El viernes pasado estuve muy seriamente pensando en comprarme unas acciones del ADR de Banco Macro que cotiza en Nueva York y esto era porque había elecciones en el maravilloso país austral y me imaginaba que Javier Milei ganaría las elecciones y eso provocaría un alza bursátil, tuve toda la tarde del viernes para pensarlo, pero finalmente la idea no se pudo adoptar porque era un binario.
¿Quién podía asegurarnos que Milei ganaría a Massa? Las elecciones las carga el diablo y la gente cuando va a votar puede salir cualquier cosa por eso no era invertir era apostar y para apostar ya está el casino, las apuestas deportivas o las ampliaciones de capital de Amper.
Así pues no se podía invertir antes o sí, pero era apostar a la ruleta, esperar que saliera rojo o negro y ponerlo ahí todo para doblar, un 50%, ese no es el camino al menos el mío y no me sirve eso de hacer muchas apuestas y si ganas en un porcentaje mayor de las que pierdes entonces el método funciona, no, no funciona simplemente el azar puede sonreírte pero cuando dependes del azar tarde o temprano te llega una serie de eventos negativos y te descapitaliza.
Ya en un post de hace unos meses hablamos de este evento que se acercaba:
Allí sacábamos un listado de empresas que podían invertir, YPF, GGAL, BBAR, LOMA, SUPV, CEPU, MELI, BMA, PAM, DESP, TGS, CRESY, BIOX, IRS, TEO, EDN, todas ellas cotizando en Nueva York y en dólares para no tener que pelear con el tipo de cambio del peso.
Veamos algunos ejemplos de lo sucedido estos días con ellas:
Tras las elecciones un buen amigo contactó conmigo y hablamos del tema de las empresas argentinas, el tema era ver si se puede sacar algo en el corto plazo o incluso si puede ser una apuesta de largo plazo.
Y de eso irá el post de hoy.
Este hombre va a ser el presidente de Argentina:
Su discurso a todos los amantes de la libertad nos agrada al oído, porque muchos pensamos que el problema de Argentina es lo que el consenso europeo considera la solución a los problemas, claro para ello hay que hacer un esfuerzo y salir del enfoque confortable en el que nos movemos habitualmente, ya saben ¿Qué haríamos sin el estado? Ya saben, el estado nos quita el dinero para luego devolvernos, como si no fuéramos capaces por nosotros mismos.
Argentina ha sido destruida por el peronismo una versión austral del estatismo, cuando hablamos de pensadores como Hayek que nos describen en “Camino de servidumbre” como todo eso de la justicia social es capaz de destruir una economía productiva en seguida pensamos, ya está el ultraliberal de turno exagerando, pero cuando vemos Argentina vemos que eso sucede en la realidad, cuando leemos “Democracy in déficit” de Buchanan y Wagner en el que nos dice que una democracia con déficit público porque gasta más de lo que ingresa al final es una democracia en déficit porque al final una parte de la población vive del estado y ya no vota libremente sino que vota a quien garantice que seguirá cobrando el subsidio. Todo eso que nosotros los moderados no acabamos de aceptar se nos convierte en realidad palpable cuando hablamos de Argentina (quizá otros países siguen el mismo camino pero van más lentos)
El tema es que Argentina lleva décadas, casi un siglo en manos de los peronistas, ya saben que los peronistas como todos los defensores de la justicia social tienden a estar muy bien intencionados pero sus realizaciones prácticas suelen estar muy cerca del infierno. Argentina fue el país más rico del mundo cuando tuvo una constitución liberal y se dejó a las fuerzas del mercado desarrollar la prosperidad (piensen en China, aquello es una dictadura pero cuando abrieron la mano a la libertad económica pues ya ven lo que ha pasado, piensen en la España de Franco, una dictadura que era un desastre económico con la Autarquía que solo cuando en 1959 le ceden el poder a los del Opus Dei (liberales) con su plan de estabilización salió adelante económicamente) y se convirtió en uno pobre cuando Eva Perón y sus secuaces empezaron a complicarle la vida a los hombres de negocios y empezaron a implantar sus planes de Justicia Social que consiguieron la igualdad, la de todos pobres. Por supuesto entre un extremo y otro hay miles de caminos intermedios, pero lo que sí es comprobable es como fue la Argentina liberal y como es la Argentina intervencionista y justa socialmente.
Pero es que estos peronistas argentinos el déficit en vez de financiarlo como España u otros países se pusieron a imprimir moneda y eso genero inflación, en concreto la llevaron al 150%, así pues, economía con problemas, con casi la mitad de la población viviendo por debajo del nivel de pobreza y con inflación del 150% la situación es desesperada.
¿Y qué pasa cuando la situación es desesperada? Pues que el que más grite, el que la diga más gorda, el que parezca más contrario al status quo es “nuestro hombre”. De hecho cuando el intervencionismo se pasa de vueltas y hunde la economía en ocasiones la misma sociedad se revela y vota por candidatos que propongan liberalismo (si antes no destruyen la democracia como hicieron en Venezuela o Nicaragua) y a veces esos candidatos revierten lo andado, así fue en Gran Bretaña cuando llegó Thatcher que estaba en las últimas con huelgas continuas y una economía en declive. A veces cuando el caos generado es tan drástico la sociedad se revela y eso es Milei. ¿Será capaz de arreglar esto? No lo veo nada claro. Eso si porque ha llegado al poder está claro con esos datos económicos indicados antes.
El ideario de Milei es el de un libertario, un anarcocapitalista seguidor de la Escuela Austriaca de Economía, quiere destruir el banco central, quiere dolarizar, privatizar, vamos no está en el centrismo, no es un Macri ni mucho menos. Ese era su ideario cuando se presentó a la primera vuelta, en la que a la vez se renovaba parte del parlamento, y allí no obtuvo una mayoría absoluta. Su partido es relativamente nuevo y los gobiernos digamos regionales tampoco los controla y el poder allí de esos gobiernos es muy importante.
Los contrarios a esta ideología dirán que es genial que gobierne Milei para que aplique sus políticas y una vez fracase sean refutadas, el problema es que no van a tener oportunidad de concluir eso porque Milei no podrá aplicar sus políticas.
El tema es si vale la pena invertir en Argentina, en teoría iba a liberar su economía y habría crecimientos de PIB como en todas las economías que se liberan, pero ¿va a pasar eso? Creo que no, para empezar ha tenido que recibir el apoyo del centro derecha tradicional del partido de Macri, de forma que ya está condicionado, además no controla las cámaras y tendrá que pactar con el centro derecha, y con el centro izquierda de los radicales de forma que ya puede ir olvidándose de su programa de máximos. Además no controla ni una sola de las provincias, su partido La Libertad Avanza no tiene ni uno solo de los Gobernadores provinciales en sus filas. Se pueden olvidar de ver liberalismo en Argentina verán un Macri 2 con un tinte un punto más liberal.
El verdadero problema de Argentina es el déficit público que financian monetizando o sea imprimiendo, si Milei ataca el déficit o sea recorta gasto publico las manifestaciones serán enormes y el país se paralizará, veremos seguramente muertos en las calles y quizá el gobierno tenga que dimitir o retirar sus medidas de recorte de gasto y eso nos llevará a la casilla de salida.
Así pues la probabilidad de que arregle Argentina es muy baja, de forma que invertir allí y compra Banco Macro o YPF o cualquier otro de los ADR que se proponían no es razonable, yo no lo voy a intentar, ¿puede obrarse el milagro? Puede, puede que haga un pequeño recorte y llueva mucho y exporte mucha soja y con esos dólares ir tirando y que esas pequeñas reformas ayuden a la economía y que las acciones suban, puede, no se descarta al 100%, pero de momento para el corto plazo no se puede pues era un binario y para el largo plazo dado lo complejo y los riesgos inherentes al país lo mejor es dejarlo estar, si vemos que le va saliendo pues ya lo pensamos pero lo dudo mucho.
En conclusión como bien nos decían los Statler brothers lo mejor que podemos hacer es contar flores en la pared, ni por asomo comprarnos esos ADR, mejor el solitario, o fumar cigarrillos o ver al Capitán Kangaroo antes que complicarnos la vida.
Disclaimer
Ya saben que no puedo aconsejar legalmente, ni comprar ni vender ni mantener, esos ADR argentinos es posible que sea la oportunidad del siglo, pero Argentina tiene muy difícil arreglo.