Efectivamente, los mercados de divisas sufrieron una convulsión después de que la prensa china asegurara que el Gobierno chino habían empezado a deshacer posiciones en renta fija de EE.UU. debido a la debilidad mostrada por el dólar.
Además, el presidente de la Reserva Federal, Alan Greenspan, advirtió la semana pasada en Francfort, que los elevados déficits que presenta la economía de EE UU harían que los activos denominados en dólares perdieran atractivo, lo que llevaría a un recorte en la demanda de dólares.
Con estos precedentes, las informaciones provenientes de China provocaban una auténtica convulsión en el mercado que tan sólo fue detenida por el desmentido del Banco de China, que negó tener conocimiento sobre operaciones de ventas de bonos de EEUU. Sólo entonces el dólar enjugó en parte sus caídas frente al euro, que cotizaba cerca del cierre de la sesión en las principales plazas europeas en el entorno de 1,3360 dólares.
La pregunta de fondo es: ¿Hasta donde puede caer el dolar frente al euro?