Si el Santander no quiere verse involucrado en un fraude de dimensiones incalculables lo mejor que podría hacer en favor de los accionistas sería algo así como:
---A los accionistas del Popular que acudieron a la última ampliación, (y que aún matienen las acciones) pagarles un precio equivalente al precio que los costó la acción en la ampliación. Bien en dinero, bien en acciones del Santander. Por supuesto a las entidades financieras que acudieron a esta ampliación, no. De este modo los accionistas que fueron a la ampliación, quer eran empleados o clientes del Popular, y que pidieron un préstamo para la compra de acciones, podrían recuperar su dinero y devolverlo, (en este caso), al Santander
---A los accionistas del Popular que ya lo eran en la fecha de la última ampliación, y que no acudieron a la ampliación, y que no vendieron sus acciones, e Santander podría hace lo propio que a los anteriores. Por supuesto a las entidades financieras, no.
---A los accionistas que prestaron sus acciones para que otros las vendieran, (bajistas) se considera que ya no tenían las acciones el día de la expliación del Popula puesto de que ya se consideran vendidas. Por tanto, a estos nada, porque ya no tienen acciones.
---A los accionistas que tenía acciones del Popular el dia del expolio, y que no están incluidos en los apartados anteriores, (por tanto, se supone, que son accionistas que compraron las acciones después de la última ampliación de capital hasta la fecha de la exploiación), pues a estos accionistas el Santander debería pagarles un precio equivalente al precio que les costó cada acción que compraron. Bien en dinero, bien en acciones del Santander.
---A los bonistas tratarles del mismo modo que a los accionistas en función de las condiciones de esos bonos.
No sé cuanto sería el coste que le representaría al Santander, pero seguro que le cuesta menos que lo que le va a costar si no solventa el problema que tiene encima y que es muy grave.
¿Que hubiera pasado si cuando la acción estaba sobre 0,80-0,90 € algún banco hubiera lanzado una OPA?.
Es posible que muchos accionistas no hubieran estado de acuerdo, y otros muchos lo hubiran aceptado, aunque de mala gana, ero el problema hubiera sido mucho menor, desde el punto de vista jurídico, y hubiera sido más fácil de solucionar.
Hay que seguir adelante, que esta guerra la van a ganar los accionistas; porque, si no, el ministro de economía, el gobernador del BE, el presidente de la CNMV, y, tal vez, la botina, ya pueden ir poniendo el GPS en dirección a Soto del Real