Una de las premisas siempre en los tiempos que corren tan marcados por la fake news y el titular fácil es leer de todas las fuentes posibles para poder hacernos una idea propia de la verdad o de al menos "nuestra verdad".
Se que para un lector de "La Razón" será difícil pasarse por las páginas del Diario.es y viceversa, pero como en el término medio siempre está la virtud, uno de mis rituales diarios es cada vez que leo una noticia intentar buscarla en un medio de ideología contraria.
Este ha sido el caso de mi búsqueda acerca del enésimo proyecto de reforma educativa que escucho desde que resido en España desde hace 7 años. Siendo fiel a la filosofía que reivindico os dejo los enlaces antes que todo de documentos que son interesantes para el debate que quiero abrir a continuación:
- Intervención de la Ministra de Educación el 11 de julio en la Comisión de Educación
- Proyecto de Reforma Educativa presentado el día 7 de Noviembre
- Ley Educativa actual (LOMCE)
- Encuesta de competencias financieras
- Informe Pisa
¿Que tal va la educación en España?
Seguro que en este punto habrá opiniones más fundamentadas que la mía pero siempre se necesita una para comenzar un debate. Si atendemos a los informes que enlazo anteriormente uno de los grandes problemas de la educación son las altas tasas de abandono escolar.
Hace 10 años estas cifras tendrían sentido porque había un coste de oportunidad claro en estudiar, que era encontrar trabajos bien remunerados con relativa facilidad, pero esta excusa con tasas de paro tan elevadas y el elevado desempleo juvenil no creo que tengan vigencia en la actualidad.
Otra de las explicaciones posibles es que el alto coste de los estudios saquen del sistema a muchos estudiantes. Esta opción también la descarto, las altas tasas de abandono escolar se producen desde edades tempranas con el salto al bachiller específicamente.
Las tasas universitarias por mucho que se dibuje otro escenario no excluyen a un porcentaje elevado de la población que quiera estudiar y más con el sistema de becas existente del cual fui beneficiario. Es cierto que las condiciones para al acceso a las becas fueron endurecidos en los últimos años, pero la exigencia de determinada nota, solo introdujo al modelo educativo una variable que cada vez escasea más en la sociedad: el reconocimiento al esfuerzo y al mérito.
Pero este problema creo que esconde uno aún mayor en el sistema educativo español: la cultura del buenismo. Antes que salten las alarmas permítanme explicarles a que me refiero en este punto.
¿Qué es la cultura del buenismo?
Durante casi los últimos 5 años mientras cursaba la carrera tuve la oportunidad de impartir clases particulares de diversas asignaturas a niñ@s desde 9 a 17 años y en casi todos ellos he encontrado un mismo patrón. Partamos de la base que cuando alguien llama a un profesor particular es porque el niñ@ suspende o porque los padres no tienen suficiente conocimiento o tiempo para dedicarle a la educación.
La cultura del buenismo es aquella en la cual toda la culpa del fracaso escolar del estudiante es ajena a él mismo. Da igual que el niñ@ no atienda a clases, no tome apuntes o ni siquiera se moleste en saber cuando es el próximo examen que la culpa será de que el examen era muy difícil, hay muchas cosas que estudiar o el evento social del día que impidió que le dedicará el suficiente tiempo a la asignatura.
Bendita excusa para un estudiante en la actualidad el que todos o una parte de sus compañeros suspendan un examen ya que automáticamente el fracaso colectivo es un fracaso del profesor.
Los estudiantes españoles no son ni más ni menos listos que los del resto del mundo, pero el sistema educativo y sus continuas reformas hacen que los alumnos carezcan de varias de las herramientas esenciales para poder desarrollarse con éxito en muchas de las profesiones.
¿Cuál es el patrón del estudiante en España?
No quiero ser generalista porque siempre se es injusto con las excepciones, pero mi experiencia muestra, estudiantes enfocados en memorizar temarios y lecciones que no se trasladan en conocimientos, ya que al pasar el examen desaparecen de la memoria casi a golpe de click. El modelo de estudiante está enfocado a un modelo intensivo en horas y no en productividad del estudio. Está marcado por la comparativa entre notas y no por las competencias y habilidades que puedan tener los mismos.
La falta de confianza es una pandemia silenciosa que se extiende por las aulas y que conlleva otra serie de problemas que más temprano que tarde se notarán en la realidad político-social española. Bullying, fracaso escolar, manipulación ideológica, miedos escénicos, son algunas de las consecuencias de no empoderar a los estudiantes en la filosofía de que el mayor fracaso es el no intentar algo.
Siempre me hacían la misma pregunta en clase: ¿Quién crees que es el más listo de clase? y siempre les asombraba que alguna de mis respuestas apuntaban a alguien que no estaba en el radar de nadie solo porque sacaba notables y no estaba en el selecto club de las matrículas de honor.
Ojo que no demérito la inteligencia de aquellas personas que tiran muchas horas de estudio para una materia. Su capacidad de esfuerzo e inteligencia está fuera de toda duda. Simplemente desde mi visión es mucho más valioso aquel estudiante que a pesar de sacar menos nota cuenta con unas herramientas que le permitirán triunfar en el mercado laboral y la vida.
¿Cuáles son las herramientas que no potencia el sistema educativo español?
Aquí hago un resumen de las que más hecho en falta:
- Competitividad: bien entendida es una de las claves más poderosas para la superación humana. Poniendo un símil futbolero: Cristiano es mejor porque existe Messi y viceversa. La sana competencia enriquece al individuo y hace llegar nuestra capacidad de esfuerzo a niveles donde logramos avanzar como personas.
- En la cultura del egoísmo y la competencia generalmente salen perdiendo ambas partes porque no podemos ser los más listos en todo y reconocer que hay personas más inteligentes que tú en una determinada materia, te permite crear unas sinergias que en términos educativos tiene resultados increíbles.
- Inteligencia Emocional: el desconocimiento de uno mismo y de nuestras potencialidades es una de las limitantes del crecimiento más importante. Siempre uso la frase de " sino me creo yo que puedo quien va a creer en mí" y hasta ahora me ha funcionado.
- No significa que por la vida se vaya sin fracasos, estos van ligados a la propia existencia, pero el saber asumirlos y no convertirlos en limitantes implica un paso muy grande para poder avanzar.
- Capacidad Oral: es una de las más frustrantes. Puedes tener todo el conocimiento del mundo que sino sabes compartirlo de nada te vale. Incontables son las personas con las que me he encontrado que son incapaces de defender una tesis o idea en público aunque dominen de ella más que el 99% de su auditorio y parece poco relevante pero lo que hoy es un simple trabajo de clase, mañana es una entrevista de trabajo y la lista del paro está llena de personas que no saben poner en valor sus habilidades.
- Falta de vocación: existen muchos sesgos introducidos por la familia que autoimponen no física pero si psicológicamente al futuro profesional del estudiante. Varios son los casos que terminan una carrera y se dan cuenta de que solo la estudiaron porque sus padres lo querían pero cuando acaban sienten el vacío de no sentirse realizados o motivados.
- No hablemos del tema de las oposiciones y la cultura funcionarial porque me llevaría otro post y es un debate aún más profundo sobre el modelo de sociedad.
¿Está todo perdido?
Ni mucho menos, las cantidades de profesionales y científicos españoles en los mejores proyectos y empresas del mundo muestran que existe mucho talento en el sistema educativo español que bien enfocado y con los incentivos adecuados pueden lograr grandes cosas. Pero no solo de ingenieros vive la humanidad, la formación profesional debe ser un pilar para que una buena parte de la sociedad encuentre acomodo profesional y una manera de contribuir al desarrollo del país.
Las condiciones económicas están creadas por muy alarmistas que seamos. Viajen por el mundo hablen con estudiantes norteamericanos, asiáticos, africanos y latinos para que vean que España se encuentra en una situación privilegiada en cuanto a medios. No dejemos que la cultura del buenismo y la normalización del fracaso irrumpa en nuestras vidas.
Y como siempre la mejor educación es la que se da desde casa y por ahí debemos cimentar la base.
En próximos artículos haré referencia a la educación financiera y pondré el ejemplo del sistema educativo del que provengo y las mejores prácticas que aprendí de allí. Espero conocer y debatir con vuestras opiniones.