Renta Fija: ¿Qué es y cómo funciona? | ¿En qué bonos invertir?

Si por algo será recordado 2023, será porque fue el primer año después de mucho tiempo que la renta fija volvió a ser atractiva.

En este post veremos qué son los bonos, cómo funcionan y cómo invertir en ellos.

¿Qué son los bonos o mercado de renta fija?

La Renta Fija son títulos negociables cuyo principal objetivo es recaudar capital de los inversores. De esta manera, el emisor se obliga al abono de unos intereses y a devolver el capital invertido en el momento acordado. El pago de los intereses se puede llevar a cabo mediante cupones periódicos fijos o variables mientras dure la vigencia del activo en cuestión. Por tanto, es un tipo de inversión que al contratarla se sabe el rendimiento que va a proporcionar al inversor y durante cuánto tiempo.

Los bonos son un activo de renta fija, instrumentos financieros que llevan aparejado un derecho de cobro para su titular a cambio de prestar capital al emisor durante un tiempo determinado.

Tipos de bonos

Veamos ahora los tipos de tipos de bonos más importantes que podemos encontrar:

Bonos institucionales

Los bonos públicos, institucionales o también llamados bonos soberanos, son emitidos por el Estado o bien por otros entes públicos. La finalidad es recaudar capital para de esta manera obtener financiación para afrontar sus obligaciones y financiar los presupuestos generales del Estado.

El emisor está obligado a devolver el capital invertido junto con los intereses cuando el bono ha vencido.

Por tanto, el Estado se endeuda con los inversores para poder financiar su actividad gubernamental, y lo hace a través de la emisión de bonos públicos (y también otros activos, como Letras del Tesoro y Obligaciones).

👉 Para más información, en el siguiente artículo te lo explico: Bonos soberanos, ¿Qué son y como funcionan?

Bonos corporativos

Los bonos privados o corporativos no los emite el Estado, sino empresas privadas que buscan una vía de financiación para captar fondos de los inversores y contar con mayor capacidad económica para continuar con su actividad económica, financiar proyectos y expandirse.

La empresa abona unos intereses y a su vencimiento devuelve el capital invertido junto con los intereses.

Debido a que tienen un riesgo mayor que los bonos públicos porque no es lo mismo que esté respaldado por un Estado que por una empresa, estos abonan mayores intereses a sus tenedores.

👉 Descubre más información en el siguiente artículo: Deuda Corporativa - ¿Qué es?

Otros bonos

Existen además otros tipos de bonos, como por ejemplo:

Bonos canjeables: son bonos que se canjean por acciones ya existentes en la empresa y no por dinero.
Bonos convertibles: estos bonos son canjeables por acciones de nueva emisión.
Bonos cupón cero: no abonan intereses sino que lo paga todo al final cuando vence.
Bonos de caja: los emiten compañías para cubrir necesidades de tesorería.
Bonos de deuda perpetua: Nunca vencen, es decir, no regresan nunca el capital invertido, sino que generan perpetuamente intereses.
Bonos basura: son de alto riesgo, a cambio los intereses que pagan son más elevados.
Bonos Contigentes Convertibles (CoCos): Los CoCos, o bonos convertibles contingentes, son instrumentos de deuda que se convierten automáticamente en capital cuando un banco enfrenta dificultades financieras, ayudando así a mantener su solvencia.

¿Cómo invertir en bonos?

Hay diversas maneras de poder invertir en bonos. Las tres principales son las siguientes:

1. Comprar bonos individuales

Los bonos los puede comprar una persona por sí misma y para ello dispone de varios medios a elegir:
En las oficinas del Banco de España: acudiendo presencialmente y llevando el DNI es suficiente. En ocasiones, si la demanda es elevada, se requiere concertar previamente una cita con día y hora para acudir.
En la web del Tesoro Público: en la página web podemos nosotros directamente comprar los bonos. El proceso es rápido y sencillo. Si la demanda es muy elevada, la web puede “caerse” y no funcionar de manera temporal.
En las entidades bancarias: simplemente acudiendo a un banco con nuestro DNI y un encargado realizará la compra al momento sin problema alguno.
Mediante los brokers online: con tener abierta una cuenta de valores en un broker online que permita invertir en renta fija será más que suficiente. La compra se realiza con la misma rapidez y sencillez que si comprásemos acciones de una empresa.

2. ETFs y fondos de inversión de bonos

Mediante ETFs (fondos cotizados) podemos invertir fácilmente en renta fija y en bonos, ya que replican los índices correspondientes, tratándose de una gestión pasiva y por tanto con menores gastos y comisiones que los fondos tradicionales.

Te dejo 4 ejemplos:

ETFs	Ticker	ISIN
iShares USD Treasury Bond 0-1yr UCITS ETF (Acc)	IBC1	IE00BGSF1X88
iShares EUR Corporate Bond 1-5yr UCITS ETF EUR (Dist)	EUNT	IE00B4L60045
iShares China CNY Bond UCITS ETF USD (Acc)	AYER	IE00BKPSFD61
Vanguard USD Emerging Markets Government Bond UCITS ETF Distributing	VGEM	IE00BZ163L38

Comprar ETFs de bonos

Más información

👉 Y ahora que ya sabes como invertir en bonos, te dejo con el siguiente artículo para que puedas valorar un espectro mucho más amplio: ¿Dónde invertir en 2023?

¿En qué bonos invertir?

A continuación, vamos a ver los dos requisitos que le debemos exigir a un bono para que sea rentable -dentro del mundo de la renta fija- y seguro, o al menos con mayores garantías.

Buena calidad crediticia

A la hora de elegir los mejores bonos para invertir, si hablamos de un inversor con un perfil conservador, sin duda alguna ha de decantarse por bonos del Estado en vez de bonos corporativos.

Dentro de los bonos del Estado, los ideales son aquellos que ofrecen una mayor calidad crediticia otorgada por las diversas agencias crediticias, por ejemplo una valoración AAA.

En el siguiente cuadro podemos observar cómo los bonos ofrecidos por Alemania y EE. UU. tienen la mayor calidad crediticia, ambos con calificación de AAA según Finch y Aaa según Moody´s.

Calidad crediticia de los diferentes bonos.

Cupón lo más alto posible

Y ya una vez vista la calidad crediticia del país, y observando que es la mayor posible, solo queda exigir un cupón alto, cuanto más alto mejor.

Y si nos fijamos, el bono de EE. UU. a dos años está pagando un interés cercano al 4%, una oportunidad que no se veía en décadas.

Rentabilidad del bono de EEUU a dos años.

Mientras que si vamos al bono alemán (también de máxima calidad crediticia), ocurre más de lo mismo. La deuda del gobierno centroeuropeo está pagando un cupón del 2,5%, un interés que de igual manera no se veía en más de una década. Y más con el bono alemán, que llegó a ponerse en rentabilidad negativa, hace menos de dos años.

Rentabilidad del bono alemán a dos años

De esta forma, vemos cómo estamos ante un oportunidad en renta fija, concretamente con los bonos del Estado única, que no se veía en décadas, ofreciendo rentabilidades como es el caso de la renta fija americana, que no están muy lejos de la rentabilidad anualizada que viene ofreciendo el SP&500 en los últimos años.

Y de idéntica forma se haría con los bonos corporativos de deuda. Deberíamos buscar un bonos con cierta calidad crediticia y rentabilidad apetitosa.

EXANTE

Alternativas a Exante

💶

Depósito mínimo

10.000,00 €
📝

Regulación

CySec, UE, SFC
⭐️

Puntuación

7.5/10

👉 Más información: ¿Dónde invertir de 50.000 a 100.000 euros o más? - 7 Alternativas

¿Por qué invertir en bonos?

Entre las principales razones que invitan a invertir en bonos podemos citar las siguientes:

1. Altos tipos de interés

Si los tipos de interés aumentan, las nuevas emisiones de renta fija aumentarán los intereses.

Ejemplo: una persona compra un bono de nueva emisión con cupón del 5%, le genera 50 euros al año de intereses por cada 1.000 euros de valor nominal. Si al año siguiente los tipos de interés suben, el bono sigue generando 50 euros al año, pero los emisores de títulos nuevos ofrecerán rentabilidades adaptadas a esas mayores tasas de interés, por ejemplo al 6%.

En un contexto de tipos de interés de banca central elevados, la inversión en renta fija se vuelve mucho más atractiva.

2. Ingreso fijo y predecible

Ofrece la tranquilidad a su titular de saber qué rendimiento le va a generar y durante cuánto tiempo. De esta manera puede realizar una buena planificación económica, puesto que los intereses a recibir son conocidos de antemano.

3. Riesgo bajo (o menor que la renta variable)

Aunque los bonos no son una inversión asegurada, sí que tienen menor riesgo que la inversión en renta variable (Bolsa), de ahí que su potencial rentabilidad es menor que la de esta.

El principal riesgo es el crediticio: esto mide el riesgo de que el emisor del bono no sea capaz de pagar los cupones o devolver el capital en el vencimiento. De darse esta circunstancia, es lo que se conocería como un default de emisor. Por tanto, el riesgo de los bonos depende de la solvencia de la entidad emisora de dicho bono para cumplir con sus obligaciones.

También tenemos el riesgo de que si una persona compró bonos con un cupón del 4% (gana 40 euros al año por cada 1.000 euros de valor nominal), si al año siguiente los tipos suben, los emisores de nuevos bonos ofrecerán rentabilidades mayores, por ejemplo un 5%. Entonces si quiere vender su bono del 4%, se verá obligado a hacerlo por debajo de su valor nominal, ya que habiendo nuevos bonos al 5% nadie querrá comprarlo.

Digamos que el precio y la rentabilidad de los bonos están inversamente relacionados.

4. Mercado secundario

Los bonos cotizan en el mercado secundario. Según evolucione su precio en dicho mercado secundario se pueden conseguir bonos por encima o por debajo de su valor nominal

De esta manera, el precio de un bono en el mercado secundario dependerá fundamentalmente de tres elementos:

La calidad y fiabilidad del emisor,
La evolución y devenir de los tipos de interés,
La ley de la oferta y la demanda.

Y precisamente, si vemos que ha aumentado su precio con respecto a cuando lo compramos, no necesitamos esperar al vencimiento del mismo para recuperar nuestro dinero, podemos venderlo en el mercado secundario.

Diferencias entre bonos, Letras del Estado y Obligaciones

Ya sabemos que el Estado emite activos de renta para financiarse. Eso significa que al comprar uno de esos activos en realidad estamos financiando y prestando capital al Estado durante un tiempo concreto y a cambio nos ofrece unos tipos de interés.

Al vencimiento de esos activos recibimos también el capital inicialmente invertido. Por supuesto, tanto el plazo temporal como los tipos de interés a percibir son conocidos previamente por los inversores.

De entre los activos de renta fija hay tres:

Letras del Tesoro
Bonos
Obligaciones

Letras del Tesoro

Las letras del Tesoro son obligaciones de deuda por parte de los entes públicos que se emiten a muy corto plazo (inferior a 2 años), generalmente se emiten a 3, 6, 12 o 18 meses.

Además, también se diferencias respecto a los bonos y obligaciones, en que tanto el interés de las mismas, como la entrega del principal se hace a vencimiento. Es decir, no se paga un interés periódico de la mismas, se entrega en el momento final

👉 Más información: Cómo comprar Letras del Tesoro en España de forma segura

Bonos del Estado

Por su parte, los bonos se emiten a un plazo medio de 3 a 5 años, y en este caso, efectivamente, los intereses sí que se pagan de forma periódica de acuerdo al cupón de las condiciones pactadas.

Obligaciones del Estado

Por último, respecto a las obligaciones, son en esencia bonos, ya que cumplen las mismas características. La única diferencia que se puede apreciar, es que estos suelen emitirse a un plazo mínimo superior a 5 años, aunque normalmente, suelen ser a 10 años vista.

Y aquí, al igual que con los bonos, los intereses se pagan de forma periódica, y debido a que el plazo de entrega es mucho mayor -hablamos de 10, 15 o 20 años-, los intereses suelen ser más altos, a no ser que la curva de tipos de interés esté invertida.

Pros y contras de invertir en bonos

Por último, veamos las principales ventajas y desventajas de invertir en bonos:

Beneficios de invertir en bonos	Contras de invertir en bonos
✅ Mayor seguridad	❌ Escasa rentabilidad
✅ Mejor planificación posible
✅ Menor riesgo
✅ Mercado secundario

En definitiva, vemos cómo está completamente justificado que en 2023 la inversión en renta fija a través de bonos se haya vuelto a poner de moda. Y tú, ¿ya tienes renta fija en tu cartera de inversión?