Me acabo de enterar de la noticia y me he llevado la alegría del finde. Menos mal que antes de empezar a rellenarlo siempre consulto en internet por si hay novedades.
Y unos párrafos después de la alegría, viene el deshueve. Extraigo este párrafo que entrecomillo de la noticia de Europa Press para que riáis conmigo:
"El Ministerio ha argumentado que cuando entró en vigor esta normativa, en 2001, el número de declaraciones del Modelo D-6 se mantuvo en unos niveles "bajos" y "asumibles" para los recursos disponibles. Sin embargo, en 2021 las declaraciones han superado las 54.000."
O sea, que cuando eran cuatro gatos los que tenían inversiones en el extranjero, algún funcionario del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo llenaba el tiempo con esto. Y ahora que se ha disparado el número de inversores, no dan abasto. Solución, pues ya no se hace, hala. Ole, ole y ole. España cañí forever.
Bueno, siempre nos quedará el 720 de Hacienda, que esos sí que dan abasto. Mira tú por dónde, este año voy a empezar a hacerlo ya. A ver si antes de que acabe enero me lo quito de encima y así descanso de declaraciones hasta que llegue el IRPF.
Hasta la siguiente, rankianos.
Salud e ingresos