En todo caso, si de analizar y extraer conclusiones se trata, hagamos un ejercicio.
Analicemos, por ejemplo, el revuelo causado por las declaraciones de Marta Rovira acerca de la supuesta intencionalidad del uso de fuerza letal por la DUI.
Se ha montado una buena, con desmentidos categóricos del ministro portavoz y de cultura, Mendez de Vigo, la ministra de defensa, Cospedal, y el (ejem ejem, supuesto....) jefe de la "muy lela" oposición parlamentaria, Sánchez.
Me extraña el revuelo "de hoy", cuando similares afirmaciones fueron hechas también por el President Puigdemont, casi recien llegado a Bruselas, hace pocas semanas. Entonces, las fuerzas políticas españolas y sus portavoces gubernamentales no dijeron nada.
Expongamos los hechos:
Por un lado, tenemos un supuesto Escenario A, proclamado por el PPSOE + C's, y seguido minuciosamente por sus pseudópodos judiciales y mediáticos, acerca de la existencia de una supuesta "REBELIÓN" (que necesariamente implica "violencia" constatable o potencial), en el marco de un supuesto golpe de estado.
Ante dicho Escenario A, de manera lógica y natural, los "legítimos poderes del Estado" se plantean todas las acciones necesarias, que estén dentro de la Ley. La Ley recoge, dentro de las potestades del Estado, el uso proporcional de la fuerza, incluido, por supuesto, el uso letal de armas de fuego por parte de las FFCCSE Llamémos a esta consecuencia Escenario B.
El único "problema" es que dicho uso letal de armas de fuego implica, necesariamente, el riesgo de muerte de unos objetivos que mayoritariamwente son meros civiles desarmados no-violentos.
El Escenario A, la rebelión en el marco de un golpe de estado, ha sido dicho, proclamado y reiterado hasta la saciedad.
Ante este Escenario A, primero Puigdemont y hoy Rovira, declaran no solo en base a sus elucubraciones, sino como informaciones y análisis fundamentadas, que les constó la existencia de esas decisiones de uso incluso letal de la fuerza.
Y entonces va y sale en tromba el "frente constitucionalista" a desmentir dichas afirmaciones y conclusiones.
Análisis:
Tenemos un Escenario A, que necesariamente implica el Escenario B.
Caso contrario, sería como afirmar que "los legítimos poderes del Estado", ante una rebelión "violenta" en el marco de un golpe de Estado, NO pensaban hacer uso de la fuerza, aunque legalmente estén facultados, e incluso obligados.
Hay voces que critican a Mariano y su gobierno como traidores a la patria, y los ven capaces de eso y mucho más. En general acostumbran a ser militantes de VOX u otros grupos extremistas. Yo no lo creo.
Por lo tanto, las declaraciones del ministro portavoz y de cultura, la ministra de defensa y el jefe de la "muy lela" oposición parlamentaria, desmintiendo a Marta Rovira solo podrían ser ciertas si, y solo sí, el Escenario A es falso.
Si no hubo rebelión, y no hubo golpe de estado, entonces por supuesto que no hubo decisión de usar armas de fuego para matar ciudadanos desarmados no-violentos.
Pero entonces tenemos otro problema:
¿Que hacemos con los presos? Si no hay rebelión ni golpe de estado, entonces son meros reos de conciencia, presos políticos en un estado (supuestamente) democrático, encarcelados tan solo por sus opiniones e ideas políticas.
Síntesis:
La primera vez que trascendió los hechos "potenciales" del Escenari B (matar civiles catalanes desarmados no-violentos), Puigdemont era solo un loco paranoico extremista huido a Bélgica, que manifestaba dudas irracionales sobre nuestro garantista y democrático sistema judicial. Aquí en España nadie debe temer nada por meramente tener ideas políticas, y solo se persiguen las acciones de violencia.
Además, todo apuntaba a que los partidos soberanistas indepes no se presentarían a las elecciones, o lo harían muy divididos y fragmentados, con candidaturas de muy bajo rango, y el "bloque constitucionalista" ganaría las elecciones "sin bajarse del autobús", e Inesita sería presidenta de la Región catalana.
Entremedio apareció la jueza justiciera, dispuesta a encarcelar a todo indepe que se le ponga por delante con tal de salvar a sagrada unidad de España. Y claro, el PPSOE+C's más todos los pseudópodos gubernativos y judiciales defendiendo que eso no era persecución política no era uso punitivo y vengativo, no se buscaba humillar y castigar a Catalunya, sino que meramente era la consecuencia lógica de la rebelión y el golpe de estado.
Además, tras unos días de auto-terapia, la totalidad de fuerzas soberanistas (indepes o no), deciden concurrir a las elecciones, y con candudaturas potentes (aunque algo bizarras), y el escenario de victoria electoral fácil de "los constitucionalistas" se desvanece, Inesita ya no será presidenta de la Región catalana, y hasta es posible que, democráticamente, las fuerzas soberanistas le den un buen revolcón a los del 155.
En ese escenario de competición electoral a la baja, para los constitucionalistas les es muy difícil explicar y justificar que estuvieron dispuestos a ordenar y/o autorizar el asesinato de civiles catalanes desarmados no-violentos, solo por ser indepes.
Pero ese desmentido implica, necesariamente, admitir que España es una especie de autocrácia sin separación de poderes, y donde las discrepancias ideológicas se saldan violenta y vengativamente por la Ley, pero la Ley del más fuerte. Y que se encarcela, sin juicio ni sentencia, por meros delitos de opinión.
La demostración del carácter fuetemente violento y/o antidemocrático del españolismo:
O, hipótesis 0, "los legítimos poderes del estado" no dudaron en ordenar el uso de fuerza letal contra ciudadanos, civiles desarmados no-violentos, por mera discrepancia ideológica,
o, hipotesos alternativa, nunca se pensó en serio en matar ciudadanos pacíficos, sino tan solo usar medios de coacción violenta y humillante, ajenos a cualquier concepción de un estado democrático y con separación de poderes, contra rivales políticos.
Cualquiera de las dos hipótesis causa bastante repulsión.