Cumplido finalmente el movimiento estratégico dentro de un verdadero compás de ¾, donde Telefónica invierte 600 millones para adquirir más espectro británico que sus rivales: consigue un 80MHz de espectro. Después del lento tempo, quedaría dar algunas pinceladas en rubato, para deshacerse de su filial O2 bien por una eventual venta directa o por la futura colocación (cuando se produzcan las condiciones idóneas) de su salida a bolsa. Recordemos que dicha estrategia de adquirir estas frecuencias, permiten mejorar su red para un futuro y sentar las bases para el 5G en Gran Bretaña, dando así una mejor calidad de servicio y cobertura, por lo que sería de esperar “cierta” fidelidad por parte de su cartera de clientes. De todas formas, opino que su salto a bolsa podría ser “pan caliente” y existir ya algún interesado en la compañía... Y es que todo es extraño, porque mientras la mano derecha del pianista acaricia esos descensos cromáticos, nos encontramos con un BCE que vende bonos emitidos por Telefónica Alemania, y que había comprado por error hace 2 años al no cumplir sus propias reglas, mientras que Telefónica se convertía estos días en la compañía líder por pago en comisiones bancarias. Y es que tras el pasado 13 de marzo, cuando la compañía emitió bonos híbridos (deuda perpetua aunque con ventanas como los fondos garantizados), pagó casi 18 millones de euros entre las entidades bancarias que le ayudaron a colocar dicha deuda... Pero volvamos a esas notaciones negras que acompañan al reto del fútbol al que se enfrenta Telefónica y más, cuando ahora aparece Amazon decidido a pujar por los propios derechos de la Liga española… Ojo, este gigante necesitaría aliarse con alguna operadora ¿tendremos posibilidades de ser su nota pedal durante esos compases?... Y es que los dos años de presidencia del señor Pallete en Telefónica están siendo muy espinosos: reducir la deuda y recuperar el valor de la acción. Sí, señor Pallete, la vida es una inmensa disonancia... Por otra parte, parece que la expectativa de salida a bolsa de Telefónica Argentina (el próximo 16 de abril será autorizada en la junta de accionistas), está abriendo el apetito voraz de los analistas: el porcentaje de recomendaciones de ‘compra’ alcanza el 51%. Y es que en el nivel de los 8 euros está apareciendo dinero hasta de debajo de las piedras (con esos contrastes dinámicos que pasan del fortíssimo a pianíssimo), lo que reforzaría el camino para que la operadora (por el buen momentum en el que se encuentra ahora) despeje las dudas que tiene el mercado sobre Telefónica. En fin, lo que queda claro es que la felicidad es efímera, la certidumbre engañosa y sólo vacilar es duradero (lástima que finalice la compañía del nocturno en sol menor de Fryderyk Chopin)...
Terreno técnico. Comentaba la semana pasada que el gráfico semanal contenía un harami alcista y que debería ser confirmado al superar el nivel de 8,03 euros. La vela de esta semana cogió ritmo y llegó al máximo de 8,209 euros y además, podría estar en formación un nuevo patrón alcista. Ups! Suena hasta melódico... Para ello, necesitamos que esta subida gradual, sea constante y que el cuerpo de la vela de esta semana cierre por encima del máximo de 8,209 euros, es decir, que cada vela cierre en sus máximos o cerca de ellos y así nos muestre señales de que en adelante, el mercado tendrá suficiente energía para romper resistencias vitales. Por su complejidad armónica, es la mejor manera y sana a la vez de que el mercado suba, pero nos hace falta ver el comportamiento de la vela de esta semana para enfrentarnos a la formación del patrón que desean dejarnos, bien si es un tres soldados, o negativamente si es un bloque de avance o un patrón atascado o pausa. Si es el primer patrón (tres soldados alcistas), será muy positivo para el abandono de la tendencia bajista de una vez por todas, pero si existe esa “debilidad” asistiremos a una situación problemática y las posiciones largas serán peligrosas. Los indicadores técnicos apuntan hacia arriba, pero están aún en terreno negativo. Por ahora no hay nada definido, aunque esto sea più lento. En terreno diario y para coger el tempo inicial, tenemos varios indicadores en terreno positivo pero un ADX que no me señala fuerza en el movimiento al alza desde finales de marzo. Además, y aunque existan personas que no crean en las velas japonesas, la semana pasada fue efectiva la estrella fugaz para aquellos que aprovecharon los cortos, al llegar al máximo que comentaba del retroceso entre 7,856 y 7,832 euros (llegó finalmente al nivel de 7,842 euros en la segunda sesión de la semana). Pues bien, vuelvo a mencionar que la vela del viernes es un harami en cruz como en el Ibex35 (les remito al comentario que dejaba ayer sábado en el hilo de trading puro). Aquí la operadora azul tiene la sombra superior más larga (el precio osciló por encima de la vela alcista del jueves) y sigue siendo un harami, ya que el cuerpo real de la vela de la sesión del viernes se encuentra dentro del cuerpo real de la vela alcista. Por lo tanto, es de esperar entre las primeras sesiones de la próxima semana un retroceso al nivel del 38% (los 8,003 euros), para tapar el hueco alcista y volver el precio dentro del canal. Desde ahí, habrá que rezar a los dioses griegos para que se espabilen los toros e intenten atacar la resistencia de 8,20 euros, y así determinar la tonalidad del juego de patrones que comentaba en el terreno semanal. Mientras tanto, los niveles alcistas mencionados la semana pasada del nivel de los 8,49 euros se harán de rogar. En cuanto al índice del sector europeo SXKR, cumplió patrones tanto en semanal como en diario pero es una lástima que esta semana no muestre señal alguna de continuación o reversión, es decir, estamos ante una bagatela sin tonalidad.
Salu2 y buen trading,