La situación del mercado de bonos americano se enfrenta a una tormenta perfecta que amenaza su supervivencia. El volumen es tan descomunal que será muy difícil para la FED mantener el control sin recurrir una vez más a las compras masivas de papel.
Se está formando un conjunto de acontecimientos que si se llegan a unir en el tiempo, pueden protagonizar un colapso épico. Un sucinta descripción a continuación, enmarca el problema.
1º). Todos sabemos que la deuda USA crece sin parar.
El último en reconocerlo ha sido CBO (Oficina de Presupuestos del Congreso), dictaminando que el déficit previsto para el ejercicio subirá de 1,5 billones a 1,9 billones de dólares. Y no solo revisa el año en curso, sino que añade 2,1 billones de dólares de nuevo déficit en el periodo 2025-2034, respecto de las previsiones anteriores.
Según las proyecciones de la CBO, el déficit presupuestario federal en el año fiscal 2024 es de 1,9 billones de dólares. Ajustado para excluir los efectos de los cambios en el calendario de ciertos pagos, el déficit asciende a 2,0 billones de dólares en 2024 y aumenta a 2,8 billones de dólares en 2034. Con tales ajustes, los déficits equivalen al 7,0 por ciento del producto interno bruto (PIB) en 2024 y al 6,5 por ciento del PIB en 2024. del PIB en 2025. Para 2027, a medida que los ingresos aumentan más rápido que los desembolsos, caen al 5,5 por ciento del PIB. A partir de entonces, los desembolsos generalmente aumentan más rápidamente que los ingresos. Para 2034, el déficit ajustado equivaldrá al 6,9 por ciento del PIB, significativamente más que el 3,7 por ciento que los déficits han promediado durante los últimos 50 años.
Cambios en las proyecciones presupuestarias de la CBO
En las proyecciones actuales de la CBO, el déficit para 2024 es $0,4 billones (o 27 por ciento) mayor que en las proyecciones de la agencia de febrero de 2024, y el déficit acumulado durante el período 2025-2034 es mayor en $2,1 billones (o 10 por ciento). El mayor contribuyente al aumento acumulativo fue la incorporación de legislación recientemente promulgada en la base de referencia de la CBO, que añadió 1,6 billones de dólares a los déficits proyectados. Esa legislación incluía asignaciones suplementarias de emergencia que proporcionaron 95 mil millones de dólares para ayuda a Ucrania, Israel y países de la región del Indo-Pacífico. Por ley, ese financiamiento continúa en años futuros en las proyecciones de la CBO (con ajustes por inflación), aumentando los desembolsos discrecionales en 0,9 billones de dólares hasta 2034.
La deuda USA está fuera de control.
Y en función del PIB.
El antecedente anterior fueron las cifras de deuda/PIB de la II Guerra Mundial, con una justificación debido a la necesidad de financiar una economía de guerra. Pero fuera de ese periodo, la deuda no superaba el 30% del PIB, hasta el siglo XXI. Desde 2008 (donde el sistema fiduciario se rompió, pero no nos lo dijeron, poniendo parches para disimular), el crecimiento de la deuda es dramático, superando todo lo visto en más de cien años (y sin guerra mundial).
La deuda USA ha entrado en una espiral infernal donde se necesita crear nueva deuda solo para pagar los intereses, lo que implica la destrucción del sistema al acelerar el crecimiento de la deuda, entrando en ese circulo vicioso que termina con la perdida de confianza en el sistema y una devaluación brutal frente a los activos sólidos.
Este gráfico (crecimiento de los pagos por intereses de la deuda USA) debería dar pánico.
2º). Inseguridad en la deuda USA.
La tendencia a invertir en el mercado de bonos USA, por parte de naciones extranjeras ha dado un vuelco en las expectativas.
a)- Ventas de deuda USA por parte de extranjeros.
Como consecuencia de la formación de dos bloques antagónicos, la necesidad de invertir en dólares el excedente comercial, por parte de algunas naciones como China, ha sido cancelado. Es más, desde hace años, China no deja de vender deuda USA., con una gran aceleración en los últimos trimestres.
b)- Sanciones fomentan inseguridad en la inversión en dólares.
Los continuos aumentos de aranceles tampoco ayudan y la confiscación de los activos en dólares ejecutada Rusia, como consecuencia de las medidas sancionadoras por la invasión de Ucrania, ha advertido al resto del mundo que la posesión de bonos en dólares, ya no es segura, con la consiguiente lenta reestructuración.
c)- Fin del acuerdo del petro-dólar.
Para colmo, la finalización del acuerdo entre Arabia y EE.UU., para las ventas del petróleo saudí en dólares y su posterior reinversión en deuda USA, supone otro clavo en el ataúd de la financiación extranjera del mercado de bonos.
d)- El yen está muriendo.
La debilidad del yen japonés puede agotar las reservas de dólares de Japón y entonces acudir a la venta de bonos USA, para defender la moneda.
El cierre del yen japonés nos "prepara" para una posible ruptura de la zona de 160 yenes por dólar. La última vez que se acercó a esta zonas hace unas semanas, requirió la intervención extraordinaria del Banco de Japón, con una inyección de más de 60.000 millones de dólares para detener la devaluación.
La suma de todos estos puntos se resume en este gráfico, donde el porcentaje de deuda estadounidense en manos de extranjeros no deja de caer y en cualquier momento puede acelerar su descenso con ventas adicionales.
La suma de todos estos puntos se resume en este gráfico, donde el porcentaje de deuda estadounidense en manos de extranjeros no deja de caer y en cualquier momento puede acelerar su descenso con ventas adicionales.
Una actualización.
https://wolfstreet.com/2024/06/19/the-foreign-holders-of-the-ballooning-us-debt/
Europa, intentando sostener la deuda USA (vasos comunicantes).
https://wolfstreet.com/2024/06/19/the-foreign-holders-of-the-ballooning-us-debt/
Europa, intentando sostener la deuda USA (vasos comunicantes).
3º). Pérdidas históricas en carteras de renta fija.
La subida de la rentabilidad de la deuda mundial como consecuencia de la subida de tipos para frenar la inflación mundial, ha tenido efectos colaterales en la valoración de las carteras de renta fija de casi todas las entidades financieras.
El crash en el mercado de renta fija es tan evidente, como silenciado en los medios de comunicación de masas.
Al subir la rentabilidad , baja la cotización de la cartera de renta fija y las entidades entran en fuertes pérdidas no realizadas, pero reflejadas en la contabilidad.
Todos hemos visto este gráfico con las pérdidas de la entidades norteamericanas.
Pero no solo las entidades americanas tienen activos de renta fija. Por ejemplo en Japón tienen grandes cantidades de deuda USA.
¿Cómo se puede poner en peligro el mercado de bonos?
Imaginen que una entidad tiene grandes pérdidas y se ve obligada a ejecutar su cartera de renta fija. Dado que todas las entidades tienen grandes pérdidas provenientes de sus carteras de largo plazo, acumuladas durante la década de tipos cero, la venta de una entidad puede provocar una salida en cascada, como ocurría en la película "Margin Call".
Pues bien, eso es lo que acaba de ocurrir con el gigante bancario japonés Norinchukin.
"En octubre pasado, cuando las heridas de las quiebras bancarias de marzo de 2023, que superaron a la crisis financiera mundial en activos totales y que provocaron la última intervención de la Reserva Federal, fijando el punto más bajo del mercado en los últimos 16 meses , aún estaban frescas, llegamos a un acuerdo de no consenso. Predicción: dijimos que, dado que la Reserva Federal ha vuelto a respaldar al sistema financiero estadounidense, " la próxima quiebra bancaria será en Japón " .
Esta predicción solo se volvió más cálida dos meses después, cuando, inexplicablemente, el banco japonés Norinchukin, mejor conocido como la ballena CLO de Japón , fue silenciosamente agregado a la lista de contrapartes del Standing Repo Facility de la Reserva Federal , también conocido como el fondo para sobornos de rescate de bancos extranjeros de la Reserva Federal.
Pero si esa fue la primera, y aún lejana, señal de que algo andaba muy mal en uno de los mayores bancos de Japón (Norinchukin es el quinto banco más grande de Japón con 840 mil millones de dólares en activos ), hoy el proverbial canario pisó una bomba de neutrones dentro de la mina de carbón japonesa, porque según Nikkei, Norinchukin Bank " venderá más de 10 billones de yenes (63 mil millones de dólares) de sus tenencias de bonos gubernamentales estadounidenses y europeos durante el año que finaliza en marzo de 2025, con el objetivo de frenar sus pérdidas por las apuestas en bonos extranjeros de bajo rendimiento. una de las principales causas del deterioro de su balance y reducir los riesgos asociados con la tenencia de bonos de gobiernos extranjeros"."
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Conclusión.
Este último punto tiene el potencial para desencadenar ventas masivas en el mercado de bonos USA, si las rentabilidades empiezan a aumentar como consecuencia de la venta en cadena, obligando al resto de tenedores de deuda a vender con prisas, porque el precio cada vez es menor (en la película citada, se ve como en pocas horas los precios se hunden irremisiblemente).
Resumiendo, tenemos una deuda creciente sin control, con unos compradores extranjeros en huida como consecuencia de la política estadounidense (y ya veremos si no sucede lo mismo con Europa) y un inicio de ejecución de posiciones que puede derivar en una liquidación extraordinaria, si a las posiciones en los mercados de renta fija, le unimos los derivados del mercado OTC.
Los mecanismos de control siguen siendo los habituales, bajadas rápidas de los tipos si se produce una liquidación, junto a las compras por parte de los Bancos Centrales. Pero claro, la inflación espera al final del pasillo, si los BC empiezan a ser parte activa en una nueva inundación de liquidez. Y la pérdida de confianza en la moneda (ya muy avanzada entre el otro bloque), puede terminar en un episodio de alta inflación e incluso hiperinflación.
Ya saben, elegir entre lo malo y lo peor.
Cuidado, cuidado ...
Saludos.
PD. No obstante lo dicho, recordar que la FED tiene un control absoluto sobre el mercado. Un indicador de la pérdida de control incipiente, sería la superación del 5% de rentabilidad en el bono a 10 años. Mientras tanto, seguiremos en la primera fase de un posible colapso ...
El gráfico parece querer indicar un descenso hacia la zona del 3.5%, para luego iniciar una nueva fase alcista en el medio-largo plazo.