por supuesto... lo de la ley de transparencia esta nueva que han sacado no me vale. Por que cusiosamente valida todas las clausulas abusivas que están tumbando los tribunales.

    Mira. todo el mundo que va a un banco tiene que ir con lo que tu dices, por que resulta que cuando tienen las preferentes, las cedulas, los productos en los que el banco elige todo y la persona no puede hacer absolutamente nada, solo oye... ¿pero como te has fiado?....

    Y ya me dirás que obligaciones tiene que asumir el cliente.. Por que creo que obligaciones, y asumir son palabras que no están en su diccionario...

    En fin...

    Creo que no hay demasiado problema con una excesiva protección al consumidor y no hace falta mucha discusión. Puede que el mundo que veas tú sea un futuro, no lo niego. Pero hoy no lo es.

    es como ponernos a pensar sobre el impacto de una prostitución disparada en Marte. Puede llegar a ser un problema grave en el futuro cuando cambien demasiado las cosas, pero hoy mejor haríamos en preocuparnos de que en los despachos oficiales sea anécdota el que no está ocupada por un hijo de una trabajadora de dicho sector.

  7. #4
    28/11/11 19:11

    yo creo que no han querido decir las cosas tal y como las has expuesto.

    yo desde mi experiencia auguro, que al final para firmar un préstamo personal, tendrá que acudir el cliente, con sus herederos, con su abogado, con un notario, con un funcionario público, con un matemático, y con un traductor jurado....por su parte el empleado del banco tendrá que firmar con la mano sobre la biblia, y varios cables conectados al cuerpo a un detector de mentiras. se admite también pincharle con suero.

    al final todo esto serán obligaciones del banco o de cualquier otro organismo (lease corte inglés, o aseguradora) que tendrá que asumir ante el cliente.

    y lo que dicen es que todo esto reducirá aún más el crédito, y estoy de acuerdo.

    a partir de ahora el banco ya no solo analizará el riesgo de crédito del cliente, las garantías aportadas, y la finalidad del crédito, se sumara una cuarta variante que es el riesgo legal o judicial del cliente.

  8. Top 100
    #3
    28/11/11 15:14

    Cuando se habla de "excesiva protección a los consumidores", tendría que pensarse en "excesivo respecto de un punto de referencia". Lo más risible es que los consumidores como colectivo se muestran implícitamente como "ellos", porque sería absurdo que un jurista hable de "excesiva protección a NOSOTROS, los consumidores".

    Lo que diga el artículo 39 es letra muerta, tinta sobre papel. Es que aunque la literalidad de la ley sea algo muy claro, los abogados tienden a hacer lo que se conoce como "interpretación de la ley", que no es otra cosa que "mi propia deformación de la literalidad" que es puro orwelianismo legal. George Orwell se pasó la vida denunciando el mal uso del lenguaje, y uno del ellos era convertir antónimos en sinónimos. De esta manera, se pierde libertad en nombre de la libertad, se hace guerra en nombre de la paz. Así, aunque la ley protege al consumidor, los juristas empujan su desprotección.

    No son tontos, son infames que se disfrazan de tontos, porque siendo tontos la gente no espera que le claven el puñal por la espalda.

  9. #2
    28/11/11 13:03

    En la empresa echan a seis, servidor incluido. Y pasan a echar a 6 y no a 8 porqué los trabajadores que quedan, renuncian a poder hacer las vacaciones en julio, agosto y septiembre y a partir de ahora las harán en función de los intereses de la empresa, es decir por días y cuando la empresa lo crea conveniente. Una mañana, el responsable que es un inmigrante argentino nos dijo irónicamente que "España tenía una salida: El Prat (Aeropuerto de Barcelona)". En una frase muy parecida a la que citas arriba. Servidor no lo cree. Hasta que nos echen del Euro (Porqué salir, está visto que con estos sinvergüenzas no salimos) y haya una fuerte devaluación, aunque esta sea simplemente por su propio peso, no hay huida que valga, ni Barajas ni El Prat, al menos para mi (Ya en la cuarentena)En este contexto, sólo queda una opción, descartada la fuga. Y llegados a este punto cabe citar una reseña escrita por Valeria, de la novela de Wallace Breem, "El águila en la nieve".

    Esta es una novela sobre "el limes".Y como todas las historias de frontera, es una historia sobre el valor, la soledad y el sacrificio.

    El Águila en la nieve relata la desaparición de la última legión de la Germania Superior, la XX Valeria Victrix, destacada junto al río Rin en un vano intento por contener la fuerza incontenible de las migraciones bárbaras. Aunque en realidad es la historia de su legado, Paulino Gayo Máximo, un veterano soldado romano.Un soldado de esos «cuya palabra equivale a un juramento», un hombre íntegro, tan extraordinario en aquellos tiempos revueltos como la enseña de su legión: un águila de plata.

    La novela está contada en primera persona, con la sobriedad y el estilo franco y directo que se le presupone a un soldado, y podríamos delimitar en ella dos momentos distintos.

    En la primera parte los acontecimientos se suceden de manera trepidante y a ritmo vertiginoso, sin lugar apenas para la reflexión o el sentimiento.De esta manera vamos perfilando ese carácter honesto pero implacable de nuestro protagonista, un pagano en medio de cristianos, un romano que nunca ha visto Roma, un hombre herido por una vieja traición, hasta que somos testigos de su destino al mando de la 1ª cohorte de Tungrios, responsable de la defensa del Muro, en Britania.Mientras en el gobierno del imperio un emperador sucede a otro, las defensas del Muro menguan cada vez más, sin refuerzos, paga, suministros ni nuevas órdenes.

    En la segunda parte el ritmo se ralentiza, el general Estilicón asume el control del Imperio y éste, requerido por acuciantes problemas en otras provincias, recurre a Máximo. Le pone a cargo de los deshechos de una casi inexistente legión, la XX Valeria Victrix. Le entrega el mando, el águila, y dos capas escarlata, y le encomienda que convierta aquellos restos en una legión romana operativa. Su destino: la frontera germana, junto al Rhenus. Allí donde en otros tiempos se necesitaron ochenta mil hombres para contener a los pueblos del norte, seis mil soldados deberán convertirse en la última defensa de Roma.
    Y aquí la historia adquiere un ritmo diferente. Máximo está solo ante el peligro, como el inolvidable sheriff Kane interpretado por Gary Cooper.Ambos son hombres maduros, en el final de su carrera,enfrentados a un problema que llegará inexorablemente. En un caso es un tren, en el otro es el invierno.Si el río se hiela, las naciones que esperan hambrientas al otro lado lo cruzarán y la batalla será inevitable, y a muerte.Máximo se debate en un conflicto moral entre su deber, una cierta comprensión por las razones que impulsan a alanos, cuados, marcomanos y vándalos a cruzar el río y la desesperación que le causa ver que todo aquello en lo creyó desde niño se derrumba a su alrededor. Ambos protagonistas deben afrontar solos al problema porque nadie les va a prestar ayuda.Máximo debe proteger la frontera sin medios,enfrentándose a los funcionarios imperiales, al obispo, a los propios ciudadanos cuyas vidas sabe que están en sus manos, incluso enfrentándose a su propia desolación.Y en ambos casos, película y novela,la obsesión por el tiempo, siempre el tiempo, que transcurre inexorablemente, acercando el momento en que tendrá lugar el enfrentamiento final.La narración se ralentiza, y esa espera nos inquieta.El estilo se hace un poco más personal, las reflexiones ganan en profundidad. Y finalmente llega la hora. Un enfrentamiento narrado de manera magistral.

    «Si puedes resistir esas dos horas, nunca volverás a tener miedo»

    Ni Sólo ante el peligro es un western típico, ni El águila en la nieve es una novela típica de romanos.Qué gran película,qué buena novela.


Definiciones de interés
Sitios que sigo