Respecto a
Muy sensata su respuesta,
Buso, hasta entrar en el 'si pero' de los impuestos y la cantinela socialista detrás de ellos.
Mis palabras son:
Además, comprendo que a todos nos moleste pagar impuestos, pero lo que nos debía irritar es que se utilicen para enriquecer a unos pocos de forma ilegal o bordeando la legalidad. Recuerda que con los impuestos se pagan los servicios púbicos y todos queremos una sanidad, educación, policía, carreteras, protección social... más eficientes. Hay que tener un patrimonio muy elevado para preferir pagarlo del propio bolsillo.
Y, créeme, el desarrollo del sistema público de pensiones, del sistema nacional de sanidad, el gran aumento efectivos en la Policía Nacional y Guardia Civil, la construcción de infraestructuras (antes de que fueran subvencionadas por la UE) y la mayor cantidad de construcción de colegios, institutos de enseñanza media y universidades públicas en España se dieron mientras el Jefe del Estado no era socialista (lo fue desde 1982).
Por ej., la SS que hasta 1986 estaba a cargo tanto de las pensiones como de la sanidad puede leerse esto en la página web de la SS:
El punto de partida de las políticas de protección se sitúa en la
Comisión de Reformas Sociales (1883) que se encargó del estudio de cuestiones que interesasen a la mejora y bienestar de la clase obrera. En 1900 se crea
el primer seguro social,
La Ley de Accidentes de Trabajo, y en 1908 aparece el
Instituto Nacional de Previsión en el que se integran las cajas que gestionan los seguros sociales que van surgiendo.
Posteriormente los mecanismos de protección desembocan en una serie de seguros sociales, entre los que destacan el
Retiro Obrero (1919), el
Seguro Obligatorio de Maternidad (1923),
Seguro de Paro Forzoso (1931),
Seguro de Enfermedad (1942),
Seguro Obligatorio de Vejez e Invalidez (SOVI) (1947). La protección dispensada por estos seguros pronto se mostró insuficiente, lo que llevó a la aparición de otros mecanismos de protección articulados a través de las Mutualidades laborales, organizadas por sectores laborales y cuyas prestaciones tenían como finalidad completar la protección preexistente. Dada la multiplicidad de Mutualidades, este sistema de protección condujo a discriminaciones entre la población laboral, produjo desequilibrios financieros e hizo muy difícil una gestión racional y eficaz.
En 1963 aparece la
Ley de Bases de la Seguridad Social cuyo objetivo principal era la
implantación de un modelo unitario e integrado de protección social, con una base financiera de reparto, gestión pública y participación del Estado en la financiación. A pesar de esta definición de principios, muchos de los cuales se plasmaron en la
Ley General de la Seguridad Social de 1966, con vigencia de 1 de enero de 1967, lo cierto es que aún pervivían antiguos sistemas de cotización alejados de los salarios reales de trabajadores, ausencia de revalorizaciones periódicas y la tendencia a la unidad no se plasmó al pervivir multitud de organismos superpuestos.
La Ley de Financiación y Perfeccionamiento de la Acción Protectora de 1972 intentó corregir los problemas financieros existentes, si bien, agravó los mismos al incrementar la acción protectora, sin establecer los correspondientes recursos que le dieron cobertura financiera. Por ello, no será hasta la implantación de la democracia en España, y la aprobación de la Constitución, cuando se produzcan una serie de reformas en los distintos campos que configuran el sistema de la Seguridad Social.
Historia de la Seguridad Social