Los accionistas de Colonial exigen más dinero a Dubai
Publicado el 29/02/2008, por J. Sánchez Arce
Los dos accionistas de referencia de Colonial, Luis Portillo (37,9%) y Nozar (12,2%) exigieron ayer un cambio en las condiciones económicas y en otros requisitos contenidas en la propuesta de compra sobre la inmobiliaria formulada el miércoles por el fondo soberano Investment Corporation of Dubai (ICD).
A las 13 horas de ayer, Portillo y Juan Carlos Nozaleda, presidente del grupo Nozar, se sentaron junto con los representantes del fondo dubaití a negociar nuevamente los términos de una propuesta que valora la compañía en 1,85 euros por acción y que está condicionada al cumplimiento de una larga y exigente lista de condiciones.
A las 19 horas de ayer, las negociaciones estaban rotas. Portillo y Nozaleda abandonaron la mesa de negociaciones ante la inflexible postura de los representantes de ICD, que aseguraban no tener autorización para modificar los términos de la oferta.
A las 22 horas volvieron a retomar las conversaciones. Las partes tienen tiempo hasta las 12 horas de hoy para alcanzar un acuerdo. Fuentes próximas a las conversaciones consideran que éste podría alcanzarse.
Negativa de los bancos
Portillo y Nozar no fueron los únicos en querer modificar ayer la oferta. Los bancos acreedores de Colonial (Goldman Sachs, Royal Bank of Scotland, Eurohypo y Calyon) tampoco la habían aceptado.
Como condición a su oferta, ICD exigió el miércoles una refinanciación de la abultada deuda de la inmobiliaria, que asciende a 8.600 millones, equivalente al 65% del valor de sus activos. Sin embargo, los bancos no estaban convencidos del precio ofrecido (el preacuerdo firmado el pasado 28 de enero establecía una propuesta económica de 2,15 euros por acción), ni tampoco las garantías aportadas por ICD para refinanciar la deuda.
Por otro lado, ICD supeditaba también la operación a que los bancos acreedores de Portillo y Nozar (más de una decena de entidades financieras) aceptasen la oferta. Junto a los acreedores de Colonial, estos bancos son los verdaderos propietarios del 51% que controlan teóricamente Portillo y Nozar.
Estos dos accionistas pusieron sus propios títulos como garantía de la compra de su participación en la inmobiliaria. Los bancos tienen cinco días para aceptar la propuesta, que se materializaría en un pago en metálico y en bonos de deuda emitida por el fondo dubaití, supuestamente respaldada por el Tesoro del Emirato árabe, equivalente a 2,25 euros por acción de Colonial a la fecha de su vencimiento (4,5) años.
El proyecto de oferta se complica aún más en el momento en que la propuesta económica debería ajustarse en función de unas ventas de suelo y promociones residenciales en curso por importe desconocido (se especula con más de 1.000 millones de euros) a las que obliga ICD como condición añadida a la oferta.
De aceptarse todas estas condiciones, accionistas y bancos acreedores saldrían perdiendo irremediablemente. Portillo y Nozar se dejarían más de 250 millones de euros en el camino (el valor medio de sus acciones ronda los 2,50 euros por acción). Los bancos acreedores tendrían, por su parte, que refinanciar una deuda que ya se renegoció el pasado mes de septiembre.
Es posible, por otra parte, que la única salida a estas alturas sea aceptar la propuesta. El mercado descuenta una caída de la acción hasta el entorno de un euro si no prospera.
Varapalo en el parqué
El mercado descontó ayer el rechazo a la oferta. Las acciones de la inmobiliaria Colonial sufrieron un nuevo varapalo del 14,1%, hasta 1,35 euros, volviendo a los mínimos marcados en enero. La enrevesada propuesta de compra del fondo soberano Investment Corporation of Dubai (ICD), no convenció a nadie, y eso suponiendo que alguien la hubiera comprendido.
En un hecho relevante remitido a primera hora de la mañana de ayer, los dos accionistas de referencia de la inmobiliaria, Luis Portillo (39,7%) y Nozar (12,2%), que se habían comprometido