'La ballena varada'
Sobre el parqué, una teoría,
la de la ballena varada.Los mentideros financieros consideran que el conglomerado de telecomunicaciones nipón SoftBank liderado por Masayoshi Son ha emulado a Moby Dick con una exposición de entre
30.000 y 50.000 millones de dólares utilizando opciones de compra.
Inspirados por la novela de Herman Melville, los mentideros financieros consideran que el conglomerado de telecomunicaciones nipón liderado por Masayoshi Son ha emulado a Moby Dick con una exposición de entre 30.000 y 50.000 millones de dólares utilizando opciones de compra.
Esta estrategia, que brinda el derecho a comprar acciones a un precio preestablecido en fechas futuras, se postula cómo uno de los motores que ha impulsado al sector tecnológico durante los últimos meses. Ante la falta de claridad de quien o quienes estaban detrás de estos movimientos, el mercado apeló a la "ballena del Nasdaq" cómo apodo a los enormes volúmenes de compra de opciones en los últimos meses.
Los registros con los reguladores demuestran que SoftBank adquirió casi 4.000 millones de dólares en acciones de gigantes tecnológicos como Amazon, Microsoft y Netflix esta primavera, más una participación en Tesla.
Lo que no revelan es que Son, quien llegó a perder hasta 70.000 millones de dólares durante el estallido de la burbuja de las dot.com, ordenó la compra de una cantidad aproximadamente similar de opciones de compra vinculadas a las acciones subyacentes adquiridas, así como de otros valores, según revelan el Financial Times y el Wall Street Journal.
Para algunos expertos la actividad a través de las opciones de compra dentro del sector tecnológico ha ayudado a intensificar el repunte de estas acciones tecnológicas y ha desencadenado una dinámica inusual en los mercados.
"Esto demuestra también el grado de exuberancia de los inversores minoristas, ya que la compra de opciones supone una forma de obtener una exposición a los precios de las acciones de forma más barata que la compra directa de las mismas", explica Oliver Jones, de Capital Economics. Jones considera que este mecanismo puede haber ayudado a exacerbar tanto la enorme escalada del aumento de los precios de muchas empresas de tecnología en los últimos meses como sus fuertes caídas hacia el final de la semana pasada.
Las maniobras de Softbank son solo la punta del iceberg, dado que el valor nominal general de las opciones de compra sobre valores individuales estadounidenses alcanzó un máximo histórico en las últimas dos semanas, con una media de 335.000 millones de dólares al día, según Goldman Sachs, más del triple que la media móvil registrada entre 2017 y 2019.
"Las valoraciones eran demasiado elevadas y las nuevas estrategias complejas de derivados empleadas por muchos inversores retail así como Softbank, han llevado a Apple, Alphabet, Amazon, Facebook y Micorosoft a arrastrar a los índices desde máximos", considera Ken Polcari, director de inversión de SlateStone Wealth, quien recomienda protegerse hablando con gestores de cartera profesionales y no con Robinhood.
Mientras tanto, la decisión del comité de S&P Dow Jones Indices de no incluir a Tesla en el S&P 500 aceleró el descenso de la compañía de Elon Musk. En su revisión trimestral, Etsy, Teradyne y Catalent pasaron a formar parte del indicador mientras H&R Block, Coty y los almacenes Kohl´s abandonaron el mismo para pasar a formar parte del S&P MidCap 400.
Esta situación llevó a Tesla a desplomarse más de un 16% durante la jornada del martes después de haber borrado en los últimos días más de un 25% desde sus máximos históricos. Dicho esto, la compañía se encuentra todavía alrededor de un 30% por encima de donde se encontraba cuando comenzaron los rumores de su posible inclusión en el indicador.
Precisamente, uno de los aspectos que el comité del S&P Dow Jones Indices podría haber tenido en cuenta es la volatilidad en el precio de las acciones del fabricante de coches eléctrico, que se llegó a disparar más de un 350% este año hasta lograr niveles récord. Los beneficios del primer semestre del año de Tesla también se vieron favorecidas por 782 millones de dólares en ventas de créditos regulatorios a otras compañías.
En general, el cúmulo de factores, que también incluyen las próximas elecciones presidenciales o las tensiones entre EEUU y China, apuntan a una corrección de otro 10% o 15% según el economista Ed Yardeni. El presidente de Yardeni Research, un veterano alcista aseguró a la CNBC que el mercado ha sufrido un gran movimiento al alza desde el 23 de marzo en el que el Nasdaq ha subido alrededor de un 70%. De ahí que justificase las caídas experimentadas en las últimas jornadas que, eso sí, no copiarán las dinámicas del estallido de la burbuja tecnológica de finales de los 90.