Hoy voy a hacer una excepción y voy a hablar de política en términos generales. Y sobre todo, de las consecuencias que sufrimos cuando la permanencia en el poder a toda costa , es el objetivo de los políticos, en lugar del gobernar para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos, sin exponerlos a un endeudamiento excesivo.
Introducción.
La deriva actual procede de una democracia imperfecta, donde el voto cautivo permite ganar elecciones, convirtiéndose en un fin en si mismo y cuyas consecuencias pagaremos todos.
Las fases finales de un ciclo suelen caracterizarse por una degradación en todos los aspectos que rodean la sociedad. Me voy a referir a España, país en el que vivo, pero se puede entender que es extrapolable a gran número de países sin distinguir el color político que domine en cada uno de ellos.
La corrupción (con frecuentes casos judicialmente resueltos), el clientelismo político, el nepotismo ampliamente difundido a lo largo de toda la geografía española, la perniciosa influencia de los grupos de presión agrupados en conglomerados sectoriales (farmacia, renovables, banca y energéticas) y en general ese "que hay de lo mío" que impera en política (con discusiones incluso entre los socios de poder), se han extendido tanto, que son características del "Poder" en el periodo actual.
En nuestro caso, el presidente Sánchez y su partido han utilizado todas las armas a su disposición para mantenerse en el poder. Si unos días-meses antes aseguraban que la amnistía era imposible, llegado el momento, el "olvido" preside sus acciones y ya no hay líneas rojas. Todo es admisible para conseguir el objetivo. No hace falta rasgarse las vestiduras, es parte del juego político en el que todos participan, pero es un ejemplo que todos entienden perfectamente.
Y si para gobernar se puede hacer uso de cualquier método, las consecuencias en forma de resultados económicos también serán la norma común. La compra de votos con determinadas medidas populistas será algo habitual para los políticos en el poder. Y todo ello conlleva un gasto económico insostenible a largo plazo.
Hace mucho tiempo que el estado del bienestar es inestable si pretendemos tener un balance presupuestario equilibrado. Mantener el status a base de incrementar la deuda, solo funciona mientras consigamos financiación a buen precio.
A partir de ahora, nos quedamos sin factores favorables. Una breve lista de las "desgracias".
A partir de ahora, nos quedamos sin factores favorables. Una breve lista de las "desgracias".
Se terminan los fondos Next Generation.
Hasta ahora el BCE ha ejercido de escudo protector para conseguir financiación a buen precio durante más de una década. Después de la pandemia han sido los fondos Next Generation EU, los que han financiado el crecimiento.
Pero estos fondos se acaban y aquí seguimos con el gasto desorbitado, como si todos los días hubiera que aplicar medidas excepcionales.
No se puede mantener la senda del gasto como si nada, sabiendo que la factura está siendo enorme en el incremento de la deuda, a pesar de los elevados fondos gratis cortesía de una UE demasiado permisiva.
La deuda en España está fuera de control desde 2008.
Hasta ahora hemos mantenido bajo control los intereses de la deuda porque el BCE ha comprado y recomprado gran parte de la deuda y en lo que no ha intervenido directamente, ha generado una confianza en los inversores capaz de asegurar un flujo constante de dinero si era necesario, vía sucesivas QE´s y TLTRO bancarios.
2025, el año de las consecuencias y los ajustes.
En 2020 escribí este post avisando de la posible desintegración de España si no se racionalizaba el gasto.
https://www.rankia.com/blog/pico-petroleo-consecuencias/4709841-desintegracion-espana
En lugar de intentar ajustar el balance presupuestario, lo que se hizo con la connivencia del BCE es aplicar más y más deuda, con la bendición y apoyo del BCE Si no te parece bien una taza, pues toma dos...
Tres años después la deuda ha cogido velocidad y ha adquirido una pendiente más empinada. Pero lo que era viento de cola en 2020, ahora con la aparición de la inflación, la subida de tipos más la QT del BCE, se ha transformado en huracán en contra.
Tras el final de los fondos Next Generation y el final de las compras del BCE, solo queda una partida dedicada a la deuda periférica, donde todavía se siguen recomprando los vencimientos de deuda, para evitar que la prima de riesgo con Alemania se dispare.
Este último paraguas de protección acabamos de conocer que también desaparece, a partir de 2025.
"Los tipos de interés oficiales del BCE son el instrumento principal para fijar la orientación de la política monetaria. El Consejo de Gobierno también ha decidido hoy avanzar en la normalización del balance del Eurosistema. Durante el primer semestre de 2024, prevé seguir reinvirtiendo íntegramente el principal de los valores adquiridos en el marco del programa de compras de emergencia frente a la pandemia (PEPP) que vayan venciendo. En el segundo semestre del año, espera reducir la cartera del PEPP en 7,5 mm de euros mensuales en promedio. El Consejo de Gobierno prevé poner fin a las reinversiones en el marco del PEPP a final de 2024."
La disciplina presupuestaria europea se restablecerá en 2025.
La Comisión Europea ha presentado su muy esperada propuesta de reforma del Pacto de Estabilidad y Crecimiento (PEC), con la intención de recuperar la disciplina presupuestaria de los países miembros de la Unión Europea a partir de 2025. El objetivo es alcanzar un equilibrio entre disciplina fiscal y margen para la inversión pública. Durante los próximos meses está asegurado un complicado debate entre los Veintisiete.
Por lo tanto, está claro que vienen curvas para 2025, después de un amplio margen de ajuste dado por la UE para que los estados tuvieran tiempo para adaptarse a la economía post-covid.
Ahora volviendo a España, esos ajustes que deberían darse en 2024, han saltado por los aires como consecuencia de los compromisos adquiridos por el presidente Sánchez con sus formaciones aliadas. El coste económico es difícil de evaluar a priori, pero todos sabemos que será bastante elevado, justo en el momento en que se necesita una política restrictiva en los gastos y una política expansiva energética con la reciente aprobación de la COP28.
Combinar el ajuste presupuestario señalado por Europa , con las fuertes inversiones en energías renovables y el dispendio de los acuerdos políticos para mantenerse en el poder, es como caminar en un hilo muy fino en el abismo, sin red debajo. Encima soplan vientos huracanados, cuando el BCE avisa que deja de financiarnos ( no recomprará deuda) y los tipos de interés han subido demasiado, elevando el pago de intereses.
Crisis en Europa.
Para mayor desgracia, la economía europea con la que hacemos la mayor parte de los negocios y que aporta gran cantidad de visitantes para sostener el sector turístico, atraviesa una enorme crisis.
"Datos recopilados entre el 5 y el 13 de diciembre.
A juzgar por los datos preliminares de la encuesta PMI®, la actividad empresarial de la zona euro cayó a un ritmo más pronunciado en diciembre, cerrando un cuarto trimestre en el que la actividad total ha caído a su ritmo más rápido de los últimos once años, con la única excepción de los meses de la pandemia de principios de 2020. Se volvió a registrar una desaceleración tanto en el sector manufacturero como en el sector servicios, y ambos registraron nuevas caídas pronunciadas en la entrada de nuevos pedidos, lo que provocó una mayor reducción de los pedidos pendientes de realización. Se redujeron puestos de trabajo por segundo mes consecutivo, ya que las empresas disminuyeron su capacidad operativa en línea con el empeoramiento de la situación de la cartera de pedidos y la persistencia de unas perspectivas sombrías para los próximos doce meses, con un sentimiento futuro que se mantiene muy por debajo de su media a largo plazo a pesar de subir ligeramente. Las fábricas también redujeron los inventarios de insumos a un ritmo no observado desde 2009.
Las señales de inflación fueron mixtas: la inflación de los costes de los insumos se ralentizó, pero la inflación de los precios de venta se aceleró, manteniéndose esta última notablemente elevada con respecto a los estándares históricos."
Demografía.
Otro factor negativo de cara al ajuste de 2025 es la demografía negativa en España.
"En España la generación del baby-boom se retrasó unos doce años respecto a los demás países. Entre 1958 y 1977 nacieron casi 14 millones de niños, 2,5 más que en los veinte años anteriores y 4,5 millones más que en los veinte años siguientes.
Esta generación se encuentra ahora en edad laboral e iniciará su jubilación en torno al año 2024, lo que aumentará aún más la presión sobre el sistema de Seguridad Social. "
Solo la inflación controlada está siendo favorable, aunque depende de los precios volátiles del petróleo. Si estos se dieran la vuelta, tenemos un ejemplo de lo que es una "tormenta perfecta".
En esta tesitura se necesita un hombre de estado al frente del país y España, por desgracia, tiene un dirigente que solo persigue permanecer en el poder a costa de lo que sea. Tampoco la oposición es un ejemplo, empeñada en el acoso y derribo, en lugar de proponer soluciones que favorezcan a todos los ciudadanos. Siempre dirán que es culpa del "otro" y la negociación necesaria en tiempos de crisis, ha brillado por su ausencia.
En los tiempos que el partido de la oposición estaba en el poder (desde 2008), tampoco la deuda fue un objetivo, sino que siguió creciendo al mismo ritmo, sin importar quien estuviese al mando del gobierno.
Conclusión.
Si en 2025 Europa se pone firme, la degradación política que ahora parece no importarnos, dará paso a una grave crisis económica, una vez que los apoyos del BCE desaparezcan por completo. El ajuste que vendrá, seguramente orquestado desde la Unión Europea, tenía que haber sido previsto con tiempo, en lugar de dedicarnos a esas luchas políticas con coste adicional, que tanto nos gustan en España.
¿Cómo se realiza un ajuste drástico en el presupuesto, sin tocar los compromisos políticos adquiridos de gasto?
Pues ... subiendo impuestos.
Solo una opinión.
Saludos.