Hubo un tiempo en que las remesadoras, las empresas que enviaban las remesas de inmigrantes al exterior, eran el negocio de moda en España. A algunos les llamaba la atención que esto no se canalizase a través de la potente red bancaria española. Una vez conocías el mercado, lo podías entender perfectamente.
En las transferencias internacionales no existe una cámara de compensación centralizada. Todo funciona a través de un sistema de corresponsalías entre distintas entidades bancarias. En cuanto te sales de la zona euro el asunto se complica con la existencia de múltiples intermediarios, todos los cuales quieren cobrar. Si hablamos de transferencias de bajos importes los gastos fijos pueden suponer una cuantía importante, y en ocasiones incluso es posible que no sepamos con seguridad cual es el importe neto que se va a abonar al beneficiario (si, ya sé que teóricamente con un Ours en el swift asunto arreglado, pero sólo teóricamente)....
Además las Banca española se encontraba con que este era un proceso muy manual, había que detraer recursos de otras áreas para atender operaciones con escaso margen y de clientes poco fidelizados y con un recorrido financiero incierto, por no hablar del peligro de ser usados para el blanqueo de capitales. Al final del boom lo intentó con filiales, acuerdos con remesadoras, automatizando transferencias habituales en cajeros, etc...pero la crisis acabo con el desarrollo de este negocio.
A los inmigrantes tampoco les venia muy bien el marco horario bancario, la rigidez normativa, y, sobre todo, el hecho de que allende nuestras fronteras, en su país de destino, no había una bancarizacion equivalente a la española, siendo mucho más accesible para los destinatarios la red de las empresas de remesas que la bancaria tradicional. Si a todo esto le sumamos la integración de estos negocios en locutorios o tiendas multiproducto atendidas por personal de la misma nacionalidad, lo cierto es que el precio pasaba a un segundo nivel y explicaba el tremendo éxito de estos nuevos operadores de transferencias internacionales.
Pero hoy no vamos a hablar de emigrantes. O tal vez si, pero de otros, de los españoles que se van a estudiar a EEUU. Y es ahí cuando nace una nueva empresa de remesas, la remesadora 2.0, especializada en procesar pagos de estudiantes hacia centros universitarios norteamericanos, peerTransfer.
En esencia el modelo de negocio viene a resolver problemas similares a los que veíamos en las remesadoras originales. De hecho su fundador, Iker Marcaide, de orígen español, ha contado con el apoyo de ejecutivos de Western Union o de PayPal.
Pensemos en un universitario que por primera vez ha de hacer frente a un pago de esta naturaleza, generalmente de una cuantía destacada. En EEUU la crisis ha disminuido el número de bancos, pero digamos que el mercado se caracteriza por su fragmentación a nivel local. ¿Existe alguna alternativa a la transferencia tradicional, más cómoda, con costes similares o menores, y que me permita asegurarme de que llega la cantidad neta al centro americano? A eso trata de responder peerTransfer. Veamos como lo hace.
Entro en su web, indico el importe en dólares que he de abonar, selecciono entre las 150 universidades adheridas a peerTransfer la mía (si no está aquí se acabo todo). Le señalo el país donde esta mi cuenta corriente y la divisa en que se halla, y ellos me indican la cantidad que debo abonarles. Y eso es todo.
No hay una comisión explicita (muy inteligentes) Su margen va incluido en el tipo de cambio, pero aseguran que este es mejor que el bancario y que los costes finales se mueven aproximadamente alrededor de un 50%. Comprobad caso por caso que esto sea así, pero es posible.
Tengo cuatro días para transferirles el dinero a la cuenta local que tiene peerTransfer, es decir, debo hacerles una transferencia nacional. Una vez recibido el dinero, en dos o tres días (yo diría que tres largos) el dinero llegara a su destino, pudiendo trackear todo el proceso desde la web de peerTransfer.
Alguno se preguntará cómo pueden competir con la Banca si, en ultima instancia, estas empresas de remesas, acaban transfiriendo y recibiendo los fondos al exterior a través de una entidad financiera. Fácil, volumen y negociación, como ocurre con cualquier intermediario o mayorista.
Uno manera que tiene de incrementar su margen es recurrir a la compensación o neteo de operaciones. Supongamos que la sucursal española de una remesadora debe transferir a EEUU, como fruto de varias órdenes de sus múltiples clientes, un total de 100. A su vez, debe recibir de EEUU para distribuir en España 75. Finalmente solo emitirá 25 hacia EEUU, pero a todos los clientes se les ha ha aplicado el correspondiente cambio de divisa que finalmente no se ha producido.
En el caso de peerTransfer, en principio estos neteos o compensaciones no pueden ser internos, ya que el flujo tiene un solo sentido, hacia los EEUU, pero estoy seguro que tendrán algún tipo de acuerdo con empresas de remesas, operadores financieros, etc.. para acabar aplicando esta estrategia, una suerte de Kantox interno...
En definitiva, a los universitarios se les ofrece un entorno conocido, internet, una atención multilingüe, un tracking de su pago, la confianza de que su Universidad está adherida al sistema, y unos costes reducidos. A mi me suena bien. ¿Cuáles son los puntos de mejora que le veo? Dos, y están relacionados.
¿Cuantas operaciones va a hacer cada cliente en su vida? Pocas, muy pocas, de un importe relevante pero escasas. No va a haber un goteo de pequeños importes, una fidelización a largo como en las remesadoras originarias. Por ello, como el propio Iker reconoce, están buscando mercados, productos alternativos donde aplicar su modelo de negocio. El problema es la perdida de foco, pero creo que es evidente que algo de esto van a atener que hacer, quizás con una segunda marca, para evitar esta excesiva dependencia y falta de recurrencia.
Además, y aquí está el segundo punto, estas nuevas vías de negocio deben ser bidireccionales, es decir, que permitan, al igual que en las remesadoras originarias de las que hablababamos, que peerTransfer pueda aplicar procesos de neteo, de compensación, endógenos, lo que mejoraría, y mucho su margen financiero.
Desde aquí no me cabe otra que felicitar a Iker y a su equipo.