Las comisiones son un punto determinante a la hora de elegir un fondo de inversión, y entre ellas encontramos la comisión de éxito. Esta comisión está muy relacionada con la marca de agua o High Watermark que aplica el fondo. A lo largo del post veremos con profundidad qué es la marca de agua en la comisión de éxito.
¿Cómo funciona la comisión de éxito?
Dentro de las diferentes comisiones que puede cobrar un fondo de inversión, encontramos la comisión de éxito. Esta comisión se cobra por los beneficios que proporciona el fondo de inversión sobre el valor liquidativo. Esta es la definición que da el BOE:
En los fondos de inversión de carácter financiero, la comisión de gestión se establecerá en función de su patrimonio, de sus rendimientos o de ambas variables. Con carácter general, no podrán percibirse comisiones de gestión que, en términos anuales, superen los límites siguientes:
a) Cuando la comisión se calcule únicamente en función del patrimonio del fondo, el 2,25% de este.
b) Cuando se calcule únicamente en función de los resultados, el 18% de estos.
c) Cuando se utilicen ambas variables, el 1,35% del patrimonio y el 9% de los resultados.
Pero nos encontramos ante un problema...
¿Cuándo se cobra esta comisión?
Si un fondo presenta grandes minusvalías en el último año, no sería justo que los partícipes tuvieran que soportar una comisión de éxito por la revalorización posterior. La solución la encontramos en la marca de agua.
¿Qué es la marca de agua?
La sociedad gestora deberá articular un sistema de imputación de comisiones sobre resultados que evite que un partícipe soporte comisiones cuando el valor liquidativo de sus participaciones sea inferior a un valor previamente alcanzado por el fondo y por el que haya soportado comisiones sobre resultados. A tal efecto, podrá optar por una de las alternativas siguientes, especificando en el folleto el sistema elegido:
1.ª Imputar al fondo la comisión de gestión sobre resultados solo en aquellos ejercicios en los que el valor liquidativo sea superior a cualquier otro previamente alcanzado en ejercicios en los que existiera una comisión sobre resultados. El valor liquidativo máximo alcanzado por el fondo vinculará a la SGIIC durante períodos de al menos tres años.
La marca de agua establece que solo "se cobrará la comisión de éxito cuando el valor liquidativo sea mayor que el máximo anterior", durante 3 años. Así, si nuestro fondo sufre pérdidas durante este año, no pagaremos la comisión de éxito hasta que se supere el máximo anterior, reduciendo las comisiones soportadas.
Tiempo
El tiempo es un factor importante dentro de la marca de agua, dado que solo tiene una "memoria" de tres años. Por tanto, si un fondo sufre una bajada importante, cabe la posibilidad de que la marca de agua se acabe, y volvamos a soportar la comisión de éxito, pese a que el valor liquidativo no supere el máximo anterior. Con esto hay algo de polémica, ya que hay fondos que al sufrir pérdidas importantes los primeros años de vida, cierran el fondo y abren otro similar, para así poder cobrar comisiones de éxito.
En cuanto al tiempo de la marca de agua, lo mejor es preguntar a la gestora cuánto tiempo dura la marca de agua, puesto que las gestoras pueden aplicar diferentes plazos temporales, debido a la diferencia de regulación por país.
Beneficia al partícipe
El objetivo principal de esta medida es beneficiar al partícipe, ya que si una gestora tiene un mal rendimiento, dejará de cobrar las comisiones de éxito.
Además, los inversores solicitan cada vez más la comisión de éxito, por el hecho de que las gestoras no cobran una cantidad fija (comisión de gestión), estando su "sueldo" relacionado con su capacidad de generar beneficios para el partícipe.
Junto con la marca de agua, consiguen que esta búsqueda de beneficios por parte de los fondos de inversión sea a medio plazo, gracias a la memoria de tres años de la marca de agua.
Ejemplo
Nos encontramos con el fondo X que aplica una comisión de éxito del 9%. Un inversor decide entrar al fondo con un importe inicial de 100.000€ y el primer año por las buenas perspectivas macroeconómicas, el fondo obtuvo una rentabilidad del 5%, entonces, la cantidad inicial invertida del inversor aumentaría a 105.000€ (100.000 + 5%) y tendría que pagar al gestor 400€ (105.000 - 100.000= 5.000 x 9%) por su desempeño.
Ahora bien, al año siguiente, por una distribución ineficiente de la cartera, el fondo ha obtenido unas rentabilidades negativas del 5%. En este caso, el capital invertido se reducirá a 99.750€ (105.000 x 95%), pero no tendrá que pagar comisión de éxito, ya que la rentabilidad del fondo no ha superado a su punto más alto, es decir, desde el primer año hasta el tercero, si la rentabilidad del fondo no superase a ese 5% inicial, no se cobraría la comisión de éxito.
En conclusión, la marca de agua es una medida como protección al inversor. Por una parte, consigue que no tengan que pagar comisiones extra por incrementos en el valor liquidativo, que no significan beneficios reales para los partícipes. Por otra, al mantenerse durante varios años, hace que las gestoras deban tener una visión enfocada a dar beneficios para el partícipe a medio plazo, ya que las minusvalías de los inversores, significarán menores comisiones para ellos.