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Mi vecino el constructor

34 respuestas
Mi vecino el constructor
Mi vecino el constructor
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#1

Mi vecino el constructor

Sacado de Cartas al Director de El País, edición 19/08/12

Mi vecino es constructor, o lo era. Y yo funcionario, de momento. Hace no tanto, cuando la realidad era de papel celofán, el horizonte un interminable bosque de grúas y las avenidas se alfombraban de coches de alta gama recién estrenados, le confesé lo que ganaba y su respuesta fue tan contundente como sustanciosa: “Yo por ese dinero ni me levanto de la cama”. Hoy es de los que suman su vozarrón contra los empleados públicos. Así somos. Así nos va.— José Luis Peira.

Saludos

#2

Re: Mi vecino el constructor

El vecino del Sr. Peira aparte de ser, o haber sido, constructor lo que es es un arrogante y fanfarrón y, sobre todo, un maleducado.
Lo de que "es de los que suman su vozarrón contra los empleados públicos" sinceramente no entiendo qué quiere decir. ¿Hay algún movimiento social contra los empleados públicos?
Saludos.
CFPTDS

#3

Re: Mi vecino el constructor

Los políticos intentan que lo haya, sobre todo contra los funcionarios... tratando de desviar la atención sobre el hecho de que el gran despilfarro de las administraciones públicas tiene su origen en sus propias decisiones como políticos: infraestructuras inútiles, corrupción, privilegios de todo tipo (coches, sueldazos, viajes, enchufados con clausulas de rescisión...), comisiones... Pero curiosamente, a pesar de su papel de principal protagonista en esta crisis, apenas toman medidas contra ellos mismos o son insignificantes en proporción a sus privilegios.

Saludos

#4

Re: Mi vecino el constructor

Sería como un decir ya sabes se dicen tantas tonterías sin pensar que después se dan cuenta de su grave y célebre dicho o comentario.
Un saludo

#5

Re: Mi vecino el constructor

Me suena...ya conozco a un pintor que tenia bolivianos y ecuatorianos trabajando como burros pero con contrato a media jornada y el resto(gran resto de horas, que en total solian hacer de 50 a 55 horitas semanales)en B...y cuando le iba de pm y tenia a 8 de estos como "empleados" se jactaba de lo listo que era, presumia de 3 pisos que se habia comprado para revender y alucinaba con mi mierda de sueldo de profesor(no soy funcionario) a la vez que alababa las virtudes de estos trabajadores por que eran muy mansos y sumisos y aceptaban casi todo lo que les dijera...corria el feliz año 2007...

Bien pues hoy es el dia que aplaude las medidas de no asistencia sanitaria a sin personas sin papeles y que dice que el pais está lleno de extranjeros y que ahora sobran, y que la culpa de tanto paro tambien es de ellos etc...ah y yo ahora soy un privilegiado que vivo a cuerpo de rey...etc...

Es sorprendente la capacidad de adaptación de algunos especimenes a las circunstancias del momento y la fragilidad de su memoria,realmente digno de estudio.

Saludos.

#6

Re: Mi vecino el constructor

Tampoco creo que haya mucho que estudiar. Tiene un nombre muy claro: hipocresía.

Salu2

#7

Re: Mi vecino el constructor

Mucho Mauricio Colmenero anda suelto por ahí, más de lo que parece...

#8

Re: Mi vecino el constructor

Para constructores, los chinos:

Kilamba, la ciudad fantasma pensada para medio millón de personas que solo tiene 220 habitantes

El 'ladrillazo' no es algo autóctono español. Ni siquiera Seseña, el pueblo fantasma levantado por Paco 'El Pocero' —el mayor fiasco inmobiliario de nuestra historia con 13.500 apartamentos construidos y poco más de 3.000 vendidos—, puede competir con Kilamba, una nueva ciudad de Angola diseñada para albergar a medio millón de personas y que apenas cuenta con 220 residentes.
Este homenaje a la decadencia de la cultura del ladrillo ha sido levantada de la nada por la empresa estatal China International Trust y el Investment Corporation en menos de tres años en las afueras de la capital angoleña, Luanda. El faraónico proyecto ha costado nada menos que 3.500 millones de dólares (unos 2.850 millones de euros).

Sin embargo, el complejo residencial de lujo levantado por los chinos ha sido un fracaso. Sus calles, sus 750 edificios y sus 100 locales comerciales están prácticamente desiertos. La razón es muy simple: los apartamentos en Kilamba cuestan entre 120.000 y 200.000 dólares (entre 97.000 y 162.000 euros), una cifra lejos del alcance de los cerca de dos tercios de angoleños que viven con menos de 2 dólares al día (1,6 euros) y que no tiene acceso a crédito bancario.
Por eso, casi un año después de que se iniciase la comercialización de la primera fase del proyecto, unos 2.800 apartamentos, únicamente un 8%, han encontrado comprador. Ni siquiera los vídeos promocionales de la nueva urbanización, que muestran a familias sonrientes que disfrutan de un nuevo estilo de vida alejado del polvo y miseria del centro de Luanda, donde millones de personas viven en barrios marginales, han conseguido atraer a compradores.

La vida en Kilamba se reduce al pequeño trasiego que hay en un puñado de locales comerciales que, en su mayoría, están ocupados por empresas de servicios públicos. No hay tiendas y un supermercado es el único lugar para encontrar comida en varios kilómetros a la redonda.
El Gobierno de Luanda es quien más tiene que perder con el fracaso de Kilamba: financió su construcción con una línea de crédito solicitada a China y que Angola está devolviendo con petróleo.

Los planes estatales pasan por convertir muchos de los apartamentos en vivienda social para que personas de bajos ingresos puedan alquilarlos, aunque aún se desconocen los detalles de este plan y sus críticos creen que se trata únicamente de una promesa política de cara a las próximas elecciones.

¡Bah! carnero, oveja. A tu raza, a tu vellón y a tu clan sé leal.