El decreto contra los pagares de Nueva Rumasa ya tiene respuesta.
Uno de los resultados del Pacto de Zurbano fue la de obligar a que toda comercialización de valores que se dirija a inversores particulares y que haga publicidad se realice a través de un intermediario financiero. Dicho intermediario tendrá que estar sometido a la supervisión de la CNMV y a las normas de protección que establece la directiva MiFID.
El Real Decreto, hecho a medida para que lod pagares de Nueva Rumasa no burlen a la CNMV ya tiene respuesta.
Nueva Rumasa tramitará sus pagarés a través de una sociedad de valores, con la que ha firmado un acuerdo. Las emisiones lanzadas hasta ahora por Nueva Rumasa no estaban obligadas a registrar su folleto en la CNMV, una condición que la empresa reconocía en sus anuncios, pero de la que el regulador advirtió como si se tratase de un elemento para la desconfianza.
S2