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Ali, enseñame el SWIFT

A continuación dejo el enlace al único momento interesante de una película sobrevalorada, Jerry Maguire, en la que el deportista Rod Tiwell le decía a su representante lo que quería oír de él: Enséñame la pasta. No no es engañemos, en el fondo se trata de eso. De pasta. Pues algo así parece que esta sucediendo en el Racing, donde algunos jugadores, que acumulan retrasos considerables, llevan ¿semanas? esperando la recepción de una transferencia procedente de Bahrein.

Voy a dejar algo claro. Este no es un post para opinar sobre la solvencia financiera del nuevo propietario del Racing. Simple y llanamente es que no me creo que los jugadores no hayan sido asesorados profesionalmente para que les confirmen si esa transferencia viene o no viene. Es que me resulta duro de creer que en su entorno nadie lo haya hecho, y una tenga la imagen de que no son muy distintos que el pobre trabajador que comprueba ante la pantalla de su ordenador día si y día también que la nómina no le ha llegado a pesar de que su jefe jura y perjura que lo ha hecho.. Pues venga, vaya un breve consejo (y perdón a los profesionales por las simplificaciones) para saber si de verdad ha transferido o no el dinero.

Las transferencias internacionales usan un sistema llamado SWIFT, que no deja de ser un sistema de comunicación entre Bancos. Cabe recordar que en las trasferencias internacionales se usa una mecánica de de corresponsalías. El Banco emisor de la transferencia hace llegar los fondos al Banco de Destino a través de uno o más Bancos corresponsales, en función de los países y divisas involucradas en la operación. Generalmente en dos o tres días la pasta está, al menos en países civilizados y con divisas normales. Pero, colegas, y así entre nosotros, desde el mismo día en que se hace uno puede tener conformidad de la operación.

¿Cómo? Pues pidiendo un justificante documental de la transferencia. Y por supuesto, no me refiero a la orden entregada por el emisor al Banco y sellada por el mismo. No. Me refiero a una copia del mensaje SWIFT que se genera cuando el Banco efectivamente transfiere los fondos. En esa orden se detalla no solo el ordenante, el beneficiario, el importe, la divisa y quien corre con los gastos. También cómo, a través de que Bancos viene la pasta, y muy importante, fecha de llegada. Y una vez el SWIFT se desencadena no hay marcha atrás (bueno, vale, puede haber movida con bloqueos de fondos, pero hablo de operativa normal).

Evidentemente, ya habrá alguno que piense que todo se pude falsificar, que la copia que nos dan es falsa. Pues si, la copia el SWIFT es fácilmente falsificable, pero en palabras de Arnold, noproblemo. A la mañana siguiente del día que el menda dice haberme hecho la transferencia hablo con el Departamento de Extranjero de mi Banco, al cual le debe haber llegado una copia de dicho mensaje SWIFT. Si no es así, alguien se ha pasado de listo. Y a partir de ese momento ya se de que va.

Hoy mismo Pernia les ha llevado a los jugadores una copia de la orden de la transferencia, o eso parece. Supongo que habrá sido la copia de dicho mensaje SWIFT. O mejor y más definitivo, ir con ellos al Banco de destino de la transferencia y que allí les enseñen la pasta, la pasta que está en camino. Alí, enséñales el SWIFT.

 

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  1. en respuesta a Mitucat
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    #2
    29/04/11 21:24

    Y tanto. O no. Se puede no tener pasta pero si dignidad.
    Son increibles las explicaciones que se estñan dando al hecho de que la pasta no haya llegado ni se le espere despues de haber alradeado de haberlo emitido y de tener un justificante de dicha transferencia. Impresionante.
    Si tengo tiempo, igual me marco un post sobre el tema del aval ante el Gobierno de Cantabria.

  2. #1
    14/04/11 14:44

    Yo también recurro a la frase de dicha película en bastantes ocasiones...

    En el mundo del fútbol y otros deportes de masas, la pasta es esencial, y sin pasta no eres nada.